Capítulo 29

4.2K 390 32
                                    

Capítulo veintinueve

El regreso a América, se dio sin inconvenientes en el tiempo previsto; los dos hombres habían estado al pendiente de sus esposas, procurándoles la mayor comodidad que fuera posible, en ese viaje de regreso. Y una vez en casa, las convencieron de tomarse aunque fuera un par de días, para descansar.

Y mientras las mujeres descansaban del viaje; Ethan y Jefferson se reunieron con Lane en el despacho para hablarle sobre la posibilidad de financiar una organización para la preservación del puma de Norteamérica y otros animales en peligro, específicamente en los estados de Idaho, Montana y Wyoming; no era que no quisieran abarcar más, era que se mantenían dentro de lo razonable y ya sería bastante si pudieran preservar la especie en esos estados.

Lane los asesoró, y trajo un experto en riesgos e inversiones para ver de cuánto capital podían disponer para iniciar en forma.

Las cosas empezaron a tomar forma y en pocos días, Jefferson había conseguido el apoyo de otros empresarios amigos y socios de algunas de sus empresas.

Dos semanas después, ya Ethan había revisado cada uno de sus negocios y esperaba viajar al día siguiente a las montañas a Panther Cougar, el lugar perfecto dónde su esposa y él, pasarían la mayor parte del tiempo.

Ethan iba camino a su habitación, había pasado todo el día reunido con las directivas de la empresa de transportes, habiendo llevado con él a Lane Espósito, para ponerlo al frente de todo lo que era de él y de su hermana.

Ahora sólo quedaba una nueva preocupación; después de la noticia que recibieron en Bora Bora, le había entrado algo de temor de que su esposa en su estado, estuviera expuesta a todos los peligros y dificultades que implicaba la vida en las montañas.

Entró a la habitación y se encontró con que las valijas estaban ya preparadas junto a sus mochilas y demás; era evidente que Mel ya estaba ansiosa por regresar a las montañas, y sí, él también; pero la inquietud por su esposa y por su hijo se estaba haciendo más grande, más preocupante.

- ¡Ethan! – y que Mel lo recibiera dichosa en sobremanera, no ayudaba. Ella corrió y se colgó de su cuerpo, él la recibió complacido y la besó feliz

- hola amor; al parecer me extrañaste mucho, a pesar de que sólo me fui por unas cuantas horas

- no lo dudes ni por un momento. Pero también estoy muy emocionada por regresar a Idaho

- lo sé amor – y justo en ese momento ella se dio cuenta que él no lucía tan feliz como ella

- ¿Sucede algo? ¿Está todo bien?

- todo está bien... Es solo que... Es solo que, no estoy tan seguro de que sea buena idea que vayamos a las montañas, tal vez deberíamos encontrar la manera de que yo pueda ir y venir sin qué...

- olvídalo – ella no se molestó, comprendía lo que ocurría – sé lo que te preocupa y debes confiar en mí; el bosque y las montañas de Idaho, no son los lugares más peligrosos de la tierra; el peligro está en todas partes, pero vamos a ser responsables con nosotros mismos y a vivir plenamente, y a sobrevivir con inteligencia y responsabilidad, para llegar a otro día y otro más, hasta que seamos viejitos con nuestros hijos, y quién sabe, tal vez incluso con unos cuantos nietos

- ¡Dios! ¡Amor! Tienes tanta razón en lo que dices; te suplico que me tengas paciencia y que me ayudes con tu carácter y fortaleza, a entrar a esta nueva etapa de nuestra vida con valor

- solo debemos ser felices cada día, un día a la vez Ethan; el futuro solo será importante cuando se haga presente, es él hoy lo que importa y hoy estamos juntos aquí y ahora, esperando a nuestro hijo, amándonos de verdad y estando dispuestos a salvar a cada puma que tengamos la oportunidad.

TORPE, PELIGROSA Y ÚNICADonde viven las historias. Descúbrelo ahora