Capítulo 23 - La determinación de todos

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Cuando todos volvieron a la mansión la atención se centró en Astor y Bell, todo el camino durante el calabozo ambos chicos habían estado excediéndose más allá de sus límites matando a cualquier monstruo que se cruzaba en su camino, habían recibido heridas superficiales pero el daño real estaba en sus mentes, uno sentía la perdida, o más bien, el distanciamiento de una hija y para el otro era el distanciamiento de una hermana, el cariño de ambos superaba el que incluso habían tenido por sus anteriores hermanos.

-¿Están bien Orion, Bell-san?

-Sí, no te preocupes Artemisa-chan.

-Sí, ¿y kami-sama?

-Hestia fue llamada por el aventurero encapuchado y se fue hace un tiempo.

-Ya veo, Ren, ya sabes que hacer...

Ren dio un asentimiento y vistiendo una capa con capucha que cubre su rostro, él partió con dirección a Knossos, se objetivo, acabar con lo que ahí se estuviera haciendo, por su parte Astor y Bell habían decidido ir a sus cuartos a dormir, ninguno quería recordar más lo que había pasado, o mejor dicho, ambos querían hacer que ese dolor fuese menor.

-¿Qué tanto les afecto?

-Demasiado, Lili no está segura de que se recuperen solo con descansar un rato.

-Esperemos que Astor-sama y Bell-sama se repongan.

-Astor dijo que nos volveríamos a ver con Wiene.

-¿Estás seguro herrero?

-Completamente, ahora, necesito que me hagan un favor, necesito que encuentren ciertos materiales ¿me ayudaran?

-¿Qué planeas Welf-dono?

-Ayudar a esos dos, ya es tiempo de devolverles algunos favores.

Los demás miembros de la familia Hestia asintieron con una sonrisa en sus rostros, lo primero era conseguir una de las plumas de firebird que Astor tenía consigo, lo demás se podía hacer yendo a comprar en el mercado, objeto mágico, ese era el plan de Welf, la idea había aparecido en su cabeza, gracias a la semana de entrenamiento se había dado cuenta de que tiene la capacidad para crear objetos mágicos y armas con la cualidad durandal, hacer el objeto mágico le costaría bastante tiempo pero eso era algo que estaba dispuesto a pagar para ver a sus amigos tranquilos de nuevo.

-¡DIX! ¡MALDITO! ¡SUELTALA!

-Hmph, ninguno de ustedes dos puede hacer algo ahora, esta es mi victoria.

En una pesadilla de Astor, los sucesos ocurridos eran bastante aterradores, por lo menos para el chico pelinegro, sostenida de los brazos por Dix, Wiene se encontraba siendo torturada por este, puesto que la gema de su frente estaba siendo arrancada por la fuerza.

-¡SUELTA A WIENE!

-Con sus estados siendo inferiores incluso al de un level 1 no puedes hacer nada, así que ya callense.

-Aaaaaaaaaaaah.

Un grito, la gema había sido arrancada de la frente de Wiene, lágrimas brotando de los ojos de la vouivre mientras se empezaba a transformar, entonces una palabra apareció en la mente de ambos chicos, no obstante, solo uno de ellos la dijo.

-¡NIGHTMARE!

Me desperté sobresaltado, ese sueño premonitorio había cambiado o tal vez me estaba mostrando algo anterior a lo que ya había visto, el sudor caía por mi frente, esa maldita magia de ese cabrón, supongo que para ese momento las cosas tendrán que suceder de esa manera... como si fuera a dejar que eso sucediera, Bell estaba a mi lado, una varilla de metal clavada en su pierna, supongo que él no sería capaz de moverse en esa situación.

De lo mas bajo a lo mas altoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora