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-El pidió permanecer con los demás huérfanos - dijo el Padre

Esto sucedió mientras caminábamos sigilosamente por un pasillo ancho y obscuro, lucia tétrico, igual que una película de terror; solo nuestros pasos resonaban.

-Llegamos-

El padre abrió una puerta grande, en su interior estaban muchas camas pequeñas, bien tendidas y ordenadas. Muchos niños se encontraban en el fondo de la habitación; estaban pegados a una ventana, todos voltearon al mismo tiempo hacia nosotros.

-Nyx- dijo O'Brien alzando la voz.

Los niños se quedaron callados, ninguno se movía. No había ningún niño parecido a Nyx

-¿Dónde está? ¿Usted dijo que estaba aquí?- O'Brien estaba molesto por el resultado de la búsqueda. Puso nervioso al padre y este apenas podía responder

-Señorita Jade mire- dijo Sofí mientras señalaba algo.

El lugar que señalo Sofí era debajo de una cama, aunque apenas se notaba algo pude lograr ver movimiento. Sin decirle nada a O'Brien me dirigí hacia la cama junto con Sofí, cada una de un lado.

Me arrodille y lo vi, era Nyx

-No se ve muy cómodo ese lugar-

Nyx se exalto, me miro con ojos de horror e intento escapar por el otro lado, pero ahí se encontraba Sofí. Despues se comenzó a arrastrar hacia adelante, y cuando la mitad de su cuerpo había logrado salir O'Brien se puso frente a él.

-¿A dónde va príncipe?- dijo O'Brien

El caballero agarro a Nyx por la cintura y lo cargo igual que cuando Shrek cargo a Fiona.

Nyx comenzó a patalear desesperadamente y golpear la espalda de O'Brien.

-¡Suéltame!-

-Lo lamento pero solo acato órdenes del Emperador- dijo O'Brien

-¿Qué harán con él? El Emperador no le hará daño ¿O sí?- dijo el Padre mientras trataba de calmar a los demás niños que se habían sobresaltado por la acción de O'Brien.

-Solo recibirá un pequeño castigo- dijo O'Brien indiferente

-¡Suéltame!- dijo Nyx con la voz temblorosa – ¡No quiero volver, déjame aquí!-

Las lágrimas escurrían por su cara.

Mi corazón se comprimió. Ese niño estaba desesperado.

-Yo soy feliz aquí-

El niño dejo de luchar. Se comenzó a restregar los ojos para ocultar las lágrimas.

-No diga eso- dijo Sofí nerviosa –El palacio estará muy triste sin usted-

-¡Mentirosa!- grito Nyx -¡Quieren que vuelva porque le tienen miedo a mi hermano!-

-Eso no es....O'Brien di algo- dijo Sofí

Tanto el caballero como la mucama estaban desesperados.

-Tienes razón- dije –Le tenemos miedo al Emperador-

Mientras dije esto vi que Nyx me voltio a ver incrédulo, sus lágrimas seguían cayendo, pero estaba más confundido que triste.

-Señorita Jade ¿Qué está diciendo?- dijo Sofí mientras me agarraba del brazo

-Bájalo O'Brien- dije tranquilamente –Cierra la puerta- le susurre a Sofí

O'Brien me hizo caso y bajo al niño, Sofí cerró la puerta y los niños guardaron silencio.

-¿Por qué no quieres regresar?- le pregunte al príncipe que ahora se encontraba debajo de mí

-¿Por qué tendría que decirte?- dijo Nyx, mientras se recuperaba de su pequeño lloriqueo

-Porque es muy posible que quiera escapar contigo- dije mientras me arrodillaba hacia él.

La concubina del demonio de ojos azulesDonde viven las historias. Descúbrelo ahora