Capítulo 22: Deseo

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- ¿Qué harán hoy?-. dijo Amanda-.

- Acompañaré a Aaron, Elif, Christine y Thomas en la casa. Harán una fiesta

- ¿Una fiesta, de nuevo? La gente rica acostumbra a realizar muchas fiestas

- Thomas y Christine cumplirán veintiún años de casados

- Es excelente

- También te han invitado a la fiesta

- No quiero ir, mi niña. Estoy cansada, además mañana debo ir a trabajar

- Está bien

- ¿Tienes vestidos que ponerte?

-Sí. En la mansión tengo un par

- Está bien.

- El chófer vendrá a recogerme

- ¿Compórtate, ok?

- Como si no me comportara, Amanda.

Salí fuera de la casa, y me subí al auto de chófer. Me despedí con la mano de Amanda, y espere llegar. Era una tortura volver a la mansión Zygasil. Pero debía dar la cara de cualquier forma.

La fiesta comenzaría masomenos a las nueve y media, y eran apenas las siete de la tarde.

Cuando llegué, Amanda me recibió con un cálido abrazo.

- !Nihal! Estás aquí!

- Felicitaciones, Christine, a usted también, Thomas

- Gracias, Nihal-. dijo mi abuelo-.

- He llegado un poco temprano, parece

- No te preocupes por eso... después de todo, tú eres parte de la familia.

- ¿Y Aaron?-. miré las escaleras-.

- Está en el tercer piso. Te estaba esperado, toma el ascensor.

- ok.

Caminé hasta el lado izquierdo de la casa a tomar el ascensor. Era uno de esos de los departamentos. Es que la casa tenía tres pisos habitables, más el subterráneo donde se guardaba la mercancía y mercadería (presiento que también ocultan joyas muy valiosas) y el cuarto, que es donde se guardan papeles importantísimos de la empresa Zygasil.

El dinero de la familia Zygasil, proviene de los padres de Thomas Y Christine. Los padres de estos, tenían cada uno una empresa; los padres de Thomas de fabricación de joyas, y los de Christine de maquinaria.

Cuando Thomas y Christine se conocieron, se enamoraron, y al poco tiempo después se casaron. Con tal decisión, los padres de cada uno, decidieron unir la empresa, y hoy en día corresponde a la empresa metalúrgica Zygasil.

Toqué la puerta del cuarto de Aaron dos veces. Se sintieron pasos cercanos,  mi tío abrió la puerta.

- Nihal, pasa.

Pasé a su cuarto, uno de cama azul, con balcón, cuadros Pop art, librería, escritorio y un balcón que daba al mío.

-  Hola, Aaron-. lo saludé con un beso en la cara. estaba recién bañado y tenía un terno puesto-.

- ¿Cómo has estado? Tanto tiempo sin saber de tí

- He estado bien-

- Me alegro

- ¿Cómo has estado tú?

- No me quejo.

- Mhnn

- ¿Preparada para esta noche?

- sí

- ¿Tienes vestido?

Amor ProhibidoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora