Narra Mateo
Los otros pibitos se despertaron y cuando nos vieron juntos casi me cagan a trompadas con la mirada.
Menos mal que Dani intervino. Es un buen pibe, soy conciente de ello, pero él y yo no podemos ser amigos. Al menos no por ahora.
Eva y yo nos levantamos y vimos que alguien había estacionado el coche cerca de donde estábamos.
Al principio le resté importancia, pero luego vi dos rostros muy conocidos : Gala y ¿Mauro? ¿Qué hacen estos pelotudos aquí?
Miré a mi novia por un segundo y vi que miraba la escena sin comprender lo que estaba pasando.
Los otros pibes conocían a Gala, a Mauro no sé si lo conocen, pero miraban la escena igual de sorprendidos que nosotros.
- ¿Qué hacen éstos pelotudos aquí? - preguntó Dani algo molesto.
- No sé hermano, pero ya me están tocando las pelotas. - dijo Duki algo molesto.
Vi que Eva estaba triste y eso era lo que menos quería. Me acerqué a ella y la abracé.
- Tranquila, no va a pasar nada. No voy a permitir que ninguno de esos dos te hagan daño. - le dije para tranquilizarla.
- En eso estoy de acuerdo con Palacios. - dijo Dani. Te tocan un pelo y son pollo.
- Bueno chicos, me alegra que por fin estén de acuerdo en algo. - dije soltando una risita nerviosa. - pero no creo que haga falta. Tenemos que ignorarlos, hemos venido a pasarla piola.
- Eso. - dijeron Lit y Duki a la vez.
Narra Eva
Me molestaba de algún modo el hecho de que estén aquí, pero no quería que los chicos se preocuparan por mí.
Los otros se despertaron y vi que Lola se acercaba a mí contenta, aunque su cara cambió por completo al ver a nuetros nuevos vecinos.
- ¿Alguien me explica? - dijo confundida.
- Nadie sabe que están haciendo aquí. - dijo Dani con su voz ronca.
- Pues creo que es el momento de que se vayan. - dijo Lola para luego salir corriendo hacia el lugar donde se encontraban esos dos.
Intenté frenarla, pero fue en vano. Así que Mateo y yo salimos corriendo detrás de ella.
- ¿Me podés explicar qué carajo hacen ustedes dos aquí? - le dijo Lola a Gala.
- ¿A vos qué te importa pelotuda? - le respondió.
Miré a Mauro y me miró con la misma expresión de siempre. Una que daba miedo y asco al mismo tiempo.
Entonces vi que Lola le encajó dos piñas a Gala. Antes de que Gala hiciera nada fue frenada por Mauro para mi sorpresa y la de todo el mundo.
- Perdona a mi novia. - dijo Mauro. - Nosotros solo hemos venido a pasar un buen rato, no sabíamos que estaban aquí.
¿Mi novia? No boludo, esto pinta muy mal.
Mateo lo miraba con rabia y tenía miedo de que se agarrasen a trompadas. Mauro no tiene un físico muy trabajado, pero sí que sabe pegar. Lo digo por experiencia propia.
- Tranquilos, no los vamos a molestar. - dijo de nuevo Mauro.
- Eso espero. - le dijo Mateo serio.
Mauro le sonrió de una manera muy falsa y Matu le respondió de la misma forma.
- Nosotros nos vamos. - dije en voz baja aunque todos lograron escucharme.
ESTÁS LEYENDO
𝐄𝐯𝐚; 𝐓𝐫𝐮𝐞𝐧𝐨
RomanceUna relación entre dos adolescentes que puede acabar peligrosamente mal.