Es viernes en la noche, y bajo la luz de la lampara de la sala, Nicole hace la tarea para el lunes, recordando la fiesta de la otra noche en la que limpió la pista de baile, pero la ensoñación no le dura mucho, porque debe concentrarse si quiere seg...
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Teeth: Part One
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—No te muevas —frustrada, Nicole acomodó los pies de Finn para que estuviesen rectos. El muchacho no podía mantenerse un segundo sin inquietarse y comenzar a hacer este extraño baile en el que se movía de un lado a otro.
Finn bufó y adoptó una posición firme, pero en cuanto la castaña conectó sus ojos con los del muchacho, se dejó caer hacia adelante, exhausto.
A pesar de tener una hora entera en clases para prepararse, a Nicole no le bastaba, necesitaba planificar todo en persona o las cosas no resultaría como ella quería, así que ahí estaban, esparcidos en la sala de la casa de la castaña, cada uno con un libro en mano. La señorita hacía una pose, la que se suponía que Finn debía adoptar al momento de dirigirse a la clase, y él trataba de imitarla, pero le salía mal, pues una vez que la chica se movía para observarlo leer y después de un par de líneas, comenzaba a moverse nerviosamente de un lado a otro, a juguetear con los bordes de las hojas y carraspear constantemente.
Nancy Vaux organizaba las diapositivas en su computadora mientras Ed le dictaba conceptos y citaba autores. Aquella era la parte más difícil, cuando ya tenías todo en un bosquejo y comenzabas a ponerlo en practica.
Si las cosas no estaban perfectas, Nicole no las quería, podían lanzarlas por la ventana, eran basura.
Aunque no lo dijera en voz alta, lo que más le preocupaba a la señorita era el maldito debate. No lo habían discutido, pero era más que obvio que Finn y Nicole tendrían que debatir. Ya todos sabían la maniobra que había usado con la señora Brown y que esta quería venganza, ¿qué mejor que hacer algo para perjudicar su nota?
Pero a Nicole le caía bien Finn, no quería que le fuera mal.
Apenas había pasado una hora desde que habían llegado y en ese intervalo de tiempo su madrastra había bajado si quiera tres veces a "recargar" su taza de café. Su padre no estaba, pues tenía trabajo, pero Lola trabajaba en un almacén de ropa, por lo tanto, tenía algunos días libres, como lo era ese. Nicole no le había dicho nada a nadie, pero había escuchado a su padre pedirle a su esposa que los vigilara bien. Le había enojado eso, pero se había mordido la lengua y continuado con su tarea de biología.
