Un Amor Infinito (Suerte #8)

10| Calmando las aguas

Cap (4/5)

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A la mañana siguiente, Parker le envió un mensaje a Owen para decirle que iría a la escuela con Rony. Su enojo del día anterior había desaparecido al contarle a Shade lo que había pasado. Él chico inglés estuvo de acuerdo con lo que Rony había dicho sobre Iris siendo una mentirosa.

—Si fuera verdad, Owen te lo habría dicho porque te lo cuenta todo, porque es lo suficiente tonto como para darse cuenta de lo mucho que te lastima que hable de sus conquistas.

Así que eso le había ayudado a tranquilizarse (más o menos). Por lo que el ir a la escuela con Rony no era porque aun estuviera enojado con Owen...bueno, tal vez un poquito. Pero en su mayor parte era para mantener un ojo en Shade que se infiltraría a la escuela con ellos.

—Joder, me veo tan guapo— dijo Shade viéndose en el espejo que Rony tenía en su habitación. El uniforme le quedaba como un guante aun cuando era un par de centímetros más alto que Rony. — Y no creí que jamás diría algo como eso, pero se siente bien volver a la escuela.

—No puedo esperar a llegar a Roswood— Rony estaba emocionado, tanto que era gracioso verlo. — ¿Te imaginas la cara de Cooper?

—Te apuesto a que se le caera la barbilla hasta el suelo.

—Ustedes son malvados— gruñó Parker que los observaba desde la cama. Estaba enfurruñado porque tuvo que salir de su casa antes de lo normal.

—Vamos, tienes que aceptar que será divertido— era imposible no contagiarde del entusiasmo de Shade, sobre todo porque era genuino.

—Eso si no logran meternos en problemas.

—Seré bueno, lo prometo — Eso no se lo tragaba ni el mismo Shade, pero dejaría que hiciera de las suyas, solo por esta vez.

—Trata de ser lo más inglés que puedas— acosejo el castaño— eso seguro te hará ganar puntos.

—¿Por qué?— Preguntó el mayor de los Smith.

—Ya sabes, toda esa mierda del acento inglés. Al menos en la televisión dicen que las chicas se vuelven locas con eso. Así que esta es nuestra oportunidad para comprobarlo.

—Eso suena divertido.

Parker se rió, porque su primo si que tenía un acento muy notorio. A veces remarcaba más algunas sílabas o hablaba tan rápido que las palabras se distorcionaban un poco y era difícil seguirle el ritmo, por lo que no creía que pudiera ocultar dicho acento aunque se esforzara. Morgan también tenía acento, pero rara vez salía a relucir. Lo hacía cuando estaba emocionado por algo o demasiado enojado, por lo demás sonaba perfectamente norteaméricano. Sin embargo había que tener en cuenta que Morgan había vivido en Colorado desde pequeño y eso había provocado que su acento se diluyera bastante; claro que le bastaba con un par de días en Inglaterra para que recobrara un poquito sus raíces.

Shade por su parte era inglés de cabo a rabo.

—Creo que deberiamos irnos si queremos llegar antes de que nos cierren la puerta— informó viendo la hora en su teléfono.

Ambos chicos asintieron y se encaminaron fuera de la habitación. La casa de Rony era bastante silenciosa por las mañanas y eso se debía en su mayoría a que los padres del chico viajaban constantemente debido al trabajo, sin embargo siempre se mantenían al tanto de lo que hacía y de como le iba en la escuela. Además conocía de sobra al padre de Rony, Robert Everett, quien a simple vista lucía como un hombre serio, pero amaba profundamente a su hijo y se lo demostraba tanto como le era posible.