Alyssa pasó un mes entero en un curso preparatorio antes de ingresar a la universidad. El Goreth de Grayldann era un colegio de magia con todas las de la ley, que graduaba a los mejores hechiceros del mundo. La chica no podía creer que el día finalmente había llegado. De pie ante el edificio de recepción, junto al resto de los estudiantes de primer año, no podía evitar que una enorme sonrisa le brillara en el rostro. El mes de adaptación que debían cursar en el instituto preparatorio había transcurrido con rapidez, y ahora ya podían reunirse con el resto de los estudiantes. Lo que significaba que hoy, después de tanto tiempo, volvería a ver a sus hermanos idiotas y a su mejor amigo.
Alyssa caminó hasta la zona de recepción y estuvo en la cola por horas. El impresionante número de novatos hacía que todo el proceso avanzara de manera lenta y tortuosa. Pero era imposible de evadir, porque allí les otorgarían sus respectivas habitaciones y los horarios de clase, sin mencionar que les hablarían sobre los reglamentos de la institución. Observó sorprendida las diferencias palpables que existían entre los nuevos estudiantes. Había hadas y elfos mezclados junto al resto de los hechiceros. Según le habían contado los chicos, la universidad admitía a estas razas si eran capaces de manejar la magia. Aunque la mayoría solo clasificaba como encantadores o canalizadores, que requerían bajos niveles de esencia mágica.
Cuando por fin logró salir de allí, la muchacha llevaba un mapa en las manos. Cada uno de los novatos había recibido uno, debido a que el Goreth era una institución de grandes extensiones en la que perderse era algo muy normal. También le habían asignado una nueva tarjeta de teléfono. Como era natural, las compañías telefónicas humanas no funcionarían en un lugar que se encontraba en otra dimensión, protegido por campos de fuerza mágicos. Estos objetos, además de una pequeña cartera, eran los únicos que cargaba. El resto de su equipaje había sido enviado directamente a su habitación.
La chica atravesó una puerta doble y llegó a un área abierta. La misma contaba con un diseño natural que daba la sensación de estar en un parque, salpicada de árboles y flores, con la presencia de bancos para tomar asiento y varios puestos de venta, incluidas algunas tiendas de regalos. Se marcaba en el mapa con el nombre de "Campus Número 1". Era enorme, y atravesarla a pie le costó unos buenos diez minutos a paso ligero. Se moría de ganas por aprender a viajar a través de los planos astrales, o como los jóvenes decían "aparecerse". Así se ahorraría ese tiempo para dormitar por las mañanas. Pero hasta que no lo aprendiera, debía levantarse temprano para llegar a clases.
Una vez atravesado el primer campus, Alyssa llegó hasta el edificio principal. Los pasillos estaban vacíos, lo cual le llamó la atención, pues esperaba encontrarlo lleno del ruido producido por los demás estudiantes. Era probable que los mismos se encontraran en clases, incluyendo a sus dos hermanos y a Nathan. La chica no se entretuvo demasiado allí, pues no había mucho para ver. El mapa señalaba que el "salón de los banquetes" o "Gran comedor", formaba parte de este complejo, lo cual le recordó que tenía un poco de hambre. Ignoró su malestar. Estaba muy emocionada.
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Resplandor [Hermanos Ceniza I]
FantastikAlyssa, sus hermanos, y su mejor amigo -por el cual siente más de lo que debería- se verán envueltos en misterios que van más allá de sus imaginaciones cuando intenten graduarse del colegio universitario para hechiceros al que asisten. ...