Por más insignificantes que sean, todos cometemos errores.
Y la mayoría son inexorables.
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ADVERTENCIA
- Género Yaoi (chicoxchico)
- Pareja principal Riren (LevixEren)
- Lenguaje vulgar
- Contenido explícito (sexo)
...
Papeles cayeron al suelo por el golpe que el escritorio recibió, estaba molestó. Muy enojado y era mejor que nadie se acercará o diera su opinión.
Algunos empleados rogaban para que Ackerman no los llamará, temían que fueran botados de su trabajo. Hanji entro muy segura de su decisión acompañada de Farlan.
- No te culpes, esto fue error de Farlan.
Farlan volteó a verla con notorio terror, no quería que Levi se desquitará con él.
- Amigo, no fue intencional. Además no fue tanta perdida de dinero. - Respondió Farlan.
Hanji volvió a tomar la palabra. - Recuerda lo que Eren te dijo, no debes enojarte o estresarte.
Levi se acercó a ambos con el ceño fruncido, ambos amigos dieron unos pasos hacia atrás. Ackerman no dijo nada, ignoró por completo su enojo por un instante.
- El dinero no es mío al final de cuentas, todo es tuyo Farlan. Lo único que yo estoy haciendo es presentar ideas para tus proyectos. No lo arruines o tus padres resultarán molestos y hechandome.
Farlan contestó con rapidez. - Te pago bien.
Y Levi se enojó, detestaba que hecharan en cara la ayuda que daban, por eso él prefería hacerlo todo por su cuenta. Aunque se tardará más.
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La secretaria de Ackerman recogía y limpiaba el desastre que Levi había dejado en su oficina.
Se apresuró al ver que su jefe ya estaba allí y aún no había terminado.
- Vete - Pidió él, no lo repitió ni dos veces y la orden fué recibida.
Reposaba su cabeza en el respaldo cómodo de su silla, esperaba la llamada de los nuevos inversionistas y lo único que llegaba era la ansiedad y los nervios que sabía calmar a la perfección con sus “medicamentos”.
Dejó que la paz lo cubriera por completo, el efecto de las pildoras fue rápido. Soñaba despierto, imaginaba un mundo totalmente distinto, un lugar donde su madre lo amaba.
Un lugar donde los colores eran intensos, en dónde lo irracional era verídico y lo muerto revivía. Se despertó con un dolor fuerte de cabeza, no fue consiente de la hora. Llamó a Hanji y pidió que buscará a alguien.
Momentos después ella llegó con la información necesaria y se la entrego. Sin dar señales de lo que haría salió de la oficina y siguió la dirección recibida.
Caminaba sin apuros, quería arreglar cuentas con esa mujer.
Tocó la puerta de la casa desaliñada y fue abierta por la persona que buscaba. Sin dar explicación o pedir permiso entro a la casa de Petra.
Para su mala o buena suerte se encontraba sola. Levi sonrió de medio lado y ella lo veía asustada.
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Un agudo gemido de satisfacción salió de ella, sus senos estaban expuestos y a la disposición de él.
Petra seguía con su labor, se impulsaba con ayuda de sus piernas. Entre gemidos pedía, exigía por ser complacida.
Levi apretó la cintura de la mujer, la sostuvo con firmeza y las embestidas fueron más firmes y directas.
- Aaah L~Levi - Gimió al sentir las manos del nombrado recorrer su cuerpo con fuerza. Siguieron los movimientos bruscos hasta que él acabó con su exitación.
Recuperó la cordura y volvió a vestirse sin prisa. Petra se acomodó y cubrió su cuerpo con las sábanas de su cama. - Creí que vendrías a golpearme.
Levi garraspeo, tenía la garganta seca.
- Quería sex*. ¿Tu trabajo no era c*ger por dinero? - Escupió a un lado de la cama y se levantó.
Ella soltó un suspiro y luego una risa. - Y pensar que hace unos años estabas hecho una porquería. - Se arrepintió rotundamente de lo dicho.
Levi se acercó a ella y sin ninguna pizca de delicadeza tomó el rostro de la mujer con fuerza. - Eres una mujer asquerosa, por tu maldita culpa maté al bastardo de Zackly. Si nunca te hubieras insinuado a mí yo nunca hubiera hecho eso.
Ella se apartó de Levi. - Tarde o temprano eso pasaría, ahora debes cargar con el peso de ser un asesino. Tu madre también es o quizás aún sea una prostituta, no vengas a decirme o darme clases de moral. Asesino de mierd*.
Levi no dijo nada, no le afecto en lo más mínimo lo que esa mujer habló. No valía la pena. Pero antes de salir de la casa respondió con auténtico tono irónico y sarcástico.
- Espero que tu hija tampoco tomé el camino de la vida galante, y ojalá que no se entere que eres una prostituta. - Acomodó su pantalón. - Y también espero que el imbécil que tienes como esposo no se entere que eres fácil de c*ger. Pase un buen día señorita Ral.
Después de decirlo salió de la casa y fue directo a su departamento.
En el transcurso del camino un dolor intenso llegó a su cabeza, frunció más de lo común el ceño y con ambas manos acarició su rostro. Al llegar a su departamento tiró las llaves del auto en cualquier lugar y de mala gana quitó sus zapatos.
Quitó su ropa y no le importo donde caía, entro al baño y se dió una ducha rápida, luego salió y sin más se acostó en su cama para descansar.
Acción que fué rechazada por su cuerpo, se levantó de la cama y fue por un tragó en la barra de bebidas de su departamento.
Con notoria angustia y molestia buscó su móvil y marcó con desesperación el número telefónico de Eren pero no logró escuchar la voz deseada solamente la operadora que lo dejaba en espera.
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Nota
Si tienen alguna duda la responderé en los comentarios.