Capítulo 31

253 21 7
                                    

Me llevaron al coche de policía y me metieron dentro, estos conducieron hasta comisaria mientras yo gritaba, porque yo no hice nada.

Narra Aitana

Estuve llorando todo el tiempo, no hay salida, supongo que mi destino tiene el nombre de Richard, tendré que formar una familia con Richard, yo pensé que el destino me unió a Erick por algo, pero no, debo aceptarlo, debo estar con Richard. Me encuentro en la misma habitación de antes, atada también.

Richard entra con una bandeja y lo deja delante de mi, corta un poco de pan y me lo mete en la boca, yo como, y él me sigue dando de comer, yo como desesperada.

Mas tarde me encuentro sola en la habitación y atada todavía. Es de noche, y no tengo ganas de dormir, todos estarán durmiendo, sería una buena oportunidad de escapar, solo falta una cosa, ¿como puedo desatarme? Me duele los brazos y las muñecas, no puedo dormir así. Muevo mis brazos para ver si puedo desatarme, y no lo consigo, y me duelen más.

Intento volver a quitármelo y me enfoco en eso, si me va a llevar toda la noche que así sea, me ató muy mal este hombre, ya no siento mis manos, menos las muñecas, me duele muy mal, sigo intentando esatarme y aunque no tenga hora se que esto me ha llevado un buen rato, pero por fin pude desatarme, me levanté adolorida, también me dolían las piernas, lo primero que hice es intentar abrir la puerta, pero no, no podía, estaba cerrada, que puta mierda, todo eso para nada, pero por lo menos no dormiré con dolor ni sentada. Me eché en el suelo y dormí.

Narra Richard

Me desperté de mi sueño, era de noche todavía, se me había ido todo el sueño, y vaya que no tenía ganas de dormir, subí a la habitación de Aitana para ver como estaba. Abrí la puerta y la vi tirada en el suelo. ¿Como? No se que hacer mas que portarla en mi hombro y salir casi corriendo de la habitación. Al salir de la casa, abrí la puerta trasera de mi coche y la metí ahí. Entré de nuevo en la casa y fui a cambiarme.

Narra Aitana

Sentí que mi cuerpo estaba un poquito más cómodo, me levanté y estaba en un coche, ¿acaso es un sueño? Me giré y vi el edificio en donde Richard me encerró, ¿será que me dejó salir? Intenté abrir la puerta del coche y este se abrió sin ningún problema, sentí que era libre, miré el sol y es como si lo viera por primera vez. Fui caminando hacia atrás, llegué a correr un poco y reir, recordé a Erick, así que empecé a dirijirme aun bar, y así poder cargar mi móvil.

-¡Aitana! -oí gritar a alguien, entonces me di la vuelta.

Era Richard, este empezó a correr hacia mi dirección, y no se porque pero yo también corrí.

-¡Ven aquí Aitana!

-¡¿Por que me persigues?! -comencé a llorar.

-¡Por que eres mía!

-¡Soy de Erick! ¡Déjame ir, por favor!

Me caí gracias a él que se abalanzó sobre mi.

-¡Soco...! -me tapó la boca.

Le lamí la mano para que me dejara, pero no funcionó.

-No seas cría, no voy a quitar mi mano de tu boca porque me hayas lamido.

Entonces le mordí, y gritó levemente.

-¡Puta! -gritó y me empujó.

Me levanté como pude y volví a correr.

-Maldita p... -oí que dijo. - ¡Ven aquí!

Me persiguió de nuevo.

-¡Socorro! ¡Ayúdenme, por favor, ayudadme, socorro!

Traté de huir pero fue imposible, volvió a atraparme y esta vez no pude soltarme, yo pensé que ya iba a salir de aquella prisión, que viviría feliz con Erick. Pero es imposible, me rindo, me rindo... no podré salir de aquí nunca. Dejé de forzar y cerré mis ojos, lágrimas salieron de estas.

-Por estúpida -dijo y me golpeó.

Caí al suelo y no supe nada más de mi.

(...)

Me levanté, estaba en la cama de Richard, recuerdo haber intentado escapar, y no lo conseguí, luego él me golpeó y me desmayé. Entró alguien dando un portazo, todavía veía borroso, pero pude saber quien era, Richard.

-¡Es el colmo! ¡Despierta!

-¡Que quieres? -dije llorando.

-Tu estúpido superinútil a matado a mi guardia.

-¿Erick?

-¡Si! ¡Erick, si! -contestó enfadado.

-No puede ser, él no es un asesino... -susurré.

-¡Pues créetelo, ahora está en la cárcel!

-¿Que? ¡No puede ser! ¡No empieces con tus tonterias, Richard!

-No son tonterias -dijo mofándose de mi. -Acabo de verlo en las noticias, cabrón -susurró lo último.

-No... -dije empezando a llorar.

No puede ser, Erick es un asesino, un asesino. Asesino, asesino, asesino, asesino... me desamayé.

Narra Erick

Tres años encerrado por un delito que no cometí

Narra Aitana

Una vida contigo había sido lo mejor, hasta el final, nos separamos y empecé a sufrir, si tan solo nos hubiéramos quedado en casa, esto no estaría pasando, yo estoy secuestrada, tú preso, hasta saber cuando tiempo podremos salir, no lo sabemos, yo te diría que te echo de menos pero no me salen las palabras, estoy aquí por tu culpa, no he hecho nada mas que llorar y desmayarme, también preocupada por ti, se que no fue a propósito pero... solo quiero decirte que te quiero y que no quiero volver a verte por el resto de mi vida, tampoco quiero que me llames, bueno, no tengo bateria, tampoco quiero que me busques, he decidido vivir con Richard y no es que lo ame pero, he tomado una decisión.

FIN

Una Vida Contigo | Erick Brian ColónDonde viven las historias. Descúbrelo ahora