Capítulo 19 - Coney Island

88 7 7
                                    

La semana transcurrió lento. Demasiado lento. No podía con la ansiedad de saber si Matt me llamaría o no y habiendo dicho todo lo que le dije estando borracha, no podía tener la certeza de que seguiría interesado en retomar una relación conmigo. ¿Por qué demonios dije que no sabía lo de sus discos? Por supuesto que lo sé, pero el alcohol me dijo "hazte la indiferente, Mimi". Vaya plan. Diría que tal vez yo debería ser quien llame, pero me asusta mucho. Es que cada vez que tengo que insistir por algo me asusto, siento como si tuviera que tragarme todo el orgullo que llevo dentro y admitir, nuevamente, que me equivoqué.

Odio esta incertidumbre. Odio pensar que realmente Matt ya no me ama y que me veo como esa Mimi de dieciséis años a quien tuvo que acorralar para que le confesara sus sentimientos. Aunque sigo teniendo bastante de ella, sigo siendo cobarde cuando debo confesar mis sentimientos. Sigue asustándome la frialdad con la que creo que podrían ser recibidas mis palabras y sigo sin tener el control de las situaciones. Cada vez que intento algo romántico me resulta mal, así como en el karaoke la otra noche.

Sé que dije que nunca me han rechazado, pero eso es básicamente porque yo no le confieso mi amor a los chicos y tampoco los invito a salir, a menos que sea una apuesta segura. Cuando Matt y yo comenzamos nuestra relación, él fue quien me buscó y siempre ha sido él quien se ha encargado de afrontar los problemas. Él siempre estuvo buscando solucionar cada problema que surgía entre nosotros o a nuestro alrededor. Es cierto que es un poco sobreprotector pero tal vez soy el tipo de chica que necesita más ayuda de la que cree.

No siempre los problemas vienen desde afuera, en mi caso la mayoría son internos. Siempre entro en conflicto conmigo misma cuando debo tomar decisiones, nunca estoy segura de si lo que haré está bien y muchas veces evito hacer cambios drásticos por miedo a que no funcionen o que sean muy difíciles de mantener. Aún con todo eso, Matt siempre estuvo para mí. ¡Diablos!, ¡¿por qué no llama?!

Después de desayunar, salimos con Alice y un par de amigos suyos al supermercado para hacer las compras. Alice nuevamente quería hacer una fiesta, aunque yo ya no quería seguir de fiesta en fiesta, es cierto que es divertido, pero luego de varias noches seguidas, es agotador y realmente necesito reponer mis energías para recorrer esta ciudad. Además, en cada fiesta tengo que lidiar con un par de idiotas que quieren ligarme, siempre vienen, aunque nadie los invita, son tan desagradables. Me gustaría que Yamato estuviera aquí, pero no lo culpo por querer alejarse de mí.

Estuve buscando lo que necesitábamos entre los pasillos del supermercado cuando de pronto lo vi. No supe que hacer y creí que sería bueno esconderme ya que no quiero causarle más confusión. Para mi desgracia, al salir corriendo del pasillo, choqué con una pila de latas de arvejas y las tiré todas. Con la suerte que traigo, el piso estaba húmedo y me hizo resbalar, cayendo al suelo bruscamente. Creo que el dolor que sentí por el impacto no fue nada en comparación con la humillación de destruir el supermercado a vista y paciencia de todo el mundo.

No. No era todo el mundo lo que me importaba.

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.
Desearía Nunca Haberlo sido - Digimon fic.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora