𝐄𝐯𝐚; 𝐓𝐫𝐮𝐞𝐧𝐨

Capítulo 9

Narra Eva

Estaba con Matu acostados en la cama. Sentí que estaba distraído mirándome y que no le prestaba atención a la serie así que le dije que lo hiciera si tenía tantas ganas.

Nos acercamos y nuestros labios se unieron, se puso encima de mí y me dejó besos en todo el cuello. La tensión sexual aumentaba cada vez más hasta que nos interrumpió una llamada.

Era Cami. Él no quiso contestar y colgó. Siguió mordiéndome y besándome el cuello, pero el teléfono volvió a sonar.

- Contesta, igual es algo importante. - le dije.

Mateo me miró y suspiró frustrado. Me susurró "Lo siento" y atendió la llama. Lo puso en altavoz.

- Dime boludo. - le dijo a Cami

- ¡Hola Cami! ¿Cómo estás? ¿Bien? Yo también. - le dijo este sarcásticamente.

- No tengo tiempo para boludeces gil.

- Bueno, quería contarte como me fue en la cita con Lola. No te alteres.

Mientras Cami le contaba a Matu todo yo me senté encima de él. Vamos a jugar un rato. Le saqué la camiseta y este me miró sin comprender lo que pasaba.

- ¿Sigues ahí boludo? - le preguntó Cami.

- S-sí, contáme. - le dijo con la voz entrecortada.

Me encantaba ver que estaba nervioso y excitado. Podía sentir que su amiguito se había despertado. Le di unos besos en el cuello y luego subí a su rostro. Lo miré por un segundo admirando lo hermoso que era y luego accedí a comerle la boca. Bajé de nuevo a su cuello y lo mordí. Esté gruñó y ese sonido era música para mis oídos.

- Eeeeh Mateo, ¿qué estás haciendo? - le preguntó Camilo y yo solté una risita.

Cogí su teléfono y este me miró sin entender.

- Cami, estamos un poco ocupados ahora gil. - le dije y solté una risita.

- Eva, ¿sos vos? - preguntó este sorprendido.

- Sí wacho.

- Mateo ¿porqué no me avisas gil?

Este no contestó así que le dije que tuviera un lindo día y le colgué. ¡Qué gorda forra que soy! pensé y me reí mentalmente.

- ¿En qué quedamos? - le dije divertida.

Este miró señalando su miembro. Le sonreí satisfecha.

- ¿Y qué querés que haga? - le pregunté y le sonreí.

- Chupámela. - me dijo con su voz ronca mientras que con su pulgar me acariciaba los labios.

Yo no soy el tipo que se acuesta en la primera cita, pero no podía negar que tenía muchas ganas.

Lo toqué por encima del pantalón y mordí mi labio. Me quité la remera porque tenía mucho calor. El ambiente se había prendido.

- Prepárate para el mejor pete de tu puta vida. - le dije y le sonreí.

Antes de que hiciera nada escuchamos como se abría la puerta principal.

- La puta madre. - dijo Mateo molesto.

Me puse la remera de vuelta y Matu hizo lo mismo.

- Lo siento. - me dijo triste.

- No pasa nada, lo dejamos para otra vez...

- ¿Te dije que estás hermosa hoy?

Negué.

- Estás hermosa. - me dijo este y una sonrisa apareció en mi cara.

Nos abrazamos y pusimos de nuevo la serie, aunque mis pensamientos estaban claramente en otra parte. Miré a Mateo y este estaba concentrado viendo la serie.

Miré sin querer su miembro y me di cuenta de que aún estaba duro y mordí mi labio. Este se dio cuenta y me arrepentí al instante.

- Pará wacha, estoy intentando pensar en la biblia para que se me baje y vos seguís provocándome. - me dijo riéndose.

- ¿Y qué querés que haga si estoy mojada y me dejaste con las ganas?

- Me va a explotar la pija. - me dijo serio.

No me aguanté y solté una risita.

- Mateo, Eva a comeeeeer. - escuché la voz de Emi detrás de la puerta.