I want sex/ Quiero sexo.

7 Waht You Need.

Y entonces esa mañana se había levantado trasnochado adolorido, incapaz de faltar a clase por los exámenes decidió ir, su tía lo miraba con cierta preocupación y preguntaba cada cinco minutos si estaba bien. José se limitaba a decir que si, pero eso no aquietaba a Ingrit, nerviosa hizo miles de tés, y coloco muchas otras cremas y pomadas a las heridas de José. La hinchazón había bajado un poco, pero aún le dolía mucho el ojo y le labio, por suerte no le había afectado el ojo más que un moretón centellante a su alrededor. Cuando José llego al instituto fue acunado primeramente por la profesora de orientación, la Directora entonces hablo con él, pero José solo dijo que la que necesitaba ese tipo de charla y ayuda era Kylie. La directora impresionada de la osadía de José decidió:

-Dirás unas palabras en el juego de hoy, quiero que hables sobre la tolerancia, me parece propicio que tú lo seas. Haz sido un chico muy valiente José sé que vas a poder con unos alumno.- la mujer le pico el ojo.
  Jose sonrió un poco y cuando salió de dirección se topó con Brandom, claro y con rollitos pegado como garrapata.

-Hola José- dijo Brandom.
  José lo observo, pensó en la confección de Kylie le día anterior y torció el gesto.
-Hola-
-¿Estás bien?- dijo.
  José asintió débilmente, saludo a Dreik.
-Hola-
-Hey José me dijeron que diste un buen gancho anoche-
  José le sonrió hipócritamente.
-Sí, voy a desayunar- José observa a Brandom, y no tenía ninguna herida visible y eso le dio una sensación de calma indescriptible, suspira, tenía que aclarar las cosas con él- hablamos luego- dijo a Brandom y se retiró.

-… Hay una línea muy fina en la tolerancia, puesto que nadie debe tolerar la manera libre del otro, no es que tengamos que soportar una conducta o preferencia, realmente debemos de estar conscientes de que todos somos seres humanos, y que sentimos igual aunque tengamos diversidad de gustos diferentes. Sentimos amor, y el amor es lo que nos mantendrá unidos…- José hablaba a la multitud, pero observaba el cielo despejado y se perdía en el, como si hablara para si mismo:- estos moretones, quiero que los observen bien, porque están llenos de odio. No quiero que ustedes sean los siguientes a quienes el odio alcance, por eso… debemos promover cada día más amor, que viva la paz por encima de tu color, de tu religión, nacionalidad, orientación sexual y preferencia de género. Basta de muerte y odio, esto es serio, y no quiero que como el chico de la historia otro muera por culpa de la discriminación, también pido disculpas a quienes en algún momento llegué a herir o discriminar- José incapaz ya de seguir simplemente para de hablar, la multitud le responde en una ráfaga de aplausos desordenados.