El amor todo lo puede ©

Capítulo 29

EL AMOR TODO LO PUEDE ♡

"Noticias que destrozan el alma"

Narra Ethan

¡GANAMOS! Hemos ganado el torneo entre universidades, esta vez fue más competitivo que el año pasado, pero lo logramos. Estas últimas semanas han sido algo complicadas porque entre exámenes y entrenamiento, me ha absorbido mucho el tiempo, pero hoy puedo decir que todo valió la pena, porque le ganamos a la universidad contraria.

—Hoy saldremos a festejar a un antro, ¿qué dices, vienes? —Ashton me pregunta.

—¿Quiénes irán? ―cuestiono con desdén.

—Pues todos los del equipo —dice con voz de obviedad.

—Quizás los alcanzo en la noche, no tengo ánimos de salir.

—Vamos, Ethan, últimamente solo estás metido en tu habitación, ya hasta me da miedo que te vayas a cocinar tú mismo ―rueda los ojos.

—Prometo que haré el mayor esfuerzo por ir ―miento.

—Eso espero, yo ahora me iré a casa de mi madre y de ahí me voy al antro, te mando WhatsApp con la ubicación por si te animas a ir.

—De acuerdo, me la envías ―me despido de Ashton, pues él se va por un camino y yo por el otro.

Estos últimos días, me he sentido con una tristeza profunda, es como si pronto voy a recibir malas noticias, en las noches no puedo dormir porque algo en mí me oprime, es una necesidad de querer saber qué es lo que está pasando.

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Son las 8:00 PM, Ashton me ha enviado la ubicación del antro, estaba entre ir o no ir, pero él tiene razón, cada vez estoy más encerrado en mi mundo y debo distraerme un poco, tomo las llaves de la moto y el casco, y voy hacia la puerta, la abro y al abrirla en mi campo de visión aparece ella.

Sam, mi pequeña y hermosa duendecilla.

—¿Sam? ―la miro confundido―. ¿Qué estás haciendo aquí? —ella lleva una caja de cartón en sus manos y su rostro está completamente hinchado, sus ojos están rojos y ella me mira con sentimiento.

—Pero, ¿qué?

—Toma —ella estira la caja de cartón hacia mí.

—¿Qué es? —tomo la caja.

—¿Puedo pasar? Te lo explicaré todo ―su voz suena tan apagada, que me comienzo a preocupar.

—Claro, pasa —me hago a un lado para que ella pueda entrar.

—¿Pasa algo Sam? —pregunto en cuanto cierro la puerta del departamento.

—¿Estás solo? ―voltea hacia todos lados.

—Sí, lo estoy, ¿pero por qué tanto misterio?

En este momento por mi cabeza rondan muchas preguntas, su actitud de ella, la caja de cartón, todos mis presentimientos de esta semana, mi corazón se acelera y tal vez es porque está preparado para escuchar algo que no quiere.

—Ethan, en esa caja están todas las cartas que me has enviado, incluyendo a Samethan, te lo entrego a ti, porque yo no soy capaz de deshacerme de ella, tú sabrás lo que quieras hacer, quedarte con ella o bien, quemarla ―juega con sus dedos y sé que está nerviosa.

—¿Por qué me traes estas cosas Sam? No estoy entendiendo nada —dejo la caja en el sofá y me acerco a ella para tomarla de sus mejillas.

—Por favor no hagas esto más difícil, Ethan, por favor —ella me dice con voz de súplica y lágrimas empiezan a rodar por sus mejillas.