VAMPIRE, simon lewis².

veintisiete

Simon hizo una mueca parecida a una sonrisa y estiró sus brazos, la pelirroja sonrió mientras corría hasta él para abrazarlo. Los brazos de Clary envolvían el cuello de Simon y se podía observar como ella estaba parada en puntas de pie para llegar, aquella imágen causaba ternura en Dante de sobre manera.

— Si necesitas que me quede un tiempo más lo haré, Clary — Simon susurró al mismo tiempo que abrazaba a su mejor amiga, sus ahora fuertes manos la sostenían por la cintura.

— ¡No! — Clary se apresuró a contestar —, quiero que tú estés bien y seas felíz, estaré bien.

— Vendré cada vez que me necesites.

— De acuerdo, no te preocupes por mí.

El castaño asintió y miró hacia atrás, a Dante quien hablaba con Magnus mientras Olivia se mantenía a su lado seria. Desde lejos se veía su incomodidad y lo mal que se sentía por la situación, le había pedido perdón un millón de veces al menor.

— Necesito hablar con tu novio — Clary pronunció de forma casual mientras se alejaba del agarre de Simon.

— Él no es mi novio, al menos no aún.

— ¿Vas a irte a vivir con él a otra ciudad y no son novios todavía? ¡Qué extraño!, De todas formas, necesito hablar con él.

Simon rodó los ojos y levantó la mano para pedirle a Dante que se acercara, cuando él llegó a su lado le sonrió.

— Clary quiere hablar contigo.

Dante asintió y miró a la pelirroja esperando que dijera algo.

— Escúchame, más te vale que cuides a Simon sino iremos a Chicago y te mataremos.

— No hables en plural — Jace acotó, se encontraba apoyado en el marco de la puerta y lucía cansado.

Simon rodó los ojos y se alejó de ellos, dándole privacidad a Dante y a su mejor amiga para hablar a gusto. Se llegó dónde Olivia y Magnus hablaban en voz baja, cuando observaron a Simon demasiado cerca se callaron.

— Esto es embarazoso, no sé qué decir — Simon le sonrió levemente a Magnus —, volveré a visitarlos en menos de lo que esperan.

Magnus rió al notar la incomodidad y el nerviosismo de Simon.

— Estarás bien, Lewis. Conozco a Dante hace tiempo y si él dice que va a mantenerte a salvo, lo hará.

— Es verdad — Olivia susurró de forma tímida —, estarás bien. Ahora eres parte de nuestra pequeña familia, lo sabes ¿no?.

Simon asintió solemnemente.

— Por cierto, necesito que sepas algo — la castaña siguió hablando y tomó del brazo a Simon, alejándolo un poco del brujo —, todos sabemos que tú y él terminarán siendo pareja en menos de lo que canta un gallo, así que es mi deber decir esto de parte mía y de Tauriel, llegas a romper el corazón de Dante y nosotras romperemos todos tus huesos, y vas a morir otra vez, pero esta vez no volverás ¿Entendido? Nos caes muy bien pero eso no cambia nada.

— No está en mis planes romper su corazón, ni hacer enojar a una bruja y una vampira — Simon contestó a la defensiva.

Olivia asintió.

— Bien, todo está genial entonces. Nuevamente, perdón por meterte en esta situación, no fue intencional.

— No te preocupes, Liv. Lamentarse ya nada cambia, estamos bien.

Dante dejo de hablar con la pelirroja para acercarse a su ex novia y a su futuro novio con una sonrisa de lado, había escuchado lo que Olivia le había dicho a Simon y había sido similar a lo que Clary le dijo a él, hizo que Dante se diera cuenta de lo afortunados que eran él y Simon por tener personas en su vida que se preocuparan tanto por el bienestar de ellos.

— Será mejor que haga el portal ahora mismo — Magnus habló rompiendo el silencio.

Dante y Simon asintieron de acuerdo, Clary volvió a acercarse a su mejor amigo para abrazarlo otra vez, su rostro estaba ligeramente mojado por las lágrimas.

— Clary — Simon se quejó pero aún así correspondió el abrazo —, me iré a Chicago, no a pelear contra los rusos.

— Es que, hemos estado juntos tanto tiempo que será difícil para mí no tenerte a mi lado — la pelirroja hizo una mueca aparentando ser una sonrisa —, pero lo mejor para tí es que te vayas con ellos, estarás a salvo.

Dante hizo una mueca al ver el abrazo de los amigos, se preguntaba si Simon estaba tomando la decisión correcta al irse con él. Esperaba que sí, no quería defraudar a Simon por nada del mundo y lo protegería de todo mal que se acerque a él.

En unos minutos Magnus abrió un portal directo a Chicago. Por lo que Dante tenía entendido llegarían a la casa del brujo encargado de aquel lugar y luego debían ir a la vieja biblioteca de la ciudad que había sido tomada por el clan de vampiros. Un agujero lleno de luces azules y violetas se abrió en el lugar, Olivia asintió hacia los cazadores de sombras y el brujo antes de cruzar por él en silencio. Dante recordó la primera vez que había viajado por un portal, la sensación de vacío y el silencio total envolviendo todo a su alrededor, tomó la mano de Simon para cruzar juntos pero más que nada era una especie de acto reflejo. Necesitaba saber que Simon estaba allí con él, que era real, cada vez que tomaba su mano era para asegurarse de aquello.

Para la sorpresa de Dante, Simon apretó su mano y acercó la otra hasta su mejilla para acariciarla levemente antes de atraerlo a él para juntar sus labios. Los labios de Simon eran suaves, para Dante era como volver a probar el algodón de azúcar y saber que aquellos labios le pertenecían al chico que quería lo hacía aún más adictivo, mientras que para Simon los labios de Dante ni siquiera tenía comparación, era mejor que todo lo terrenal que el menor pudo probar en su corta vida. Simon pensó que besar a Dante debió ser similar a probar el cigarrillo por primera vez, lo pruebas por curiosidad o algo más pero en poco tiempo te vuelves un fumador compulsivo.
Dante desde siempre amaba besar, pero tener los labios de Simon sobre los suyos haciendo aquella deliciosa presión era otro concepto para él, era mucho mejor que beber sangre luego de tiempo sin hacerlo o poder salir al final del día. Pero ambos se separaron casi al mismo tiempo, recordando que tenían espectadores, un portal que cruzar y a Olivia esperando del otro lado.

Simon volvió a mirar a Clary y ella estaba sonriéndoles. Magnus le hacía señas a Dante de que el portal se cerraría pronto, el vampiro mayor tiró de Simon para abrazarlo .

— Lo genial de esto, es que podré besarte todos los jodidos días y no hay separación por falta de aire — le susurró en el oído haciendo a Simon reír levemente.

Dante dejó ir a Simon pero no dejó de sostener su mano cuando dió unos cuantos pasos hacia el portal, dejando que aquellas luces se los traga y los escupiera en su nueva vida.

Fin.

Bueno, acá está el final. No es la gran cosa pero es lindo ok, el epílogo probablemente lo suba mañana o pasado mañana dependiendo la inspiración que tenga. Espero que les haya gustado esta historia tanto como a mí me gustó escribirla.
btw en mi perfil pueden encontrar la historia de Magnus, para quien quiera seguirme leyendo.