Capítulo 14

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Error en el silencio

Apague mi teléfono y me negué a escuchar. No quería saber nada de la iglesia, ni del pastor.

Después de lo que había sucedido en la iglesia no asimilaba bien lo que habia pasado. Me enoje mucho por lo que se había dicho de mí. Y me recriminaba tratar de solucionar el mal entendido entre Juan y Julian con mi insinuación de que era él el que me gustaba.

Estaba enojada y frustrada. Molesta de cuidarme tanto y que en minutos mi testimonio se fuera abajo por un chisme..una calumnia..

Me sentía avergonzada con el pastor y su esposa. Aunque no fuera verdad, yo fui juzgada por todos los líderes ese día. Ninguno me defendió.. la amistad que tenía con el hijo del pastor sirvió de leña para poner a arder esa murmuracion.

No sé hasta donde había sido mi culpa..Porque hasta Julian lo creyó. Todos mis pensamientos me ponían más a la defensiva y terminaba peor de molesta e indignada. Enojada con todos y conmigo misma.

Los días pasaban y no asistí a ningún culto durante tres semanas. Me cerré en mi soledad a escuchar solo mis lamentos..

Me disculpe con Julieta y durante esas tres semanas tampoco fui a su casa. Evitaría a toda costa encontrarme con Julian.

Iba a reconstruir mi muro de nuevo y si eso significaba alejarme de la iglesia, lo haría..

Con el paso de los días fui perdiendo mi habitual lectura de la palabra y me iba alejando cada vez más de la oración..

Cambie el tiempo de la oración por el de ver peliculas y el tiempo de lectura de la palabra por el periódico, o algún libro que me entretuviera.

Rápidamente volví a mi habitual tristeza y la depresión se adueñó de mis emociones.. Pase de la Rebeca dulce y gentil a la tensa e irritable..

Los primeros en notar el cambio fueron mis niños de la clase y sus caritas me decían que extrañaban a su maestra.

Pero había corrido en reversa y chocado de nuevo con mi antigua yo.. ¿Como recuperarme?.. Si me sentía perdida y enredada en mi enojo y frustración.

¿Cómo? Si ya no tenía el valor ni los deseos de volver a la misma iglesia..

Los pastores debieron llamarme muchas veces, pero yo apagaba mi celular para que no me llamaran y cuando veía sus mensajes o los de Juan, o de otros hermanos de la iglesia los borraba..

No quería que nadie me molestara..

Probé congregarme en otra iglesia y lo que oía no satisfacía mi alma..

Probé con predicas por televisión. . Pero terminaba dormida..

Probé y probé y nada me llenaba.. Estaba enfriandome y llenandome de egoísmo..

Una noche de viernes después de volver a mi casa una llamada me sacó de mi burbuja de seguridad..

Hola.. buenas noches Rebeca. Soy Amanda la esposa de Lucas..

Lloraba y eso me puso muy nerviosa..

¡Lucas quiso matarse!..discutimos y le eche la culpa por todo lo que le pasaba a nuestro hijo y le dije que nuestro hijo terminaria como el tuyo..¡muerto! Y que todo era su culpa.. Se lo dije porque estaba furiosa con él por que me golpeo cuando le reproche por llegar ebrio y se enojó tanto que se dió un tiro. ¡Delante de mí.!. Está muy mal en el hospital y ¡todo por mi culpa..!

Pregunta por ti.. ¡quiere pedirte perdón!..por favor Rebeca.. ¡ven!..Sé que te hicimos daño..pero por favor ¡no lo dejes morir sin pedirte perdón.!

¡Eso era demasiado!.. Fue como si me golpearan ¡tan fuerte! que no pudiera reaccionar..

Llamé al pastor como una reacción instintiva y le conté la situación y él y su esposa me acompañaron a ver a Lucas al hospital.

El pastor oro por él después de que Lucas me pidiera perdón..

Estando junto a él, le dije: Lucas ¡tú no vas a morir!. ¡Y tu hijo será sano!. ¡Lo verás!..Jesús a tenido misericordia de ti y a escuchado lo que le has pedido..

¡Tú vivirás y tu hijo también.!

Al oirme la esposa de Lucas empezó a llorar y Lucas también..

Gracias Rebeca.. ¡Gracias!.. Me respondió Lucas en medio de lágrimas. Él y su esposa habian estado orando antes de que yo llegara y le habían pedido a Dios perdón y que les diera una nueva oportunidad. Que le permitiera vivir y sanara a su hijo..

Mis palabras fueron una confirmación a su oración..

Salí del hospital abrazada por mi pastora. Me invitaron a tomar un café y no me preguntaron nada del porqué de mi alejamiento de la iglesia.

Me llevaron a mi casa y yo les pedí que pasaran..

Pastores .. perdónenme .. Me equivoqué al alejarme de esta manera y les pido perdón..No le guardo rencor a quien inicio el rumor pero no les niego que si me dolió y mucho..

He pensado mucho y creo que todo lo que pensé acerca de este asunto y ..

¡Lo siento mucho..! Perdón pastor y perdoneme pastora..

También fue mi error Rebeca.. yo sabía que esas muchachas tenian el hábito de murmurar y no era la primera vez que se daba un mal entendido por su culpa. Y yo no hice nada.

Por no tomar cartas en el asunto. Esto también fue mi culpa..

Espero verte de nuevo por la iglesia..me dijo la pastora tomando mi mano.

¡Por supuesto!. Y muchas gracias por acompañarme a ver a Lucas..En especial después de como me comporte con ustedes. .

Una cosa es cierta Rebeca..Dios te dió revelación en cuanto a Lucas y a su hijo..Yo también sentí lo mismo cuando ore por él.. Lucas vivirá y su hijo sanara..

Después de abrazarlos y darles las gracias por apoyarme y estar siempre conmigo cuando los he necesitado, ellos se fueron a su casa..

Una cosa más me faltaba.. bueno..dos..

Llamé a Julieta para reanudar las clases con Esteban y Lily..

Después llamé a alguien con el que necesitaba arreglar las cosas. Y conocer el camino que debía seguir..

El naufragio de DiosDonde viven las historias. Descúbrelo ahora