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Durante todo el fin de semana le dieron consejos, la engatusaron, la instruyeron y la aguijonearon y poco a poco la convencieron.
A pesar de que Adeline se quejó y protestó le encantaba que la escucharan y que les importara. En realidad eran los 2 mejores amigos que alguien pudiera tener.
Para el domingo, cuando se iba había tomado una decisión.
Le diría a Namjoon que lo quería.
Cuando se iba, Adeline tenía muy claro como debía actuar. Primero le diría a Namjoon lo que sentía y dependiendo de cómo reaccionara, quizá tomaría en consideración algunos consejos de Hoseok, si es que no estaba muy ocupada intentando recomponer su corazón roto y buscando otro trabajo.
Aquello último era lo que estropeaba su decisión... le diría que lo quería y Namjoon le contestaría muy amablemente que estaba seguro que sería más feliz trabajando para alguien más. Lo perdería a él y a su trabajo.
Bien... en aquel momento se sentía muy triste, pero por lo menos tenía trabajo ¿Qué hacer?
- Estas muy negativa.
Se dijo a si misma cuando ya estaba acostada en su cama.
"Adeline Hortensia de las Mercedes" sonrió mientras recordaba como la molestaban sus amigos con estos motes.
- Tienes que salir de esto, superarlo o decirle como te sientes.
Hoseok le llamó el martes.
- ¿Y bien? ¿Lo has hecho? ¿Qué te dijo? ¿Cómo te fue?
Adeline dejó pasar unos momentos antes de contestar pero Hobi imaginó las respuestas.
- No lo has hecho.
- Lo estoy intentando.
- ¡Adeline Hortensia de las Mercedes! Si vas a hacerlo, hazlo ¡YA!
- Lo haré, lo haré.
- Mañana por la mañana, cuando él llegue a la oficina, míralo a los ojos y di: "Tengo que hablar contigo de algo personal". Queda con él y dile que vaya a tu habitación.
- Oh my lord...
- Es mejor que esté en tu territorio.
"Es verdad. Será más fácil para él marcharse e irse".
- Puedes hacerlo Addy.
- ¿Addy?
- Es que lo de Hortensia de las Mercedes no funciona jejeje. Pero lo importante es que sé que tú puedes hacerlo.
- Si puedo, lo sé...
A la mañana siguiente cuando Namjoon la llamó para comprobar la agenda, estaba preparada. Se levantó de su escritorio, se pudo la carpeta de los documentos bajo el brazo, tomó un bolígrafo, su grabadora y se encaminó hacia su despacho.
"Estoy bien" pensó. "Entera. Controlada. Serena y preparada".
En cuanto entró al despacho lo primero que vio fue al rubio absorto en algo del ordenador, cerró bien la puerta y se sentó en la silla que quedaba frente a Namjoon.
- ¿Adeline?
Eso fue todo lo que dijo... pero parecía como si hubiera dicho: "¿Hay algún problema y tenemos que tratarlo ahora mismo?". No. No lo hicieron.
Adeline solo señaló la carpeta y sonrió.
- Estoy lista. Cuando quieras.
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