Tu almohada (NamJin)

CAPÍTULO 16

~Jae Hwan (Ken)

Cada parte del lugar, cada cosa acomodada específicamente, lo único que hacían es regalarme recuerdos, que por más que sean hermosos, cálidos y reconfortantes... me quebraba, me rompía y me destrozaba el alma.

Veía como ordenabas la antigua casa tarareando quien sabe que canción, ¿así ordenas tu casa y acompañas a Namjoon?. Me miraste y sonreiste. Quiero alargar cada minuto, cada segundo pero el tiempo simplemente pasa.

— Listo.— agarro un plato y comienzo a servir parte de la comida.— ve a sentarte Jinnie.

— Quiero ayudar.— te acercaste y mientras llevabas los platos con arroz al comedor.

— Ha pasado mucho que no cocino esto ojalá tenga buen sabor.— dije llevando la cacerola con caldo al centro de la mesa, vi que te ponías de pie para servirte pero te detuve, agarre tu tazón por encima de tu mano y mi corazón latio fuerte, no desperdicie la oportunidad y te acaricie un poco, mientras agarre el cucharón y empecé a servir caldo en tu tazón.

~Aunque sea un poco, quiero imaginar que así hubiera sido nuestra vida cotidiana juntos.

Cuando solte tu mano pude ver un pequeño sonrojo en tus mejillas y me sentí vivo, tomaste asiento y probaste la comida.— Kennie ... — mis nervios crecían. — ¡Esto sabe delicioso! .— hablaste con felicidad.

~Como es posible que un tazón de caldo pueda hacerte tan feliz... y lo mejor... como posible que con solo verte sonreír yo tenga una razón para vivir...

— No exageres.— dije sereno, mientras me servía algo de aquel caldo .

—Es la verdad, hace muchos años que no cocinas para mi... De verdad amo la forma en la que cocinas.— ojalá me amaras a mi también.— Me mentiste de seguro debiste cocinar mucho allá ¿no es así? Debiste impresionar a muchos.

— Yo...— te mire.— Solo cocino para ti.— tu rostro cambia de semblante, pero vuelves a sonreír ¿Por qué no me crees?

— No digas tonterías. — dices metiendo una cuchara de arroz a tu boca. — Debes cocinar para otras personas.

—No.— interrupi .— yo solo cocino y solo cocinare para Kim SeokJin eso estaba en el contrato.— hable serio.

— No seas idiota .— me golpeas la cabeza con el cucharón .— Como es posible que aun sigas un contrato que hicimos cuando teníamos 13 años. No seas ridículo.

— No soy ridículo, soy fiel que es diferente. — dije indignado.

— Fiel mis nalgas, cuando te cases vas a tener que cocinar para tu pareja y te apuesto que romperas ese contrato, es más yo ya lo rompí.

— Yo no me voy a casar con nadie que no seas tu .— solte de pronto.

— Yo ya estoy casado idiota.

— No importa, te espero.

— Ni impirti ti ispiri.— me regañas y yo solo río. — ya cállate y come. — dijiste mientras volvias a comer.

~ Tal vez solo estemos jugando, pero cuanta verdad podía expresarte con esto...

(...)

Despues de almorzar y jugar como en los viejos tiempos ya iban a ser ocho de la noche y veía como te ibas alistando, volé tan alto engañando a mi corazón que ahora debo caer de tal altura de golpe, cuando al fin estabas listo me miraste.

~Se lo que dirás, pero por favor, no lo hagas.

— Kennie.— por favor.— Ya es tarde, prometí cenar con Namjoon y debo irme. —