Capítulo 14 Hope

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-Sigo preguntándome que hubiera pasado si no hubiera llegado a conocer mi destino. Probablemente, no estaría en esta habitación, y tú pequeña princesa, no seguirias viva. -se queja- Vale, vale, gran princesa.

-Sigue leyendome tus diarios, por favor. Quiero saber toda la historia.

-Te he contado como fue la noche que naciste?

-Si, pero quiero que me la leas de tu diario.

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Caroline: Sí, y he podido verlo yo misma. Esta noche muchas cosas van a cambiar.
Elijah: Va a morir...
Caroline: No voy a permitir ni una sola perdida mas en esta familia, prometo proteger y cuidar de esta familia, y si es necesario, con mi vida. Esperemos que no tenga que darse el caso, este vestido es demasiado bonito como para mancharlo con sangre.

Fui directa a por otra copa.

Rebekah: Por fin te encuentro.
Caroline: Sucede algo?
Rebekah: He venido a despedirme de ti, me voy. Necesito que me cubras.
Caroline: Te has peleado con Klaus?
Rebekah: No,no, Nick y yo estamos bien. Yo...
Caroline: Quieres irte de aquí para verte con Marcel, verdad?
Rebekah: No voy a preguntar como lo sabes. Si alguien pregunta, cubreme por favor.
Caroline: Dalo por echo, y Rebekah, si de verdad os queréis, no lo guardéis en secreto, Klaus y Elijah lo entenderán.
Rebekah: Se lo diré cuando yo misma lo sepa. Adiós y gracias.
Caroline: Adiós.
Hayle: Dónde se va Rebekah?
Caroline: No lo se.
Hayle: Se va con Marcel, verdad?
Caroline: No puedo afirmarlo ni negarlo.
Hayle: Pobre chica, hace tanto que persigue el amor verdadero, ojalá Marcel sea su hombre.
Caroline: Nunca se sabe de quien se va a enamorar una. Mirate a ti y a Elijah, es imposible un amor verdadero cuando una de las personas no ama de verdad a la otra.
Hayle: No tengo claros mis sentimientos, es cierto.
Caroline: No lo decía por ti, hace tiempo que aceptaste tu amor por Elijah. Él sin embargo, no lo tiene tan claro.
Hayle: Espero que no tarde mucho en averiguarlo.
Caroline: La luna esta preciosa, anuncia tiempos de cambio. Puede que lo descubras antes de lo que crees.

Deje a Hayle desconcertada, me despedí de ella, y busqué a la única persona capaz de hacerme sonreír aquella noche. Pero él me encontró a mi antes.

Klaus: Qué hace una mujer tan bella como tu con esa cara tan seria?
Caroline: Qué hace un hombre tan encantador como tu para hacerme sonreír?
Klaus: Veras amor, es tan simple como...-la coge de la mano, la hace girar grácilmente sobre si misma, y la lleva hasta él- ...tenerme cerca, soy una compañía estupenda.
Caroline: Y vanidosa, arrogante...
Klaus: Enserio? Nunca me lo habían dicho. -sonrie pero enseguida pone cara seria- Si tan malo soy, cómo es qué aun estas en mis brazos?
Caroline: Por qué no iba a estarlo? Aquí me siento segura.
Klaus: Dónde amor?
Caroline: En los brazos de mi novio, la persona a la que mas quiero, mas que a los dulces. Y mira que eso es difícil.
Klaus: Cierto.
Caroline: Pasa algo?
Klaus: Nada, solo que, es la primera vez que te refieres a mi como
Caroline: -se rie- De verdad, Klaus, eres adorable.
Klaus: Que he hecho?
Caroline: Nada, nada. Solo es que me extraña que te sorprenda un detallito tan poco importante.
Klaus: Pues llámame loco o anticuado, pero el calificativo es para una relación seria y duradera que suele desembocar en el matrimonio. No estoy acostumbrado a que usen esa expresión conmigo.
Caroline: Pues acostumbrate a oírlo. -se miran y sonríen- Espera, has dicho matrimonio?
Klaus: Empiezo a arrepentirme de haberlo dicho.
Caroline: No, no, tranquilo, es que me ha pillado por sorpresa, no lo había pensado. Es decir, planeo mi boda desde los doce años, pero nunca me lo había planteado. Es un gran paso...
Klaus: Hay mucho tiempo.
Caroline: No me has dejado terminar. Es un gran paso que me encantaría dar contigo, en un futuro.

Los diarios de Caroline IIDonde viven las historias. Descúbrelo ahora