Capítulo 36

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Narra Mateo

Justo cuando quería proponerle que se viniera a vivir conmigo a la Boca ahora que es mayor de edad tuvo que salir Carla a estropearlo todo.

Al verla nos separamos del todo y tratamos de actuar como si nada hubiera pasado, aunque la situación de por sí era un poco extraña.

- ¡Hola! - dijo Carla medio dormida - ¿Qué onda con ustedes, no tienen sueño?

Bueno Carla, estaba disfrutando de un momento especial con mi futura esposa.

Sé que soy un gil, pero necesitaba hablar con Eva, era una conversación importante.

Obviamente no podía decirle eso. Eva se me adelantó.

- Eeee no mucho, me sentó mal el asado. Salí a tomar un poco de aire y me encontré con Mateo. - le dijo intentando parecer lo más natural posible.

- Qué mal, si querés te doy una pastilla. - le dijo Carla para luego acercarse a mí y darme un beso en la mejilla bajo la atenta mirada de Eva.

- N-No hace falta, estoy mejor ahora. Me voy a dormir de vuelta. - nos dijo y acto seguido se fue a su tienda dejándonos solos.

Quiero hablar con Carla sobre lo que está pasando, pero no es el momento adecuado. Yo quiero a Eva y no puedo fingir sentir algo que claramente no siento por ella.

- ¿Por qué me mintís? - me preguntó ella de la nada.

- ¿A q-qué te referís? - le dije nervioso.

- ¿Te traté alguna vez mal desde que nos conocimos? - me preguntó dejándome aún más perdido.

- ¿A qué viene eso?

- Responde. - me dijo seria.

- No. - le dije evitando su mirada.

- ¿Entonces por qué no me decís la verdad? ¿Vos pensás que yo no me doy cuenta de cómo la mirás? ¿O de que hace más de tres horas que saliste afuera?

- Yo n-no... - quise responderle pero no me dejó acabar.

- Yo no sé qué ha pasado entre ustedes dos, pero estoy más que segura de que se conocen mucho antes de la joda a la que fuimos.

No sabía que decir realmente, así que seguí en silencio.

- Solo tenés que ver la cara que ponés cuando ella está con el otro pibito... Con Dani. - me dijo soltando una risa - y ella te mira igual cuando estás conmigo.

- Me siento como un gil en éste momento. Lo siento por no haberte dicho la verdad, mis intenciones nunca fueron lastimarte. Sos una mina increíble...- le dije, pero de nuevo no pude acabar la oración.

- Pero vos la querés a ella Mateo.

Asentí y la miré apenado. Realmente es una mina hermosa y estoy seguro de que cualquier pibe caería rendido a sus pies, pero yo no puedo, no hay otra mujer que me importe que no sea  Eva.

- No estoy molesta con vos. Bueno, un poco sí porque esperaba que me lo dijeras. Lo que quiero decir es que quiero que seas feliz y estoy segura de que ella es la indicada.

- Pero vos...

- Yo nada. Yo estoy feliz si las personas que me rodean lo están. - me dijo y se quedó en silencio por un momento - ¿Tenés planes serios con ella? - me preguntó sonriente.

- Pues sí. La cagué porque fui un pelotudo, pero ahora quiero empezar de cero. Hasta quiero llevarla a La Boca conmigo, así que imagínate lo mucho que la quiero. - le dije sincero, aunque luego me di cuenta de que igual fui un poco intenso.

- Pues hacélo wacho. Hacen muy buena pareja, están hechos el uno para el otro. - me dijo y me sonrió triste. - Espero encontrar a alguien tan especial así como lo es ella para vos.

Antes de que dijera nada vi que un coche estacionó donde estabámos nosotros.

- Me tengo que ir, ha venido mi madre. Cuida a Eva y dejá de ser un pelotudo - me dijo sonriendo. Me abrazó y luego fue a por su mochila para luego subir en el coche e irse.

Me siento como una mierda ahora mismo, pero al menos sé que estoy un paso más cerca de Eva. Cuando ella hable con Dani todo volverá a la normalidad.

Me levanté y fui directo a la tienda de Eva para ver si seguía despierta o no. Nada más abrirla vi que ella estaba de rodillas mirando por un agujerito lo que pasaba afuera de la tienda.

Cuando me vio soltó una risita y luego se tapó la boca con las manos, ya que los otros tres que estaban con ella estaban durmiendo.

La ayudé a que se levantara y salió con cuidado afuera. Nada más salir saltó para que la tomara en brazos y me dio un beso.

- ¿Qué hacías espiando pillina? - le dije soltando una risa. - ella no dijo nada, solo se encogió de hombros y me dio otro beso.

La miré sorprendido y ella soltó una risita. Puso sus manos a los dos lados de mi cuello y empezó a darme besitos por toda la cara.

- Sos un *beso* hijo de puta *beso* desgraciado *beso* pero *pico* te quiero *beso* mucho. - me dijo y sonreí como un bobo.

- Yo también te quiero boluda. Mucho. - le dije y volvimos a besarnos.

Nos separamos por falta de aire y me di cuenta de que alguien más nos observaba a unos metros.

Era Dani.











Ahora sí que es el último por hoy 😄

Re intenso este capítulo ndeah

Gracias por leer ❤❤❤

𝐄𝐯𝐚; 𝐓𝐫𝐮𝐞𝐧𝐨Donde viven las historias. Descúbrelo ahora