Afloja El Hoyo [TERMINADA]

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Las letras en cursiva es la voz que le habla a Eiji
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Sensaciones, formas, colores y patrones que Eiji nunca había visto jamás en su vida.

Quien sea que allá dicho que el amor te hacía ver todo de colores definitivamente no conocía las drogas. Esos si eran colores. 

Pov Eiji

¡Yo sabía que las plantas hablaban! Después de todo no desperdiciaba saliva cada vez que les hablaba miéntras las regaba.

—¿Te sientes libre?

— Si, me siento libre

Todo a mi alrededor era como una caricatura, ví mis manos y ciertamente solo tenía cuatro dedos. ¿Soy yo el protagonista de esta caricatura?.

— Claro que lo eres, ve y se el alma de la fiesta

Si, debería de hacerle caso a quien sea que me está hablando.

Me deje inundar por el ritmo de la música, bailando como loco seguí el camino de dulces que había en el suelo y llegue a un bosque de fantasía. Habían puti-elfas bailando en palos de bambú, ogros soltando humos de colores con aromas frutales, variedad de criaturas mágicas bailando pegadas entre si y una hermosa laguna rodeada de luciérnagas adornaba en medio de todo el lugar.

El agua se veía tan cálida que me deje caer de espaldas llendo hasta el fondo. No necesitaba respirar, no me hacía falta. Mire a los alrededores y habían muchos tesoros como gemas y entre todas estas había un rubí que tome. Pensé que había sido pillado al tomar aquella piedra porque muchas sirenas se acercaron para sacarme a la fuerza del lago y sumergirse otra vez. Al menos me quedé con la gema que ahora que la veía bien era amarilla.

— Como sus pelos de elote

— Que cosas más raras dices señor voz narradora del partido del Galaxy

Me levanté del sueño y una ráfaga de frio golpeó mi cuerpo. Literalmente, sentí que el frío penetró en algunas partes de mi espalda pero no sabía que, tampoco le di importancia y seguí caminando en aquel mundo de fantasía.

Llegué a una biblioteca de bebidas. Habían muchas de diferentes colores, tamaños y todas decían "bebeme". Salte los arbustos que impedían el paso a las bebidas y empecé a probarlas todas. No eran muy buenas que digamos, algunas estaban amargas y puedo jurar que hasta me trague por accidente un gusano que había en una las botellas... Espero no me haga daño.

Genial, ahora por tomar mucho quiero ir a hacer pis. Me salte de nuevo los arbustos y fui a ponerme detrás de un árbol algo grande para orinar.

— Ahh~~ — orinar cuando tienes muchas ganas te llena de satisfacción. Pero algo andaba mal, el tronco en el que fui a orinar se movió. Vi hacia arriba y mierda... No era un árbol cualquier, era un árbol viviente — L-lo siento — me abroche el pantalón lo más rápido que pude y salí corriendo, creo que el me persiguió pero lo perdí entre la multitud que bailaba y no hay que perder tiempo así que comencé a bailar yo también.

Todo se deformaba en colores y se distorsionaba en formas nuevas.

No sé cómo pero llegué al frente de la tarima dónde estaban bellas mujeres bailando en un tubo echo de bambú.

Había una entre todas las teiboleras que resaltaba más. Su cuerpo era fino, tez pálida y un largo cabello liso. Sus movimientos era sensuales, delicados y seductores. Ella sabía lo que hacía, lo digo porque me estaba cautivando incluso a mi que soy gay.

Pero ahora que lo pienso mejor, más que cautivarme, me daba envidia, yo también quería ser una teibolera de elite como ella.

— Con Barbie puedes ser lo que quieras ser