🌛22.🌜

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Sabía que sólo había cometido error tras error, siendo un imbécil con todos en sus años de estudio y poco más. Quién sabe a cuántos había lastimado con sus burlas y comentarios, teniendo que hundir a otros para sobresalir.
Infundiendo hasta temor en algunos sólo para que lo respetaran.
Sin duda, no haber escapado cuando tuvo la oportunidad habría sido la peor decisión que había tomado.
Dejar a sus compañeros atrás, huir, y llegar hasta donde estaba ahora no era algo fácil.
¿Tanto daño había hecho para que el karma se lo devolviera de esa manera?
No sólo le bastaba al mundo su sufrimiento interno, sino que intentaba hacerlo sentirse mal en todos los aspectos.

Miró a su padre, lo culpaba, a él también, por su estúpido comportamiento. Si tan sólo hubiera sido un padre ejemplar... incluso Severus podría haberlo criado mejor.
La actitud paternal de Lucius se había basado en concederle sus caprichos para echárselos en cara después. Su madre incluso trataba de defenderle, en vano, el hombre siempre tenía la última palabra y pobre de quién la desobedeciera.
De todos modos, sabía que en cierto punto, todo lo que le estaba ocurriendo era bien merecido por no haber abierto los ojos en el momento correcto. Sí, había cambiado, pero su pasado seguía ahí, ¿cómo te deshaces de él y comienzas de cero? No lo sabía, y probablemente no lo iba a saber nunca.

Sonriente y de pie, frente a él yacía el gran Lucius Malfoy, pareciendo estar totalmente complacido con la debastadora situación de su único hijo. Ese hombre era todo lo que estaba mal en el mundo.

ㅡHas vuelto, arrastrándote como un gusano. Espero que ahora tengas claro dónde está tu lealtad.ㅡ Habló calmadamente. Draco frunció el ceño, sí, ese hombre era una escoria. ㅡY si se te ocurre volver a revelarte contra mí de nuevo...ㅡ Se agachó, quedando casi a la misma altura.ㅡ No será un simple crucio lo que acabe por lanzarte.

Asintió levemente muy a su pesar y limpió el rastro de lágrimas que bajaban sin parar por sus mejillas.
Lucius, aparentemente satisfecho, comenzó a alejarse, pero Draco le llamó, intentando levantarse para al menos no verse de esa manera tan patética.

ㅡDeja en paz a Potter.ㅡ Sentenció, sosteniéndole la mirada. ㅡ¿Qué más quieres? ¡Estabamos bien aquí! ¿Por qué no puede serguir siendo así?

ㅡ¿Por qué?ㅡ Se volteó, notó como sus nudillos estaban más pálidos de lo normal de apretar tanto los puños. ㅡPorque ahora ya saben donde estamos, es cuestión de tiempo para-

ㅡ¿Para qué? ¿Para que vengan a buscarnos? ¿No crees que si quisieran hacerlo, ya lo hubieran hecho?

Sí, estaba afirmando algo de lo que no estaba seguro. Él también se preguntaba por qué aún no se habían llevado a Lucius después de la pelea con Harry, supuso que aquél hombre del audio que grabó Tonny tendría algo que ver.

ㅡNo tengo que darte explicaciones, no a ti. Es más, tú vas a dárselas a un juez dentro de unos días.

ㅡ¿Q-qué? ¡Ni hablar!ㅡ Dio unos pocos pasos hacia su padre, tambalrándose ligeramente. ㅡPor favor... déja a Potter en paz... te lo suplico. ¿Acaso crees que poniendolo por los suelos recuperarás toda tu fortuna? ¡Entiende, con sólo presentarte allí te enviarán a Azkaban!

ㅡ¿Cómo sabes...?ㅡ Lucius pareció dudar de la "falta" de información de su hijo, sin embargo, terminó por no preguntar, se iba a enterar tarde o temprano, por las buenas o por las malas. ㅡHe encontrado personas que me ayudarán, una vez recupere todo, podrás irte a donde te plazca, mientras mantengas la maldita boca cerrada, eso está claro.

ㅡ¡No puedo permitir que utilices el malentendido de Harry para tu propio bien! Déjalo en paz... testificaré a nuestro favor acerca del tema de Voldemort, pero... por favor, a él déjalo fuera de esto.ㅡ Bien, estaba suplicando, y si lo que le ofrecía no le era de utilidad en lo más mínimo, no sabía qué iba a hacer.

ㅡPerdiendo la cordura.   |DRARRY.|Donde viven las historias. Descúbrelo ahora