Sonrió y acomodó la parte baja de su vestido con ambas manos. Soltó un suspiro y se miró al espejo.
Sentía que lucía igual a una princesa, era su sueño hecho realidad. Por fin había llegado el gran día, el más feliz de toda su vida, según había escuchado; deseaba con ansias, ir a encontrarse con su amado chico de acero y jurar ante todos sus invitados, que lo amaría por la eternidad.
Su vestido era hermoso, corte de princesa, mangas largas, con un escote de corazón. Había tardado un tiempo en encontrarlo. Cada vestido que se medía, no era de su total agrado, en cambio ese, la hacía sentir única.
—¿Estás lista?—
Preguntó Selina entrando a la habitación de su hija, ella la vió y asintió con mucha emoción. Se dieron un fuerte abrazo y trataron de retener las lágrimas. Era totalmente melancólico. Adele había crecido y era su turno de salir del nido, formar su propia familia y escribir su historia de amor junto al hombre que amaba.
—Estoy feliz... demasiado... —
Murmuró la menor limpiando rápidamente una lagrimita traicionera. Soltó una pequeña risa al igual que su madre, no querían llorar, al final de cuentas, ese día debía ser feliz. Aunque, aún había algo que inquietaba a sus padres. La pareja no viviría en Gotham, sino que, lo haría en Metrópolis. Bruce no lo aceptaba por completo, puesto que, eso significaba que no la podría cuidar de cerca, pero, confiaba en Conner a pesar de "detestarlo". Opinaba que su hija había hecho una excelente elección con ese chico, él la amaba y de eso, todos eran testigos. Adele se haría cargo en Metropolis de Wayne Enterprise e iría a visitar a su familia muy seguido.
—Te extrañaré, mi pequeña gatita.—
—Y yo a ti, mamá.—
Sonrieron y volvieron a abrazarse.
—Sé que eres feliz con él y eso me hace feliz. Sabes perfectamente que esta es tu casa y que siempre contarás con nuestro apoyo. No dudes ni un segundo en acudir a nosotros, sí lo necesitas, ¿de acuerdo?—
—De acuerdo.—
Se separaron y Selina dejó que su hija siguiera preparándose. Ya todo era perfecto. Acomodó el velo que estaba colocado sobre su cabello recogido en un chongo. Cuando supo que ya estaba lista, cerró los ojos y se recordó que ese era su día. Escuchó cómo alguien abría la puerta y entraba, sonrió al ver a su padre.
—Te ves hermosa.—
Le halagó Bruce, al mismo tiempo que la abrazaba.
—Gracias, papá —
—Cariño, quiero que sepas que siempre podrás contar conmigo, pase lo que pase... ¿entendido? —
Comentó acariciando sus mejillas, ella asintió y recargó su cabeza en el pecho de su padre.
—¿Sabías que eres un excelente padre? —
—Uhm... por supuesto que lo sabía —
Respondió divertido.
—Nunca me dejes, ¿está bien? Siempre permanece a mi lado y nunca sueltes mi mano —
Pidió con un pequeño puchero en el rostro.
—Siempre estaré a tu lado... siempre te voy a cuidar, eso te lo prometo —
—¿Y aún tienes fuerzas para eso? —
Preguntó de forma burlona. Bruce la miró con una ceja alzada y una expresión graciosa de indignación.
—¡Por supuesto que si! Aún soy muy joven, ¿no lo ves? Te recomiendo no subestimarme —
Ambos rieron por ese comentario. Era verdad, él aún tenía fuerzas para cuidar de su pequeña hija y del resto de los chicos también. Puede que tuviese sus errores, pero al final de todo, daría lo que fuese por ver feliz a su familia. Después de todo, nunca se aprende a ser un padre perfecto.
—Te amo tanto, papá... siempre he dicho que Conner es mi primer chico favorito, pero creo que... tú eres mi primer chico favorito, no se lo digas a él, ¿de acuerdo? —
—De acuerdo —
Respondió sonriente. Bruce tomó de la mano a su hija y juntos, bajaron las escaleras. Adele lucía resplandeciente, era la novia más hermosa según su madre. Recibió muchos halagos y comentarios divertidos sobre la boda. Dick le dijo que estaba ansioso por tener otro sobrino; Jason le apostó a que la primera semana firmarían el divorcio; Tim dijo que olvidaría que Conner era su mejor amigo, sí le hacia daño; y Damian... él sólo le dijo que el primer día de casados, iría a su casa para recogerla, pues pensaba que sólo un día se soportarían.Bruce, Selina, Adele y Alfred subieron a la limusina, el resto se había adelantado y los esperarían en donde se había hecho la reservación, lugar donde se celebraría la ceremonia y la fiesta.
