16

34.9K 3K 391
                                    

Tracy:

Quiero hablar con él.

Realmente quiero hacerlo.

Y cuando me armo de valor para ir con Dominic, lo veo justo saliendo de su oficina, mis pies se detienen y se dirige hacia mí, con Hugo a su lado

—Domini...

Pasa de largo.

El pasa de largo y yo me quedo helada, tardo en girarme y le veo dando órdenes sobre un trabajo a Julio, otro de mis compañeros.

Después de eso vuelve a pasar de largo y lo pierdo de vista cuando dobla el pasillo, yo me quedo de pie tratando de asimilarlo.

Realmente quería hablar con él, decirle que no voy a juzgarlo y que lamento tal vez haberlo apresurado, pero él.

Me está evitando.




¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.




—¿Ya vas a decirme quien es tu novio?.—Pregunta mi madre. Es sábado por la tarde y he decidido almorzar con ella y papá, quien esta cruzado de brazos.

—¿Realmente tienes novio, Tracy?

¿Lo tengo?

¿Aún lo tengo?

—Estoy saliendo con alguien, si.—Contesto, mamá luce emocionada y papá me observa con una ceja arqueada.

—Dios, cariño, eso es increíble.. ¿Cómo es?.—Mamá no pierde la emoción.—¿Es guapo? Claro que es guapo.

Guapo, millonario y amable.

Aunque solo me interesa lo amable.

—Si.—Pronuncio sonrojada.—Él es muy guapo.

—¿Y ese hombre es quien te hizo deshacerte de tus lentes?.—Señala mi papá.

—Ricardo.—Mamá pronuncia.

—Ahora usas lentes de contacto.—Sigue papá.

—Si a ella le gusta..

—¿Es por ese hombre?

—No, papá, son cómodos.—Le aseguro.

—No me gusta que un hombre te haga cambiar tus gustos.

—Dominic no hace eso.

Mierda.

—¿Dominic?.—Pronuncia mi padre con fastidio.

—¡Dominic!.—Exclama mamá.—Es un nombre muy varonil.

Papá la observa con una ceja arqueada.—Ricardo también suena muy varonil.

—Cariño, estamos hablando de tu hija.

Suspiro.

—¿Dominic qué?

Mordisqueo mi labio.

—Dominic Crowell.—Pronuncio con duda.

Mamá y papá abren mucho los ojos, me preparo para escuchar más preguntas de las que ya esperaba.





¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.




Regreso a casa pasada las 10, es tarde y apenas llego me quito los zapatos, me preparo para subir las escaleras e ir a dormir.

Al menos esa es mi idea porque tocan mi puerta.

Me dirijo a abrirla y mi boca se abre.

Es Dominic.

Corrección, es Dominic con un ramo de rosas rojas.

Uno que casi le cubre el rostro, pero que logro distinguir.

—Hola.

No dejo de estar sorprendida.

—¿Puedo pasar, Señorita Roth?

Cuando hace la pregunta, cierro los labios y me quedo viéndolo.

Un ramo de rosas y un "¿Puedo pasar?".. ¿Cree que eso puede solucionar el que me haya estado ignorando?

Lo único que quiero.

—Espero que tengas una buena explicación, Dominic.

Deseos LetalesDonde viven las historias. Descúbrelo ahora