Capítulo 1

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EL AMOR TODO LO PUEDE ♡

Primer día de universidad

Narra Ethan

La música fuerte retumba por todo el departamento, tomo una almohada y me tapo las orejas para saber si así, puedo seguir durmiendo, pero no lo consigo. Voy a matar a Ashton, corrección, Ashton es hombre muerto. Ayer hicimos una gran fiesta vip en el departamento para despedir el verano y siento una terrible resaca que no puedo con ella.

Ashton se mudó junto conmigo al departamento y juntos somos un gran desastre, la vecina de enfrente nos odia, pero yo la amo. Sí, así como lo piensan, mi vecina es mi bonita hermana, quien ahora vive con su novio, Adam Williams; el chico que tan mal me caía y ahora resulta que se ha convertido en mi segundo mejor amigo, claro, después de Ashton, el que por supuesto, no debe enterarse cómo es que tengo catalogado a Adam.

Me levanto de la cama y camino hacia la cocina, necesito beber algo para esta terrible sed y después tomar una pastilla para esta resaca, porque de no ser así, no podré soportar el primer día de universidad.

Salgo de la habitación y lo primero que veo es a Ashton haciendo pesas en medio de la sala de estar, según él, quiere estar en forma para así seguir conquistando chicas.

«Como si yo necesitara eso».

—¿Qué demonios te pasa? —le apago su música—. Me vas a reventar los tímpanos y seguro Alisson no ha de tardar en venir a reclamar que la hemos despertado.

—Lo lamento, hermano, pero debes agarrar energía, de lo contrario, llegarás peor que un zombie a la universidad. Y te recuerdo que hay que conquistar nuevas chicas, incluso ver qué tal están las de nuevo ingreso —sube sus cejas de arriba hacia abajo.

Hago una mueca de disgusto y me empino la jarra de agua helada que saqué del refrigerador.

—¡Yo paso! —le respondo—. Seguro que serán puras niñitas hijas de papi. Yo prefiero esperar a ver si hay chicas de intercambio —esta vez soy yo quien sube y baja sus cejas.

El sonido del timbre interrumpe nuestra plática.

—Abre tú —le digo a Ashton—. Explícale a la vecina histérica que la fuerte música es debido a tu ejercitación, para estar en forma y así conquistar a más nenas.

—Estaré loco, abre tú —se sienta en el sofá—. Es tu hermana, tú sabes lidiar mejor con ella.

Alisson puede ser muy tranquila, pero cuando se enoja, parece un león enjaulado. Y como veo que Ashton no va a levantar su culo del sofá, me resigno y decido abrir la puerta yo, porque ignorar a Alisson, resulta ser peor.

—Hola, hermanita  —la saludo—. Que linda te...

—¡Ustedes dos no dejan dormir! —grita—. No nos dejaron dormir anoche y ahora hasta ponen música a todo volumen en las mañanas y... —la cuestiono antes de que siga con sus reclamos.

—¿Por qué estás tan despeinada? —intento acomodar algunos mechones de su cabello, sin embargo, me gano un manotazo de su parte.

—Ah, ah —dice nerviosa—. ¿Eso qué más da? —dice mientras cepilla su cabello con sus dedos—. No quiero la música tan fuerte, ¿me oyeron? Y agradezcan de que soy yo la que les reclama y los demás vecinos no los reportan con la administración del edificio —dice eso y después se va.

Ashton suelta una carcajada.

—Creo que a tu hermana ya le dieron el mañanero —comenta mi amigo.

—Seguro que no se lo dieron bien, porque anda de un genio —bufo y cierro la puerta—. Tendré que darle unos consejos a mi gran cuñadito, para que mantenga feliz a mi hermana.

El amor todo lo puede ©Donde viven las historias. Descúbrelo ahora