• house of cards (s1) | kth •

treinta y nueve

- ¿Taehyung?

Observé desde arriba y Taehyung no se encontraba en el sofá. Bajé las escaleras buscándole por la cocina pero tampoco estaba.

- ¿Dónde diablos está...? - me pregunté a mi misma mientras le buscaba en mis contactos del teléfono. - Ya casi es la hora de irse a clase... - murmuré mirando al reloj.

Cuando estaba apunto de llamarle, mi teléfono sonó y contesté enseguida.

lhn

Yah, ¿dónde estás? ¿Sabes qué hora es?

kth

Tan pronto y ya chillando...

¿Qué has dicho?

Nada.

Suspiré antes de volver a hablar.

¿No has escuchado mi pregunta? ¿Dónde estás?

He salido antes, duermes como una marmota.

¿¡Qué has dicho!?

Nos vemos en clase.

¡YAH-!

Antes de poder decir nada, Kim idiota Taehyung ya había colgado.

Resoplé con fuerza y cogí mis cosas mientras me dirigía a la puerta dando fuertes pisadas.

- ♥ -

- Yah... ¿de verdad convivís juntos? - preguntó Hoseok observándonos a mi y a Taehyung con disgusto en la cara.

Estábamos sentados dándonos la espalda mientras hacía pucheros. Seguía enfadada con él por aquella estúpida llamada y por dejarme sola por  la mañana  para ir a clase.

- ¿Sois compañeros de piso o compañeros de guardería? ¿Cuántos años tenéis? ¿Cinco? - preguntó Jin haciendo de nuevo ese tono de señor mayor, irritándome más de lo que estaba.

- ¡Es culpa suya! ¡Me amarga incluso por las mañanas! - exclamé señalándole con el dedo.

- ¿EH? ¿Qué tonterías dices? ¡Eres amargada ya de por si! - se defendió levantándose de su asiento.

- ¡Cuida tu boca imbécil! - levanté el brazo a punto de darle pero se cubrió enseguida la cara.

Detuve mis movimientos amenazándole con la mirada mientras éste hacia lo mismo sin quitar su brazo sobre su rostro.

- Sentaos de una vez, estáis haciendo un escándalo. - suspiró Yoongi.

- Veo que os estáis llevando bien. - se reía Jimin a carcajadas.

Nos miramos una última vez y por fin nos sentamos.

- Voy a por comida. - murmuré aún con pucheros para levantarme, pero Taehyung me garró del brazo.

- Toma. - deslizó sobre la mesa una bolsa.

- ¿Qué es eso?

- Apuesto a que no has desayunado porque no preparé el desayuno. He comprado esto de camino esta mañana.

Dejé salir una pequeña sonrisa, pero aparté la cara con rapidez fingiendo no estar conmovida.

- Gracias. - murmuré sentándome de nuevo mientras volvía a darle la espalda.

- Aigo... mírales, coqueteando tan descaradamente. - rió Namjoon.

- ¿D-de qué hablas? ¡Hoy estáis muy parlanchines! - exclamé de nuevo frustrada consiguiendo solamente carcajadas de los chicos.