Un Amor Infinito (Suerte #8)

4| Otra oportunidad

Cap (2/4)

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Hizo todo lo posible por ignorar la mirada pensativa que Ángel estaba dándole. Había sido así por más de una semana y Parker sabía porque era, claro que fingía lo contrario. En cambio apuñaló sus waffles con el tenedor mientras ojeaba su libro de cálculo, ni siquiera estaba prestándole atención, pero era una buena barrera. Sus padres no lo molestaban cuando lo veían concentrado en un libro.

—¿Terminaste, princesa?— preguntó Ángel limpiando la boca de Lacey y ayudándola a bajar de su silla.

—Gracias, papi.

La niña dejó la cocina para ir a la sala y seguramente sentarse frente a la tv hasta que alguno de ellos la tomara y la llevara arriba para terminar de prepararse. Lacey asistía al jardín de infantes todas las mañanas y era Mo el encargado de recogerla la mayoría de las veces ya que su horario era más flexible que el de Ángel.

Parker se arriesgó a alzar la vista. Ángel había vuelto a la cocina, Mo por su parte estaba bastante concentrado en uno de sus cuadernos de bocetos, trabajando algo para uno de sus clientes de aquel día. Eso era algo que el pequeño rubio compartía con Mo, la fácilidad de perderse en su propio mundo cuando tenían un cuaderno enfrente. Morgan lo hacía porque era parte de su trabajo, Parker por otro lado lo hacía porque quería dejar de pensar y últimamente era lo único que quería, que su cerebro se apagara. 

Siguió comiendo tranquilamente hasta que Ángel volvió a la mesa y de nuevo le dedicó esa mirada curiosa. Él había cambiado muy poco a lo largo de los años, quizá sus razgos se había afilado un poco más, pero eso era algo que venía con la adultez. Lo que si había cambiado por completo era su mirada, ya no quedaba nada de aquella tristeza que siempre abundaba en esos ojos oscuros, ahora solo había paz y tranquilidad. Lo que era genial.

—Entonces...—empezó el pelinegro —¿Rony vendrá por ti de nuevo?

—Si — Se encogió de hombros tratando de restarle importancia. Quizá no lo logró demasiado bien.

Ese era un tema que definitivamente no quería tocar, había estado tratando de evitarlo por más de una semana. Así como había estado evitando las llamadas de Owen y toparse con él en la escuela, lo que era bastante difícil cuando recibían varias clases juntos. Aun así se las había arreglado para no cruzar palabras con el chico. Quizá estaba siendo bastante infantil, pero no podían culparlo, no cuando cada vez era más difícil aparentar que estar cerca de Owen  lo mataba por dentro.

Parker Smith era un chico intelectualmente sobresaliente, era capaz de resolver complejos problemas matématicos sin pensar demasiado. Era capaz de hacer todo un análisis sobre cualquier tema que se le planteara y dejaría bastante impresionados a la mayoría, sin embargo en cuanto a sentimientos se trataba, era bastante inexperto. Más aun porque gustaba de interiorizarlos tanto como le fuera posible para mostrarse imperturbable.

Entonces Morgan por fin hizo la pregunta que Parker había estado temiendo todos esos días.

—¿Por qué estás yéndote con Rony y no con Owen? — había genuina curiosidad en sus ojos verdes, además de un poco de confusión. Lo que era entendible si se tomaba en cuenta que él y Owen no se separaban casi nunca. Al menos antes no lo hacían.

Pero, Dios... Parker estaba tan enojado con su amigo. Por la manera en que lo había custionado en medio de ese dichoso evento. Ni siquiera se había dado cuenta de lo posesivo que Owen era y eso lo enojaba y lo emocionaba a la vez. ¿Que tan jodido era eso? Mucho, por eso prefirió tomar distancia, porque estaba enojado y porque no quería que su amistad se tornara en algún tipo de mierda tóxica en donde él cedía a cualquier cosa que Owen quisiera solo porque lo amaba.