Contigo siempre

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Aome fue la primera en despertar, perezosamente, se levantó y se fue al rio a bañar, seguía algo somnolienta por lo cuál, no prestaba mucha atención a su alrededor, se despojó de sus ropas y se sumergió en las frías Aguas, gracias a estas su energia volvió en si, rápidamente salió del río vistiendose tan veloz como su cuerpo se lo permitía para entrar en calor en sus prendas, una vez vestida fue al campamento y comenzo a preparar el desayuno a todos, observo a cada uno de los integrantes, sus amigos dormian junto a kirara,los niños y jaken en su futon, inuyasha atadado a un árbol y sesshomaru, ni señales de él, se sintió un poco fuera de si cuando no lo vio, agito su cabezo y se enfocó en su tarea pendiente, para cuando Había terminado todos sus amigos y niños despertaban, hambrientos y felices de que su gran amiga/madre les haya preparado de comer a excepción de inuyasha que despertaba aturdido y molesto, pronto esa paz se fue para ser llenado por sus gritos.

-. Inuyasha, calmate, lo hicimos por tu bien .-suplico aome, realmente no se sentía tan fuerte ese dia para discutir con él

-. Como quieres que me calme moza!! Si me dejaron inconsciente y me ataron!!! Peor, esta el maldito de sesshomaru aqui, como los protegere estando atado!?!

-. Mi joven amigo Hanyou, porque no te relajas y dejas a todos desayunar en un acogedor ambiente .- habló miroku de una forma demasiada amable que basto para asustar a inuyasha, en silencio aome agradecido al monje antes de soltar al hanyou y para sorpreda de los pequeños, este la empuja y arrebataba su porción de alimento, los mayores negaron y se miraron dudoso de decir o hacer algo, en cambió la sonrisa de Aome les dijo que no importaba y suspiraron decepcionados por lo mismo de siempre.

Shippo quién básicamente pasaba siempre apegado a ella, se acerco a su madre, con tristeza jalo su falda y ofreció su porción de desayuno a la mujer que lo ha estado criando, acción que conmovió a aome, quien lo abrazo y mimo, pronto Rin se unió a ellos por petición de la azabache en un calido y maternal abrazo que la hizo sentir ese anhelado cariño que deseaba desde que fue huérfana.

-. No comeras eso? Perfecto más para mi!

-. Inuyasha!! Osuwari!!! Es el desayuno de shippo!!!

-. Feh, te lo esta dando, eso significa que no quiere!! .- mascullo desde el suelo.

-. No te comerás su porción inuyasha, osuwari, perro tonto, osuwari, maldito glotón! Osuwari!!!

Para cuando descargó todo su enojo en el pobre hanyou, este se hayaba metros en la tierra formando un cráter perfecto con su forma, los presentes rieron y hablaron mas animadamente, Aome mintió y convenció a shippo que no necesitaba su porcion, que ella ya habia comido antes, que estaría bien, con una sonrisa lo calmó y lo alentó a seguir comiendo junto a Rin, desde las profundidades del bosque emergió sesshomaru, siendo recibido por un abrazó parte de Rin y un formal saludo por parte del grupo a excepción de inuyasha que estaba en la tierra, un rápido visto a su manada asegurandose de que todo estaba, se percató que Aome estaba arrodilla hablando con sango, pero lo que le molestó fue verla sin su porción, no tuvo que preguntar para saber que ocurrio su agudo oído lo escucho todo, pero tampoco iba a regañar a la humana frente a todos, era humillarla y degradarla.

-. Miko, acompañame

-. Eh? C-claro...

Confundida, Aome se disculpó y corrió tras sesshomaru quién se interno en el bosque, estaba curiosa y nerviosa porqué el la traía lejos de sus compañeros, su inseguridad la traiciono con tantas posibilidades negativas que su ánimo camino abruptamente, cosa que no paso desapercibida por él.

El sutil golpe en su pecho la saco de ese mar oscuro, alzando la vista, vio a Sesshomaru recostado en un árbol, este no hizo o dijo nada, solo palmo a su lado invitandola a sentarse con él, ni corta o perezosa lo obedeció, se sento a su lado en silencio, estaba nerviosa, porque estaban a solas y que su estómago la traicionaria pronto, no deseaba pasar vergüenza frente a él, pero para su alivió, sesshomaru depósito trws manzanas sobre su regazo.

-. Desayuna .-ordenó

-.pero...

-.se lo que ocurrió y lo que tratas de hacer, solo come y ya

-. Sesshomaru... Gracias! .-le sonrió al peliplata

Aome estaba agradecida con los cielos pero más con su acompañe que le dio de comer, en silencio y feliz, como una niña pequeña, disfruto cada manzana hasta terminarlas, estaba satisfecha y con muchas energías, incluso desprendia felicidad, todos estos cambios fueron observados en silencio por Sesshomaru, él era el alfa ahora, como tal, debía de proveer comida a su manada, cada individuo cumplía un papel esencial en su grupo, sobre todo Aome, su mujer.

Tanto la taiji como el monje, eran buenos guerreros, tambien proveian al grupo, ya sea con comida o leña.

Jaken cuidaba a los niños, alegría del grupo.

Inuyasha, era el inútil con un falso cargo para no deprimirlo.

Aome, era mas bien como una sanadora, pese a que no era excelente en combate, se esforzaba en serlo, era un orgullo para él que lo fuera, pero lo que mas le destacaba era sus habilidades para sanar a los heridos, era indispensable que ella sea protegida a toda costa.

Y él, es el jefe.

-. Aome...

-.si,sesshomaru?

No sabía porque pero su mirada la puso nerviosa nuevamente, se sonrojo sin que el dijiera algo, su corazón se aceleró y él lo noto, sonrió alterando a la pobre miko que estaba al borde de un colapsó, su mano se acerco a uno de sus mechones y lo acomodó tras su oreja, ninguno despegaba la mirada del otro, era un momento intimo, no en el sentido sexual, si no en el sano, ellos dos solos disfruntando de la cercanía del otro sin nada por medio, solo paz y amor.

-. Este Sesshomaru, te promete a ti que siempre estará a tus servicios, te cuidara y satisfacera tus necesidades, escuchara todo lo que tengas que decir, cambiará de opiniones contigo y dejará que se le acerques de forma más íntima, incluso podras insultarle pero te garantizó que nunca te haré daño, al contrario, te cuidare de esté.

-. Es... Acaso una confesión?

-. Lo es, quiero que estes siempre conmigo Aome

-. Pero soy humana... A...a parte no se que intentas decir específicamente, p... Puedo mal interpretarlo, sabes!!!

Él solo sonrió al verla tan nerviosa, vulnerable y deliciosa, yako estaba feliz o más deseoso de poseer a su mujer, no esperaba el momento indicado para ello, pero debía ser paciente un paso en falso y todo se destruiría, por otro lado, sesshomaru, la tomo del mentón, acarició sus labios con su pulgar y la beso tiernamente.

-. Interpretalo de esta forma A-O-ME.

Tres vidas para enamorarseDonde viven las historias. Descúbrelo ahora