30 Días Con Edward Y Jacob. ( + 18 ) (TERMINADA)

Día 7

Jugeteo con los dedos.

Hacia ya bastante tiempo que la relación de Edward y Jacob había dado inicio y para ambos monstruos del terror clásico, estaban disfrutando su vida juntos y para la grata sorpresa de ambos Alice a sus espaldas ya había organizado una boda sólo para ellos dos y la hermosa y afable Esme les prestó la cabaña que Carlisle le había otorgado como regalo una vez, la feliz pareja se negó al principio, pero para no levantar sospechas sobre su casamiento a escondidas de sus familias, aceptaron y esta vez tuvieron una verdadera y digna boda de el amor que tenían el uno por el otro.

En donde la manada de Sam y el padre de Jacob fueron y por un momento Edward alcanzó a ver en la mente del hombre en silla de ruedas como Jacob fuera capaz de imprimar sería una bendición para él y la tribu. Edward intranquilo le restó importancia y siguió disfrutando de su segunda boda, Jacob era feliz comiendo de lo que había en el Buffet que su familia había preparado para él y los invitados humanos.

Cuando todo termino, los cullen y la manada de Jacob regresaron a la casa cullen para empacar sus maletas ya que todos irían con Edward y Jacob a esa isla, que era la isla Esme una isla en la que Carlisle invirtió sólo para su amada Esme, los cullen pasarían su velada cada uno a solas con su pareja y los hermanos
clearwater, se dieron el lujo de pasear y conocer el lugar, ambos hermanos eran felices conociendo y caminando de un lado para otro disfrutando de su hermandad y burlándose de su Alfa a sus espaldas, sintiéndose felices por él.

Mientras nuestra adorable y atrevida pareja, iba en una pequeña lancha con destino a la isla Esme, en donde al llegar a una cabaña en el centro de la isla Edward no se molestó a cargar a Jacob como una pareja de recién casados al estilo princesa como típica novela juvenil en donde una chica común se fija en él cantante o mafioso tóxico pero que al final la ama, con la importante diferencia de que Edward y Jacob no eran famosos y que los dos si se amaban de verdad y estaban dispuestos a dar todo por el otro.

Cuando entraron a la cabaña, Jacob al ver lo enorme que era el salón fue directo a la habitación donde aseguró que eso era el triple de la sala, causando una risa cálida en Edward.

Alice le había mencionado a Edward que era momento de dar el siguiente paso en su relación e ir más allá de un simple beso o roce, eso le gustaría a Jacob y de pasó le ayudaría a tener cierta madurez física y porque no mental. Edward en su conciencia le pareció correcto poner en práctica lo dicho por Alice, le parecía correcto brindarle esa madurez a Jacob y porque no así mismo.

Por lo que miro en el refrigerador o nevera si había algo de comida y para su felicidad si había y en gran variedad, Jacob al escuchar el refrigerador fue directamente donde Edward y le pidió con mirada de cachorrito tierno que le diera la oportunidad de probar  de su comida, por lo que Edward gustoso aceptó y le preparo a Jacob un buffet personal que el chico lobo aceptó con gusto y además disfrutó dos cosas una comer delicioso y hasta la saciedad y dos que Edward le cocinara lo considero un acto de compromiso por su condición de sanguijuela.

Edward le informó que lo esperaría a las fueras del lago, Jacob admitió y dijo que iba a descansar un poco y luego iría con él a lo que Edward asintió con ina cálida sonrisa en su pálido rostro.

Jacob apenas Edward dejo la cabaña fue en busca de su cepillo de dientes, y ya en el baño fijarse en su apariencia y según los pensamientos de Jacob se veía lo más deseable posible, lavó sus dientes con detenimiento e incluso puso una canción que durará cuatro minutos exactos y con la canción se lavó sus dientes, también peino un poco su corto cabello y de entre sus cosas sacó una linda manilla trenzada que él mismo hizo y además le había agregado un dije en forma de lobo sentado en sus patas traseras admirando a la luna que en este caso la luna de ese lobo sería Edward.

Ya listo Jacob se dirigió a donde Edward estaba y contempló ese maravilloso ser que tenía frente a sus ojos y para su sorpresa estaba totalmente desnudo, Jacob también se retiró la única prenda que aún mantenía en su escultural cuerpo y se fue a su encuentro con Edward, este último lo recibió con un beso pasional pero poco profundo ya que Edward temía morderlo e inyectarle su ponzoña y lastimar lo de gravedad.

Dejando eso de lado en el agua ambos cuerpos abrazados el uno a otro y besando los labios contrarios, los dos malvados monstruos de terror decidieron dar el siguiente paso y ambos bajaron sus manos hasta las nalgas del contrario en donde ambos sorprendidos lanzaron una sonrisa durante el beso, ninguno de los dos iba a ceder al otro. Sí se amaban pero el orgullo estaba primero y sus bestias interiores no iban a ceder al otro.

Ambos con sus diez dígitos en las nalgas del otro tanteo el pequeño anillo rosaceo y parece ser que por azares del destino ambos la encontraron al mismo tiempo y un sonoro suspiró salió de ambas bocas en donde con la mirada puesta en él contrario, sus labios rojizos, el agua en su cuerpo y la luz de la luna observando estaban jugando con el orificio trasero del otro. Ambas bestias caídas en el placer estaban disfrutando de un jugeteo con los dedos, ambos tenían sus dígitos en el cuerpo del contrario tocando con profundidad al otro.

Continuará en el siguiente día...