Al día siguiente me levanté temprano; no había podido pegar el ojo en toda la noche, no podía dejar de pensar en cómo estaba esa pequeña niña, ¿se parecería a mi hermana?.
-Buenos días -saludó Jake cuando me vio tomando un café en la cocina-
-¿Qué tal? -mencioné. La verdad es que no tenía muchas ganas de hablar ahora, pero necesitaba mencionarle a Jake lo de la bebé para que me acompañará a buscarla- ¿Jake?
-¿Qué pasa? -Mencionó mientras le ponía agua a una taza y así proceder a prepararse su café-
-Necesito que me acompañes a buscar al bebé de mi hermana -rápidamente levantó la mirada hacia mi- cuando mi hermana ''desapareció'' -mencioné haciendo comillas con los dedos- estaba embarazada... embarazada de... Leonardo, de ese idiota.
-¿cómo sabes eso?
-revisé sus cosas y encontré un diario y un test de embarazo. En el diario especificaba su historia con Leonardo -mencioné con mirada baja- ¿me acompañaras?
Guardó silencio un rato como procesando todo lo que le acaba de decir.
-Yo te acompañaré a cualquier parte del mundo, mujer -nuestras miradas chocaron y rápidamente me sonroje-
Terminamos de desayunar tranquilamente, la convivencia con él no era fácil pero tampoco dificil. Apenas terminamos de comer nos subimos al coche que nos habían regalado y le iba indicando a Jake que camino debía de tomar. Le indique se detuviera en un edificio completamente blanco con ventanillas muy grandes. Entramos y me dirigí a una dirección donde nos atendió una jovencita muy amable, le invite que éramos familiares y que queríamos darle una sorpresa, ella nos dijo que no nos podía dar la llave pero si el número de habitación que en este caso era el 112 piso 4 le agradecí y le deje un pequeño obsequio.
Toque varias veces la puerta de Sebastián y le dije a Jake que esperara en el piso de abajo que volvía rápido. Espera a que la puerta se abriera y así sucedió.
-¿Te sorprende verme? -sonreí y pase antes de que me prohibiera la entrada-
-¿Bell? -su cara paso a ser completamente blanca-
-Así es, ha pasado mucho tiempo ¿no?
-S-sí -mencionó- ¿que ha sido de tu vida?
-no nos hagamos los tontos, la niña, ¿dónde está?
-¿de que niña me hablas?
-Sebastián, no quiero perjudicarte así que dame al bebé de mi hermana, o llamaré a la policía.
Él calló unos minutos y parecía entender de que no tenía salida alguna.
-Isabella, no hagas esto porfavor, Lucía me encargo a mi que cuidara de esa niña, y la he cuidado durante estos 10 meses.
-Pero ahora yo se de la existencia de esta niña y la voy a cuidar yo, es mi sobrina y la cuidaré como si fuera mi hija -tome una pausa para calmarme porque no tenía mucha paciencia- Puedes ir a visitarla cuantas veces tu quieras, pero la bebé se va conmigo -me mantuve firme-
-Está bien -Dijo. Camino hacia un cuarto y espere ahí un rato- Está dormida, a esta hora toma su siesta y tomo su leche tres veces al día.
-Hola pequeña -Simplemente era el fiel retrato de Lucía-
-Toma, aquí metí algo de su ropita mientras le compras y solo quería pedirte que no le cambies el nombre... parece haberse acostumbrado a él. Lucía no quería encariñarse así que me dejó a mi colocarle el nombre.
-¿qué nombre has elegido?
-Antonia, Fernanda Antonia -mencionó con una tierna sonrisa en el rostro-
-Sebastián, no quiero privarte de verla, puedes visitarla cuando quieras... ¿tienes papel y lápiz? -él asintió y procedió a buscarlo, le entregue a la pequeña un momento y empecé a escribir- Toma, aquí está mi dirección y número telefónico.
-Gracias -me entregó a la pequeña, me despedí de él y afuera yacía un Jake desperado-
-¿por qué has demorado tanto?
-necesitaba que me explicara algunas cosas, nada importante -respondí formando una sonrisa en mi rostro a lo cual él respondió con una agradable sonrisa-
-¿quieres que te ayude? -mencionó viendo a la pequeña-
-gracias -cargué a la pequeña bebé quien se movía inquietamente intentado recuperar el sueño en el cual habíamos interrumpido-
Sabíamos que no podíamos conducir con una bebé en manos pero no nos quedaba de otras, todo esto fue muy rápido y no habíamos alcanzado a comprar una silla para bebé. Así que la conducirá esta vez, seré yo.
Mientras conducía ví que Jake miraba con unos ojos encantadores a la bebé. Lo cual me provocaba mucha ternura.
-¿cómo se llama?
-Fernanda Antonia -mencioné formando una sonrisa-
-es un muy lindo nombre -me miró- ¿empezaremos no es así?
Detuve el auto en seco, la verdad es que hacerse cargo de una niña implicaría cambiar todo, empezar de cero, olvidar por todo lo que había sufrido, quizá ya era hora de dejar el rencor de lado y abrirme a nuevas oportunidades, quizá Lucía estaba intentando decirme esto todo este tiempo.
-Empezaremos de nuevo -afirmó con una sonrisa-.
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Guerrera - (En edición)
Genç Kurgu''No todos pueden super su propio pasado'', me repetía una y otra vez en mi mente mientras las lagrimas se acumulaban en mis ojos, sin poder olvidar aquella horrible noche en la que mi vida se convirtió un maldito infierno. No sabes que de un segun...