• house of cards (s1) | kth •

cuarenta y uno

- Apágalo Taehyung... - murmuré medio dormida escuchando aún el sonido de la alarma.

Mantuve los ojos cerrados, intentando coger sueño, pero la alarma seguía sonando.

- Taehyung... - me quejaba sin moverme.

Segundos después, la alarma sonaba cada vez más fuerte por lo que no me quedó otra que levantarme malhumurada.

- ¡Yah! - grité al ver a Taehyung aún durmiendo con su brazo sobre mi cintura.

- Deja de hacer ruido. - se escaqueó tapándose los oídos con un cojín.

Rodé los ojos y apagué  la alarma de mi teléfono.

- Levanta. - ordené, pero fui ignorada. - Yah. - le empujé.

- ¿Cuando yo te ordeno me haces caso? - su pregunta me sorprende. - No, ¿verdad?, pues ya está. - se dio media vuelta mientras seguía durmiendo dándome la espalda.

Levanté una ceja por su comportamiento. Tan temprano y ya tan mezquino. Me tiré encima suya golpeándole con cojines, escuchándose quejas por su parte mientras yo simplemente me divertía.

Me detuvo cogiéndome de las muñecas mientras me miraba fijamente. Por alguna razón sentí nervios y tragué saliva.

Me tiró a la cama y se puso encima mía.

Me miró con una sonrisa maliciosa.

- Y-yah, vamos a llegar tar-

Y una vez más, Taehyung me interrumpió con un beso.

- ♦ -

Esto se había hecho ya un hábito entre nosotros dos y los que nos rodeaban. El sofá dejó de ser la cama de Taehyung. Nunca confirmamos nuestra relación, ni lo hicimos oficial, pero nuestras acciones lo hacían.

En principio me daba vergüenza actuar de esta forma delante de los chicos, pero entre borrachera y otra, se nos escapó algún que otro beso delante de ellos, delatándonos nosotros mismos por error. Pero no hubo ningún problema, ya que ellos ya se lo esperaban, e incluso digamos que estaban más orgullosos de nuestra relación que nosotros mismos.

Otra razón por la que no quería que lo supiesen era por Jungkook. Tenía miedo de hacerle daño, pero su sonrisa decía que estaba feliz por Taehyung y por mi.

Sobre Hye... no se sabe nada de ella. Tampoco volví a preguntarle a Taehyung, no le gustaba hablar de ella. Me contó por encima sobre la pelea familiar. Me dijo que se negó en casarse con Hye y a partir de ese problema, la discusión se extendió incluyendo su familia. No me contó más detalles, pero tampoco le pedí más información.

- ¿A qué hora llegarás hoy? - le preguntaba Jimin a Taehyung mientras nos dirigíamos a la cafetería.

- Seguramente tarde, así que no me  esperéis.

- ¿Cuando librarás? Estás siempre tan ocupado que ya no bebemos juntos. - se quejó Jungkook.

Taehyung finalmente consiguió trabajo a tiempo parcial como prometió. Le dije que no hacía falta, que podía quedarse en mi casa, pero él insistía. Dijo que quería ganar más dinero para los dos. Tampoco le detuve, era lo que él quería.

- Chicos, esperadme en la mesa, voy a comprar un batido.

Los chicos asintieron mientras me dirigía a la máquina de al lado del puesto de comida.

Compré un batido de chocolate, me había antojado algo dulce.

Abrí la botella con emoción, pero al darme la vuelta, choqué contra alguien haciendo que el batido cayese sobre mi.