Iba de camino a la salida y me vuelvo a encontrar a Valentina, esto no es posible.
-Erick -dice mi nombre como si fuéramos a luchar.
-Valentina -le sigo el juego.
-Gracias por dejar mis tacones en objetos perdidos.
-De nada.
-¡Era sarcasmo!
-Vale. ¿Me dejas? -pregunté exigiendo pasar.
-Si, después de que me digas si te gusta mi coleta. -se lo toca.
-Oh -sonrío dulce y falsamente a la vez -Es una monada y me lo voy a ¡quedar! -le arranco la cola.
-¡Ah! Me has arrancado la cola de raíz.
-¿Quien iba a decir que tu pelo no era natural? Es artificial.
-¿Pero como has podido?
-Chao, caballo. -me despido de ella y salgo de la empresa.
Me meto en mi coche y conduzco. Al llegar a casa, abro la puerta y voy directamente a mi habitación.
-¿Erick eres tú?
-Si.
-¿Que tal?
-Bien -digo sin ánimos.
-¿Pasa algo?
-No.
-¿Seguro?
-No, Valentina es una pesada.
-¿Otra vez ella?
-Bueno, hoy a sido mejor que los demás.
-¿Por que?
-Siéntate y te cuento.
Se fue a sentarse en el sofá y yo le seguí
-Cuando entré en mi oficina, al girarme vi a Valentina ahí. Me dice que si hacemos sexo me dejaría en paz.
-Oh -puso su mano en la boca.
-Accedí -sus ojos se cristalizaron -Me dijo que le desvistiera y empecé por los tacones, los cogí y fui a tirarlo en objetos perdidos. Mas tarde cuando iba saliendo para llegar a casa me encuentro con ella otra vez - hablé rápido antes de que empezara a llorar -Me dice que opine de su coleta, le dije que era una monada y me lo iba a quedar -dije mas tranquilo -Le arranqué la cola de su cabeza.
-¡Erick! -se asustó.
-Tranquila, era artificial.
-Ay, casi me matas del susto -dijo con su mano en su pecho. -¿Y luego que pasó?
-Nada, entré en mi coche y me vine para aquí.
-Uf, por poco y me matas. Pero me alegro, así sabrá que tienes dueña -se puso encima de mi.
Me acaricío y me besó, yo paseé mis manos por todo su trasero y lo apreté.
-Vale, ¿que hacemos? -me pregunta.
-¿Que quieres hacer tú?
-Mirar películas.
-Mm.
-¿Que?
-Podíamos hacer otra cosa divertida.
-Si, podemos ir al cine, y luego ir a comer. Invitas tú. -se levanta.
-No, otr...
-¡Gracias! -se fue corriendo.
-¡Ay, las chicas estáis locas! -grité cayéndome lentamente al suelo desde el sofá aburrido.
Claro que están locas, Valentina está loca, mi novia también, ¿entonces? Pff.
-A vestirse se ha dicho. -dije una vez levantado.
Caminé hacia mi habitación, entré en el baño y me di una ducha. Al terminar me vestí atractivamente, como siempre, miré al salón en busca de Aitana pero no estaba.
-¡Las chicas sois muy tardonas! -grité para que me escuchara.
Fui a la cocina a por un vaso de agua, salí al salón y me quedé mirando la tele.
-¿Decías? -me giré y ahí estaba Aitana posicionándose sensualmente con una sonrisa.
Dejé caer mi vaso de cristal, que aún llevaba agua, tenía la boca abierta y no podía quitar mis ojos de ella.
-A... Ai... tana... Aitana, que pivon -dijo acercándose.
-Lo se -me miró con su sexy sonrisa.
Me acerqué a ella y la besé.
-¿Y si cambiamos la salida por sexo?
-No, ya estoy vestida.
-Bien, salimos.
-¿Y el vaso de agua? -me recuerda ella.
-Vale, lo limpio -dije estresado.
Después de recoger los minicristales del suelo salimos hacia mi coche y entramos. Empecé a conducir y en eso mi móvil vibra, lo saco de mi bolsillo y me fijo en el número, paró el coche y contesto, pues el semáforo estaba en rojo y tenía tiempo de contestar.
-¿Hola? ¿Quien es?
-Hola, soy yo de nuevo, Andrea Méndez, le llamo para preguntarle si va a venir o no, porque me dijo a las cinco, y ya dado las cinco y no está aquí.
-Ah, si, voy por allá, se me olvidó, perdón.
-No se preocupe, hasta luego.
-Adiós.
-¿Que pasa, donde tienes que ir? -me mira preocupada.
-El trabajo. Tengo que rellenar algo, un formulario, no se.
-Ah, ¿vais a ir?
-Claro que si. ¿No te molesta? -pregunté ya que no volvió a hablar.
-No, no, en absoluto.
Por como lo dijo supe que hablaba en serio.
Volví a conducir, y llegué hasta ahí.
-¿Quieres quedarte o venir?
-Me quedo.
-Vale, vuelvo en un segundo. -salí del coche y me fui hacia donde tenía que ir.
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Una Vida Contigo | Erick Brian Colón
Romance|Segunda temporada de "pervertidos"| Aitana escapa del altar con ayuda de Erick, a construir una nueva vida, pero ellos no saben lo que les espera, no todo es de color rosa. Aitana y Erick tendrán que pasar por muchos obstaculos para estar juntos, n...