CAPITULO 24

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~Seokjin

— ¿Qué estaban haciendo?.mierda, la manera en la que me veía Jimin era sugestiva y hasta cierto punto reprochable.

— Jimin, creí que hoy no vendrías ¿Ya estás bien?...— Trate de desviar el tema.

—Yo pregunté primero hyung.— dijo mientras se cruzaba de brazos, y suspire ¿Que debía decir ahora?.

Primero que nada, hola Jimin ¿Cómo has estado? Yo bien gracias. — Hablo de repente Kennie con ironía y algo molesto, esto se salía de control.

— No estoy hablando contigo.— Hablo molesto el menor y volvió a mirarme mientras se acercaba a nosotros.— Dime hyung ¿qué hacian?.— No era nuevo que ellos se trataran así, total jamás se llevaron bien.

— No pasó nada, no pienses de más Jimin.— le contesto de nuevo Kennie, sin importarle que mi hermano lo haya ignorado.

— Jimin...—dije apenas, las palabras simplemente no salían, no hacía nada malo pero su molestia me avergonzaba.

— ¡Bien! Y ¿NamJoon sabe que él está aquí de nuevo?.— Preguntó y ahí supe que estaba perdido, Jimin jamás aceptó a Kennie ni como amigo, ni mucho menos como pareja, era obvio que reprochara mis acciones.

Y no entendía por que jamás le agradó Kennie, pero tampoco pregunté, en su debido tiempo, y ahora no sé que debería responder a sus acusaciones, demasiado precipitadas.

— Kennie llegó hace poco y no he tenido la oportunidad de... — trate de explicar, por que sabía bien que no decirte la verdad, Nammie, estaba mal.

—¿Kennie? ¿¡Aún lo llamas así después de lo que hizo!?.— hablo incrédulo.

—Jimin...

— ¡No! Jimin nada, tienes problemas con tu matrimonio.— ¿Pero que? ¿Quien le había dicho eso? .—¡Y lo primero que haces es salir con este sujeto! ¿¡Acaso no te das cuenta lo mal que se ve esto!?.

— No es lo que piensas.— volvió a interrumpir Jae Hwan y tenía razón, todo era un mal entendido.

— ¿A no? Y que quieren que piense, entro a tu oficina.— me señala y me molesto.— y lo primero que veo es a ¡este tipo encima tuyo!.

— ¡JIMIN BASTA!.— colmó mi paciencia, azote mis manos contra el escritorio, grite y me acerque a su rostro desafiante.

Jimin no se quedó atrás y me miro aun molesto, después de un momento de tensión el suspira.— Solo dime...— habla más tranquilo, y por su tono de voz se que no quiere pelear y solo se separa más de mi y mira a Kennie, se que no debí gritarle, lo sé.— ¿A que has vuelto?.— dijo para Ken.

— Yo...—  Jae también suspiró y tocó su hombro, Jimin se quitó casi al instante,  expresaba aun su molestia.— No volví por tu hermano.

El semblante de mi hermano cambió de molesto a sorprendido de golpe, y una gran parte de mi pudo al fin respirar, aunque aún no sabía si Jiminie le creyó, y eso solo me clavaba una espina en el pecho, que pasaba si tu, Nammie entrabas por aquella puerta ¿Hubieras malinterpretado la situación? Por supuesto que sí.

Debía decirle todo pero ¿Cómo? Y si ¿ya es tarde? Ahora comprendía que no debí ocultarlo desde un principio, y debía decir la verdad...

~Pronto...

— ¿Entonces a que vienes?.— Volvió a cuestionar el menor.

— Vine por que soy de aquí, no me sentía bien en el extranjero y decidí volver, me reuní con Jinnie por que es la única persona que considero especial. — Kennie respondió.— Aunque de saber que le ocasionaría este mal entendido, no lo hubiese buscado.

— El esta casado y lo sabes.—  Acuso Jimin.

