Capitulo 13

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Escuchaba sus pasos acercarse cada vez más al lugar en donde estaba escondida y sentía como me temblaba el cuerpo entero, si me pillaban seria mi perdición. Todo lo que había pasado hasta este día no será comparado a lo que me haría Roberto al encontrarme, le tenía tanto miedo, miedo a que me matara.

De pronto escuche la puerta abrirse de un golpe seco y de repente todos se quedaron callados y el hombre que se acercaba a mi se detuvo de golpe, suspire silenciosamente del alivio y cerré los ojos un momento para dar gracias a seguir con vida.

-Díganme QUIEN CARAJO TENÍA QUE VIGILARLA - gritó Roberto.

-Yo - tartamudeo el hombre que se estaba acercando a mi.

-Y en que jodido momento se escapo - siseo Roberto, le tenía demasiado miedo a ese hombre.

-No l...lo se - trago con fuerza el chico - estuve en todo momento afuera de su habitación como usted ordenó.

-Entonces como diablos escapo esta niña - se preguntó Roberto en voz baja.

-Señor - alguien le hablo - se acuerda del ducto que le mostré - preguntó con cautela - pudo haberse escondido ahí - gracias a Dios ya había salido de ese ducto, seria muertesi me hubieran encontrado. Roberto se quedo pensativo un momento y después asintió dandole el permiso de buscar.

-Ve. Encuéntrala - ordenó y todos se fueron a mi antigua habitación para buscarme, al cabo de un rato se escucharon sus pasos volver a la sala.

-¿Y? - preguntó impaciente Roberto.

-Pillamos indicios que estuvo escondida en ese ducto - respondió alguien en voz baja - pero ya se fue.

-Quien DEMONIOS ERA EL RESPONSABLE - gritó Roberto.

-Yo - respondió alguien con miedo.

Se escucho como Roberto se movía hacia el pobre hombre, bueno, pobre no, se escucho el sonido de un disparo y el cuerpo de alguien caer desplomado en el piso. Por un momento deje de respirar por el miedo.

Todo estaba en completo silencio, podría jurar que se escuchaba mi respiración acelerada.

-Que hacen todos quietos - dijo Roberto y nadie respondió -MUÉVANSE. Búsquenla y encuéntrenla.

Y de ahí todo paso demasiado rápido, se escucho una estampida salir por la puerta principal y respire aliviada mente, iba a levantarme y salir de mi escondite. Cuando se escucho un sonido de pisadas acercarse a las cajas donde yo estaba.

Estaba muy asustada, cada vez podía sentir mi muerte mas cerca, mi corazón se esta por salir de mi boca, literalmente, del susto. Los pasos fueron interrumpidos por el sonido de un celular sonando, Roberto maldijo en voz baja y contesto la llamada.

-Que - siseo - no me importa que muevan cielo y tierra quiero que la encuentren - una pausa - MALDICION SOLO ENCUÉNTRENLA.

Roberto bufo enojado cuando yo supongo había colgado el teléfono, se quedo parado un rato mas donde se había quedado, demasiado cerca de mi. Después de lo que me pareció una eternidad el comenzó a dirigirse hacia la puerta, se escucho como la cerro de golpe y yo suspire une levante con cuidado de mi lugar.

Me acerqué a la ventana y vi como se alejaba en su auto, no había nadie a la vista, al menos en lo que alcanzaba a ver, decidí arriesgarme de una vez y salir de ahí. Solo quería huir lo más rápido posible y volver a los brazos de Travis, en los cuales siempre me sentí muy protegida.

Me dirigí a la puerta principal e intente abrirla con cautela, casi grito de la felicidad al darme cuenta que la habían dejado despegada. Todo parecía tan irreal. Salí al exterior y respire aire libre, puro.

No dude ni un segundo mas y comencé a caminar hacia cualquier lado, por fin era libre o al menos eso creía yo.

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