𝒜𝒷𝑜𝓊𝓉 𝓁𝑜𝓋𝑒- 𝕊𝕙𝕚𝕜𝕒𝕞𝕒𝕣𝕦 ℕ𝕒𝕣𝕒

11

-Sakura...- Le dije con el mentón bajo.

No le quería contar la verdad, pero tampoco merecía que no se lo diga. - Es complicado-

Ella sostuvo mi mano,  mientras negaba suavemente con su cabeza. Una lágrima salió de mis ojos.

- Tranquila, Hayami, luego me cuentas- Bosteza y me deja sola. La veía angustiada y decepcionada de mí. No quería arruinar la amistad que tenía. Pero una misión es más importante que el compañerismo. Me levante de la silla y sequé mis ojos que se habían nublado. Salí corriendo por la puerta, sin ver me choqué a Sasuke, que me miró atónito por mi llanto.

- ¿Hayami?- Me abrazó extrañado, yo solo no podía parar de lagrimear.- ¿ Cual es la razón de tu llanto? - Puso mi cabeza contra su pecho. Pero tampoco me tranquilizó.

Kakashi y Naruto miraban como cada vez me debilitaba más.

- Hayam- Gritó al verme Naruto, pero Kakashi lo calló.

- Necesita tiempo sola- Dijo, para luego agarrar  a Naruto y llevarlo de los pelos a la casa.

Me separé de Sasuke y lo miré fijamente, para luego decirle.

- Perdón por todo- En un susurro casí incomprendido.

Salí corriendo para el bosque y perderme un poco en mis pensamientos mientras las lágrimas caían rápidamente por mi rostro.

Luego de seguir mi caminó, sin darme cuenta, me estrelle contra un árbol y caí abruptamente al suelo golpeando todo mi cuerpo.

Mi cabeza solo giraba, estaba mareada, llevaba corriendo varias horas. Me estaba muriendo de frío y tampoco tenía energía.

¿ Tienes frío Hayami?

La voz de mi abuela estaba reflejada por toda mi cabeza, sentía que me protegía.

Esté es mi final, una genin morira del frío.
Ya era de noche y pensé.
¿ Qué mejor que morir durmiendo?
¿ Nadie me vendrá a buscar ?
¿ A quién le importo?

Esos fueron mis últimos pensamientos antes de quedar inconsciente.

Me desperté cómo si hubiera vuelto a nacer, lo primero que vi fue a una mujer la cual estaba arrodilla sonriéndome. Me asuste y comencé a ir para atrás deslizándome con la poca fuerza que me quedaba.

¿ Es el angel de la Muerte ?

Pero luego vi para bajo y tenía sobre mis piernas una manta rosada bien calentita.
Suponía que me la había dado aquella mujer.

- Gracias- Le susurre con un hilo de voz, estaba deshidratada. Ella lo único que se limitó fue hacer una dulce sonrisa, la cual parecía que me sacaba de todos mis problemas.

- ¿Qué haces aquí?- Finalmente se atrevió a preguntarme - Te resfriaras - Acarició mi rostro. 

- Yo...- Le dije hasta que Sasuke apareció detrás de ella.

- ¡Hayami- Gritó y corrió para llegar lo más rápido a mí.

Ya juntó a mí y agarrandome como si fuera una débil bebe le preguntó a la mujer.

- ¿ Qué haces aquí? - Ella sólo dio una sonrisa como respuesta.
- Juntó hierbas para curar heridas- Mostró la canasta que llevaba con ella- Ah, soy un hombre- Dijo,mientras ya nos dejaba de lado y se iba.