Capítulo 35

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Camila estaba contenta a pesar de todo, estaba libre, por fin, ya no tenía nada que esconder luego de aquel momento. Quería conversar un rato más con mi padre acerca de lo que había descubierto de las drogas pero estaba ocupado haciéndose cargo, por lo que simplemente le dejé un mensaje de texto y junto con Camz y Alejandro nos fuimos a su casa, tendríamos una cena y yo no dejaba de preguntarme dónde estab la madre de Camila, no porque me agradará o algo si no, es que no podía entender como había sido tan cruel para aparte de faltar a la graduación de su hija, tampoco estar presente para una cena en casa. Me dio algo de lástima la mirada de Alejandro mientras estábamos sirviendo la cena, Camila se estaba bañando en ese momento, yo me había bañado antes al llegar así que ahora era su turno por lo que me había quedado a solas con el, Alejandro parecía una combinación de triste y enojado observando su teléfono celular a cada momento, como si estuviese tratando de localizar a Sinu, hasta que recibió una llamada.

-Lauren, discúlpame es Sinuhe voy a contestar y volveré. -Me dijo y yo le sonreí suavemente.

-Tranquilo Alejandro yo me encargo. -Le aseguré para que fuera tranquilo.

Mientras el se iba yo simplemente me quedé pensando a que realmente fui más afortunada que Camz cuando pasó lo de mi madre pues, ella siempre había querido estar ahí, es difícil perdonar a algunos de tus padres cuando cometen una infidelidad, para mi lo fue demasiado, pero la situación de Camila era aún peor, no era una simple infidelidad, a parte de que había sido de toda la vida, tenía inclusive hijos con esa persona, literalmente Sinu vivía una doble vida y eso es lo que me impresiona. Terminé de servir la comida y me dispuse a taparlas con unos platos para que se mantuvieran calientes y no entraran moscas mientras Camila bajaba y Alejandro hablaba, cuando finalicé me acerqué al sofá en donde el revisor estaba encendido reproduciendo una película de acción y me quedé parada ahí mientras observaba.

Sentí los brazos de Camila abrazarme por detrás y me sorprendí un poco provocando la risa de ella, su risa me hacía sentir feliz, hasta se escuchaba diferente, ya no estaba ahogada, asfixiada, temerosa y cuando me volteé para verla su preciosa sonrisa de ojos brillantes y dientes perfectos me hizo confirmar aquella teoría, sentí mis ojos incluso cristalinos y me acerqué a ella abrazandola fuertemente. Ella era libre y su preciosa cara lo reflejaba. La sentí apretarme en sus brazos más fuerte que nunca y llevé una de mis manos hacía su cabello acariciando los risitos encantadores suavemente.

-Gracias por estar a mi lado siempre. -Ella me susurró dando un suave y tentativo beso en mi cuello. Llevé mis manos muy cerca de su trasero y sentí otro suave beso acompañado de un suspiro que me erizó la piel.

-Yo siempre estaré contigo. -Le dije como pude, la morena se alejó para mirarme a los ojos con una mirada tentadora, me mordí los labios, podía apostar lo que sea a que esa era exactamente la mirada que utilizo Eva para insitar a Adán a comer del fruto prohibido.

-Ven. -Me susurró ella mientras tiraba de mi hacia detrás de las escaleras, esta mujer iba a hacer que nos descubrieran.

Me pegó de la estructura de las escaleras y llevó sus manos a mi cuello para abrazarme mientras juntaba mis labios con los suyos de forma pasional, esta vez mis manos si apretaron sus nalgas suavemente, no lo pude evitar, me encantaban demasiado, todo su cuerpo me encantaba, esa niña había sido mi debilidad desde que yo la conocí. Camila comenzó a meter sus manos dentro de mi camisa y recorrió mi abdomen hacia arriba antes de apretar mis pechos con sus manos, fue cuando mis manos subieron a su cintura y la separe un poco de mi, no quería que Alejandro nos encontrara de esa forma.

-Camz... -Le advertí alzando una de mis cejas, ella sonrió ampliamente y lo peor era que esos ojos brillaban tanto y su rostro reflejaba inocencia pura, sonrisa infantil, pero sus manos encima de mi pecho dejaban totalmente claro que no se trataba de una niña.

Heavenly Desire (camren)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora