Desolación.

Tus recuerdos, lo único que me queda de ti.

Abre otra botella de ron para que me llene el corazón como lo hacía tu amor.

Beberé hasta que tu olvido se convierta en recuerdo.

Vaciaré la botella deseando que tus labios sean lo siguiente en emborracharme.

Pediré otra ronda más obviando que no volverás.

Beberé y beberé deseando tenerte otra vez.

Perderé la conciencia, pero ni con esas te irás de mi cabeza.

Amaneceré con ganas de volverte a ver.

Te buscaré como cada amanecer, al otro lado de la cama observando mi cara.

Encontraré tu vacío entre mi corazón perdido.

Me levantaré deseando lo mismo que ayer entre trago y llanto: Tenerte otra vez.

Romperé mi llanto en tabaco que me acortará este naufragio.

Te escribiré bajo el somnífero que es para mí el recuerdo de tus ‘te quiero’.

Me hundiré otra vez deseando que vengas a salvarme.

Y, es que, tus recuerdos pesan. Me empujan hacia abajo en este pozo sin fondo. Debería deshacerme de ellos, pero no puedo, pues es lo único que me queda de ti.