025.

9.6K 1K 327
                                    

Habíamos abandonado los terrenos de Hogwarts. Era evidente que habíamos viajado muchos kilómetros, porque ni siquiera se veían las montañas que rodeaban el castillo.

Nos hallábamos en un cementerio oscuro y descuidado de una pequeña iglesia, donde nuestra silueta se podía ver tras un tejo grande que teníamos a nuestra derecha.

A la izquierda sé alzaba una colina, donde se distinguía apenas la silueta de una casa antigua y magnífica.

—¿Les dijo alguien que la Copa fuera un traslador? —nos preguntó Cedric.

—Nadie. —respondió Harry, mirando el cementerio.

El silencio era total y algo inquietante.

—¿Será esto parte de la prueba? —pregunté.

—Ni idea. —dijo Cedric. Parecía nervioso. —¿No deberíamos sacar la varita?

—Sí. —asintió Harry.

Ambos han sacado su varita para luego observar  a su alrededor, mientras que yo intentaba encontrar la mía, la cual he visto muy cerca del traslador. 

Iba a acercarme, pero entonces he oído unos pasos acercarse.

—Alguien viene. —dije al momento en que les indicaba que nos ocultáramos detrás de una lápida. Algo en lo que solamente Cedric me hizo caso, mientras que Harry se ha quedado ahí parado. —Harry...

Susurraba el nombre de Harry para que viniera con nosotros, pero este estaba mirando hacia al frente tan fijamente y por un momento tuve las intenciones de acercarme a él para traerlo con nosotros a la fuerza, pero Cedric me ha detenido y me hizo una señal de que me mantuviera callada.

Oí pasos acercarse y entonces Harry comenzó a quejarse mientras llevaba sus manos hacia su cara, posiblemente su cicatriz haya comenzado a dolerle, pero... ¿Por qué? ¿Qué estaba sucediendo?

En ese mismo instante he visto como Harry se elevaba y al alzar un poco mi mirada he logrado ver a una persona baja encapuchada con su varita levantada, con la cual arrastraba a Harry hacia una lápida de mármol.

El hombre de la capa hizo aparecer por arte de magia unas cuerdas que sujetaron firmemente a Harry, atándolo a la lápida desde el cuello a los tobillos. Harry forcejeó, y el encapuchado lo golpeó.

—¡Tú! —dijo Harry jadeando.

Aquel encapuchado no le respondió, simplemente sacó de su capa una tira larga de tela negra y se la metió a Harry en la boca. Luego, sin decir una palabra, le dio la espalda y se alejó a toda prisa.

Cuando aquel encapuchado se alejó he intentado buscar mi varita, pero al recordar que no la tenía conmigo he mirado a Cedric. Él se mantenía mirando fijamente a Harry preocupado con su varita en la mano, pero antes de que él se atreviera a ayudar a Harry, le he sostenido fuertemente aquella mano para así impedírselo.

Cedric me miró sin comprender, pero simplemente le hice una señal de que se mantuviera quieto y callado, ya que había logrado oír nuevamente unos pasos e incluso oía a algo arrastrarse entre la hierba.

Nuevamente alcé un poco mi mirada, intentando de que no me viera y entonces he podido ver a la misma persona arrastrando lo que parecía ser un caldero de piedra, aparentemente lleno de agua.

El líquido que contenía el caldero parecía calentarse muy rápidamente con aquel fuego que había hecho la persona encapuchada.

—¡Date prisa! —le gritó alguien.

—Ya está listo, amo. —mencionó el encapuchado, y al oírlo he podido saber que se trataba de Colagusano.

Colagusano abrió un lío de ropa que se encontraba en el suelo, revelando lo que había dentro. Por un momento quise gritar, pero Cedric me había tapado la boca impidiéndome que lo hiciera y eso era algo bueno, ya que, así no revelaríamos donde nos ocultábamos.

LONELINESS; Draco Malfoy. ✓Donde viven las historias. Descúbrelo ahora