I want sex/ Quiero sexo.

8

Respiró profundo siguió corriendo con el balón revolotiando entre las piernas y los pies. Paraba poco, corría con destreza y el cansancio ya le acogia el corazón. No importó José se plantó en el campo, lleno de sudor, de barro en algunas partes de su cuerpo, inhaló, vio a sus contrincantes volverse a él y en dos segundos de pensamientos pateó el balón con la fuerza de un huracán. Como si de un ciclón se tratase el balón dió vueltas rápidamente en el viento. Pero cuando el balón llega a la portería todos observaron como el polvo de los guantes del portero se expandió en el aire, cuando el balón chocó duramente contra el material, el joven como si se tratase de un bebé cae al suelo con el balón entre los brazos, abrazándolo.

José saborea la decepción, pero no era la única que vez que saboreaba la derrota, el pito sonó, el partido había terminado y los resultados eran de 1 a 0.

-Creo que nuestro goliador estrella se está quemando- opinó Kevin para si mismo.

José le escuchó, porque el comentario salió de su boca justo cuando le pasó por el costado derecho. José no dijo nada, solo calmó su ímpetu, fue a las gradas cogió su mochila y un poco de agua de su culer para tomar y lavarse un poco el rostro. José ya tenía varios meses en el equipo, desde aquel día que había atinado aquel gol. Se propuso a mejorar, y lo había echo, pero ese día no le fue muy bien.

- Creo que nos faltó más energía- dice retóricamente Brandom.

  Estaba allí de pie frente a José, también se limpiaba un poco el rostro que se mantenía serio y receloso. Estaba mirando al otro equipo celebrar su victoria, corrían y se abrazaban felicitandose unos con otros. Negó con el rostro e hizo un gesto de desagrado.

- Esto nos costará un poco para ir los estadales, puta madre- bramó Brandom.

- Tal vez Kevin pueda ocupar mi posición en el campo- dice José.

-¿Por qué dices eso?- pregunta Brandom.

-No lo sé, pregúntale- José parecía irritado.

- ¿Te ha estado molestando?- preguntó.

- !Es un idiota que no quiere aceptar que se enamoro de una chica trans!-

José lo dice en voz alta, Brandom abre mucho los ojos y se hacerca a José.

- ¡¿Que acabas de decir?!- Kevin están cerca, José lo sabía.

Kevin tenía el rostro tosco, con la vena brotada al costado de su frente y el sudor callendo desde la cien hasta el cuello.

- ¡Vamos a calmarnos todos aquí!- opina Brandom.

José baja la guardia, no dice nada, siente como las miradas invaden el campo. Y ahora todos observan ávidos de pelea.

- Dile a tu nena que se calme Brandom- expresa Kevin en tono más bajo.

- No soy su nena, tu eres un idiota- sale José a la defensiva.

-¡Ya José está bien, basta de tanta mierda!- reprende Brandom- Kevin creo que no debes andar haciendo comentarios fuera de lugar ¿okay? Esto es otra cosa, aquí todos somos un equipo.

- ¡Ve a jugar a los novios con José Brandom!-

-No voy a pelear más contigo, espero que sepas que esto te costará una suspención- Brandom le apunta con el dedo.

-¡Jodete tú y tu equipo, me vale!- Kevin se retira y todo el mundo no le aparta la mirada.

- Esto también va para ti José, estás suspendido- dice Brandom retóricamente.

José siete una punzada en el pecho, fue una estocada tremenda, el chico parpadea varias veces sin creerse lo que ha escuchado.

-¡Pero él fue quién empezó!-

-No hay escusas, esto está yendo demasiado lejos, no quiero problemas en el equipo, esto es importante. Pensé que eras más maduro José- fue determinado y la mirada de Brandom era como una hoja de metal. Corto el ímpetu de José en segundos.

José coloca los ojos en blanco exasperado, se muerde los labios.

- Perdedor- expresa Madison.

Con un conjunto de porrista rosa, un chicle entre los labios haciéndose una burbuja roja y voluminosa que se explotó en el acto. José se sorprende de su presencia, tenía el cabello peinado hacía atrás recogido en una coleta y el calor también había echo efecto en ella, con algunos copos de sudor en la frente.

- ¿Que haces aquí Mad?- pregunta.

-Nada en absoluto, solo pues creo que estudio aquí- dijo sarcásticamente- todo el mundo los está mirando, necesito que dejemos de pasar vergüenza frente a la otra secundaria chicos !vamos, vamos unas sonrisas!- anima con una sonrisa fingida colgada en le rostro.

José parpadea varias veces. Sin mirarle el rostro. Brandom se da una vuelta sin decir nada, se retira lentamente con el rostro bañado en molestia y decepción, de pierde del campo, Mad suelta una risita burlona.

- Típico de trogloditas- dice por bajo.

-¿Algo más que quieras decir?- objeta José con voz áspera.

- Si, está tarde es la primera sesión del juicio de Kylie en contra de su hermano, deberíamos ir a apoyarla ¿Te paso buscando?-

José no entendía la amabilidad repentina. Pero accedió.