Y bueno, cómo es típico de algunas novias, ponerse paranoica, querer salir huyendo o incluso vomitar de los nervios, Adele no fue la excepción.
—¿No vas a bajar?—
Le preguntó Bruce extendiendo su mano, ella negó y se aferró a su asiento. Selina soltó una risita, tocó el hombro de su esposo y le dijo que se trataban de los nervios.
—No puedo... n-no puedo.—
Murmuró mirando a la nada. Sus ojos se llenaron de lágrimas, apretó la tela inferior de su vestido y negó una y otra vez.
—Por mi... mejor vámonos.—
Mencionó Bruce subiendo al auto con una sonrisa. No era de su agrado que la apartasen de su pequeña hija.
—¡Bruce! Se supone que debes ayudarla.—
Regañó Selina con el ceño fruncido.
—Eso es lo que hago... la ayudo a escapar... cariño, ¿a dónde quieres ir? Podemos ir a Italia... o a Marruecos, donde quieras.—
Recibió un golpe en la cabeza por el comentario que había dado. Adele negó y de repente, sintió que el estómago se le revolvía, salió de la limusina con una rapidez impresionante y tomó varios respiros profundos.
—¡Cariño!—
La ex ladrona de joyas, acarició su espalda, pensó que su hija vomitaría, pero no lo hizo.
—N-no puedo... —
—Amor, sí no te sientes lista, lo entendemos... volvamos al auto y escapemos de aq... —
—¡Bruce Wayne! ¡¿Quieres dejar de empeorar la situación?!—
El mencionado rodó los ojos y se cruzó de brazos de forma infantil. Una expresión extraña en él, pero definitivamente muy divertida.
—Vamos, pequeña gatita, respira y piénsalo... ¿en verdad quieres dejar plantado a Conner?—
—No, mamá.—
—¿Entonces?—
—Estoy nerviosa... ¿y sí él se arrepiente? ¿Y sí llego y no lo veo? ¿Qué tal sí piensa que no luzco bonita? ¡¿Y sí tropiezo antes de llegar al altar?!—
Estaba en un alto nivel de frustración. Las lágrimas habían arruinado su maquillaje y de tanto jalonear su cabello, el peinado se había destrozado. ¡Todo era un caos!
—Cariño, Conner te ama mucho y jamás te dejaría. Te vez hermosa y... estoy segura de que tu padre no te dejaría caer.—
—Lo amo mucho, mamá... pero no sé sí soy suficiente para él.—
Confesó mirando sus manos con vergüenza. Felicitaciones para Conner Kent, porque él era el único que lograba poner así de nerviosa a Adele. Selina acarició su mejilla, estuvo a punto de decir algo, pero su esposo se le adelantó:
—Adele... eres una mujer única, no debes pensar que no eres suficiente para él, porque eres lo mejor que le pudo haber pasado, créeme.—
Le sonrió y la abrazó, ella dijo que estaba lista. Con las manos milagrosas de Selina Kyle, su cabello y maquillaje quedaron aún mejor de lo que estaban. Bruce seguía opinando que no era tan mala idea dejar plantado al kryptoniano, sin embargo, muy en el fondo sabía que Conner Kent era el motivo de muchas sonrisas de su hija; así que, tomó su mano y la llevó hasta dónde se encontraba el chico de acero.
—Tengo kryptonita guardada en la Bat-Cave.—
Le susurró al de ojos azules que lo vió con confusión.
—¿Ah?—
—Sólo para que lo recuerdes.—
No dijo nada más y los dejó solos. La pareja se vió y se sonrió.
—¿Te pusiste nerviosa?—
—¿Te pusiste nervioso?—
Soltaron una pequeña risa y asintieron. Miraron al hombre que los casaría y pidieron que iniciara la ceremonia. Y todo transcurrió con tranquilidad; Dick lloraba en el hombro de Babs, con su pequeña hija pelirroja en brazos, que acariciaba su cabeza para consolarlo; Jason intentó no llorar, pero le fue inútil, Hailee lo vió y le dijo a su madre con un tono infantil: "papá llora... seguro que es porque no quiere comer sus verduras"; Tim soltó una que otra lagrimita y sólo apretó la mano de su novia; Damian sonreía y abrazaba a su esposa. Y Bruce... bueno él tenía que aguantarse las ganas de golpear a Clark, que no paraba de decirle: "somos familia, somos familia." Selina y Lois ya planeaban los nombres que sus nietos llevarían.