— Lo se...— Ken hablo firme y yo solo veía y escuchaba mientras masajeaba mi sien con los dedos.— No te culpo por no creerme, se que no nos hemos llevado bien desde hace mucho, pero te aseguro que puedes confiar en mi palabra. No quiero regresar con tu hermano.

— Eso espero.— dijo al fin.— Como también espero que este tipo de sucesos no vuelvan a pasar, están en la constructora y cualquier persona puede entrar por aquella puerta.— señala la puerta de mi oficina y lo vuelve a mirar. — Y no es por ser grosero, pero necesito hablar con mi hermano.

— Claro, los dejo.— Ken habló con resignación, se acercó a mi, me tomó por los hombros.— Voy a esperar en el restaurante de la esquina, no tardes.— Sonrió cuando afirmé y solo salió de ahí.

Dejándome a solas con Jimin.

— Se que no debí levantar el tono de voz pero tu tam-

— ¿Porqué NamJoon no sabe nada al respecto?

— Ya te dije que no tuve tiempo de decirle, además ellos siempre tuvieron problemas y quise evitarlos.

— Por lo mismo debiste decirle que Jae Hwan llegaría a Seúl, Él dijo que vino para quedarse, lo verás a escondidas por el resto de tu vida, es algo estupido.

— Lo se, pero en estos últimos días recién pude comunicarme adecuadamente con Nammie y debía hacer mucho trabajo, a eso se aumentó el hecho de que ayer escapaste de la entrevista con los nuevos clientes y ahora debo hacerme cargo deese proyecto también.— dije estresado, lo miré y su rostro se asombró.

— Y-yo no podía quedarme...— soltó bajito.

— Lo se y te entiendo.— dije alistando mis cosas para salir.— y así como te entiendo, espero que comprendas que necesito tiempo para decirle la verdad a Nammie.

— Yo no entiendo por qué te es tan difícil decirle que él regreso.— Habló y salí de mi escritorio para ir hacia la puerta de mi oficina, pero me detuve y lo mire.

— Mira Jimin, hay muchas cosas que no sabes y NamJoon tampoco, mi matrimonio pasó por una crisis que yo mismo ocasione sin darme cuenta, por meterme demasiado en el trabajo mientras tu estabas de luna de miel con Jungkook y estoy tratando de arreglar las cosas, he descuidado a mi esposo y no quiero tener más problemas.— dije algo impaciente y retomé mi camino hacia aquella puerta.

— Jin hyung... — hablo mi hermano detrás mío.— arregla las cosas con Nammie.— dijo agarrando mi brazo.— Yo me haré cargo de la empresa de entretenimiento de Hoseok Hyung.— Habló seguro y yo solo suspire pesado.

— Jimin... ya tengo suficiente con TaeHyung y sus problemas, como para tener que lidiar con tus crisis emocionales también.— Me solté de su agarre y salí de mi oficina sin ver hacia atrás.

Por que no entienden que las cosas no son tan fáciles como parecen, más con la empresa en flote, los contratos ya firmados que debemos cumplir, la presión que ejerces sobre mi NamJoon, si tú, que aunque no te des cuenta eres él que más presiona, con lo del trabajo, la falta de tiempo, el hacer el amor, el "bebé" y todas las cosas que tu necesitas para poder ser feliz conmigo, pero claro yo soy el malo al encontrar con Jae Hwan algo de tranquilidad.

Estoy tan aferrado a mis metas que cuando intento seguirte la corriente siempre salgo como el traidor. Ya que salen mentiras que no quiero decirte, pero que pasa si digo completamente la verdad, te conozco tanto que lo primero que harías sería explotar y es lo que menos quiero, al menos ahora, es lo menos que quiero, primero arreglamos las cosas y regresamos a la estabilidad que teníamos para así contarte todo, lo prometo...

~Pues la verdad no quiero perderte...

By: JBSS

Tu almohada (NamJin) Donde viven las historias. Descúbrelo ahora