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Cuando llegó a su habitación Adeline reservó un vuelo a Ilsan por internet. Después llamó a Yoongi.
- La boda se ha cancelado.-
- Oh no.-
- Oh si. Hemos roto. No podía seguir con esto. He cancelado la boda y he dejado el trabajo.-
Yoongi debió saber que no era el momento de hacer preguntas.
- Ven a casa y quédate conmigo un tiempo. Tienes que calmarte.-
- Esperaba que me lo ofrecieras. Es lo que necesito ahora. Tengo un billete de avión pero no estaba segura de qué hacer una vez llegara a Ilsan.
- Estúpida, pues vas a quedarte en mi casa.-
- Parece una locura ¿no? Quiero ir a casa pero nadie de mi familia vive ahí.-
- Estoy yo.-
- Lo sé. Y me hace muy feliz.-
- ¿Quieres que vaya a recogerte al aeropuerto?-
- No, voy a alquilar un coche.-
- No me importa ir por ti Adde.-
- Puedo ir sola perfectamente y lo prefiero.-
- Muy bien. Ven directo a mi casa. Si no estoy aquí, estaré en la tienda.-
- Yoongi...-
- ¿Si?-
- Por favor no llames a Hobi. Yo lo haré mañana. Va a decirme que estoy loca. Quizá lo esté pero no creo que pueda resistir oírlo en este momento.-
- Lo que tú quieras pero ven a casa.-
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Cuando Adeline detuvo el coche frente a la casa, Yoongi estaba ahí esperándola. Salió del coche y Yoongi le tendió los brazos. Adde lo abrazó tan fuerte como pudo, al final el pelimenta la tomó por los hombros y la miró.