"Los declaro marido y mujer... puede besar a la novia." Esas palabras tan ansiadas por parte de los dos, por fin habían resonado por todo el lugar.
—Y bien, Señora Kent, ¿quiere que la bese?—
—Por supuesto que si, Señor Kent.—
Rieron por sus comentarios, Conner tomó su cintura con delicadeza, Adele posicionó ambas manos en sus mejillas y así, unieron sus labios. Los aplausos no se hicieron esperar y pronto ya estaban todos disfrutando de la fiesta.
—¡Uh! Pero que buen bailarín eres.—
Le elogió Adele a Max, que reía en los brazos de su tía, mientras que Hailee, Katy y Lian peleaban por bailar con el novio.
—¡Es mi tío!—
—¡No! ¡Mío!—
—¡Mío!—
La pequeña Harper sacó la lengua, Katy se cruzó de brazos y Hailee pellizcó a ambas niñas, logrando así que se distrajeran y pudiera ser ella quien bailaba con el tío Conner.
En la fiesta todo transcurría con alegría. Se había acordado que sólo super héroes y vigilantes, asistieran a la boda y uno que otro amigo "normal". Las felicitaciones no se hacían esperar, los halagos y consejos tampoco. Adele bailó con su papá, una hermosa canción algo melancólica y adorable; ella no pudo evitar sacar una que otra lagrimita. Dick también la sacó a bailar. Y por fin, los novios se adueñaron de la pista.
—Se siente bien, estar casados —
Murmuró Adele con una sonrisa divertida, mientras miraba a los ojos a su amado esposo.
—Por supuesto que si... —
Besó su frente con dulzura y acarició su mejilla. Adele besó su mano y lo miró con amor.
—Te amo tanto, chico de acero —
—Y yo te amo tanto, Adele Wayne —
Se sonrieron y se fundieron en un tierno beso.Mientras tanto en alguna parte de Metrópolis...
—¡Sólo te pido que hagas una cosa por mi! ¡Una sola cosa! —
Gritó furioso el rubio, mientras golpeaba con ambas manos el escritorio.
—Ya dije que no —
—¡¿Y por qué no?! —
—Tengo mejores planes para ellos... sólo hay que esperar un poco —
Explicó Lex sentado tras el escritorio con las manos entrelazadas y una sonrisa en el rostro.
—Se acabó, no necesito tu ayuda, puedo hacer... —
—Nick, ya tardaste demasiado, a este punto deben estar brindando el gran acontecimiento —
Comentó Lina sonriente, para hacer enfadar más a su hermano, que estaba que explotaba del coraje.
—Tú cállate o me desquitaré contigo —
Amenazó, señalándola con el dedo índice.
—Quiero ver que te atrevas... —
—¿Crees que porque eres mi hermana no me atreveré a golpearte? —
—Escucha, Nick, ella jamás te quizo y me duele ver que crees que alguna vez fue así... ella ya es feliz con alguien más y piénsalo... habrá un beneficio de esa boda, sí tan sólo escucharas el plan de papá —
Lina tenía la misma expresión que su padre, lo cual empezó a formar dudas dentro de Nicholas. Se dejó caer rendido en la silla frente a Lex y se cruzó de brazos, esperando una buena explicación.Y bueno, uno de los momentos más felices en la vida de Adele, llegó por fin 🥳
Y no quise arruinar su momento, porque ya fueron varios malos acontecimientos, pero... aún faltan más cosas que contar y que enfrentar 😉
¿Qué creen que planeen los Luthor? 🧐Espero que les haya gustado el cap, tanto como a mi me gustó escribirlo...
Les mandó un millón de besos!
😘🤩
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The Life of a Wayne Girl.
Fiksi PenggemarSegunda parte de My new life. My new family. Dos años han pasado desde el encierro de Lucy Quinzel. Nuevas aventuras en la familia Wayne, problemas de pareja entre Adele y Conner, viajeros de otros sitios... una muerte inesperada... The life of a Wa...