Starstruck | h. s. | a. u. ©

S i e t e.

Me arreglé el cabello antes de llegar a donde Harry estaba, aún acompañada de Ethan y Gabe. Ya era automático y no lo podía controlar, lo cual era a veces contradictorio pero buscaba no verme tan mal cuando hablaba con él. Cuando me vio me sonrió y con la cabeza me indicó que lo siguiera, me condujo afuera hacia la terraza del bar. Ahora el ruido de la fiesta era sordo y sentí mis oídos zumbar un poco antes de que se adaptaran al silencio. El clima australiano era mucho más cálido, era de noche y el viento se sentía tibio contra la piel. Harry se sentó en una de las sillas con aire despreocupado y yo lo imité, soltó un gran suspiro y una enorme sonrisa se dibujó en su cara.

-No sé que tan bien tome tu madre que no regreses a tu casa en 6 meses.- llevó su pulgar a su nariz, un gesto que hacía constantemente aunque todavía no descifraba bien cuándo.

-Hasta ahora, bastante bien. Pero creo que está aliviada de librarse de mí después de que debí haberme ido a los 18.

- ¿En serio?- alzó las cejas, mirándome con atención.

-Claro. - repuse y el dejó escapar una risa. -No tarda en echar a Kyle también.

- ¿Has hablado con ella?

-Sí, hoy justo antes del concierto. Está planeando irse a Irlanda con Archie... no sé, algo de una planta de producción allá. - intenté recordar las palabras de mi madre.

- ¿Mudarse?- me miró atento y por unos segundos enganché mi mirada a la suya. Carraspeé la garganta para disimular mi escrutinio y asentí con la cabeza.

Los nervios de mi primer día de trabajo habían opacado la molestia hacia mi madre después de esa llamada esa mañana, se había portado un tanto egoísta, o al menos eso me pareció a mí.

- ¿A Irlanda?- escupí, sin creer lo que me decía. - ¿Y Kyle? ¿Qué pasará con la casa?

-Kyle también quiere irse a Irlanda. Y la casa... pues he hablado con el señor Thompson y desocuparemos la casa a final de mes para que pueda rentarla de nuevo cuanto antes.

-Pero mamá... ¿Acaso pensaste en mí?- argüí. ¿Qué demonios se pensaba?

-Estás en Australia ahora, en unas semanas irás a Japón ¿no? No estarás en casa en 6 meses.

-Lo sé, pero volveré a Londres algunos días entre esos 6 meses. ¿A dónde se supone que voy a llegar si tú y Kyle se mudarán? ¡Esa es también mi casa!

-Eleanor, puedes buscar un lugar donde vivir. Ahora puedes hacerlo.- su voz sonaba dolorosamente tranquila y quise buscar cualquier destello de consideración, de culpa o de remordimiento de estarme haciendo semejante barbaridad.

-Pero mamá, siempre he vivido contigo. - contrataqué y en ese momento sentí de verdad que mi madre me estaba echando de mi casa pero también de su vida.

-Cariño, esto será bueno para ti. Necesitas despegarte de mí, necesitar hacer tu vida propia, eres joven. Lo necesitas.

- ¿Qué demonios dices mamá? ¿Qué hay de Kyle?

-Él es diferente a ti Eleanor, Kyle hace sus cosas pero tú siempre has acudido a mí. Pídele ayuda a Harry para encontrar un lugar en Londres. Además no te dejaré para siempre, ahora estarás ocupada y este trabajo será excelente para que puedas independizarte, pero cuando visites Dublín sabes que podrás venir y visitarnos a tu hermano y a mí.

-Mamá, debo irme. - y así sin más le colgué sin dejar que se despidiera.

Volví a la realidad y Harry me miraba atento en espera de que yo continuara hablando. Había empujado todo ese tema de la mudanza de mi madre en la parte más recóndita de mi cerebro para que no me afectara en mi primer día oficial de trabajo. De repente Archie había tenido la oportunidad de abrir una nueva planta y mi mamá sin darle un segundo pensamiento ya había decidido irse a Dublín sin haberlo hablado antes conmigo. Me sentía rechazada y herida.