El amor todo lo puede ©

Capítulo 13

EL AMOR TODO LO PUEDE ♡

"Miedos"

Narra Ethan

Llego al edificio de apartamentos y presiono el ascensor, entro en él y detrás de mí entra una pareja, ellos están muy cariñosos, yo los observo y tal vez así podría estar con ella, si no fuera un maldito cobarde que tiene miedo volver a salir lastimado, el ascensor se detiene en mi número de piso y salgo de él.

—¡Ethan! —Alisson exclama feliz, ella está a un lado de Adam, se miran muy felices.

—Ahora no, Ali —le digo tranquilo.

—Pero, ¿qué rayos, Ethan? Solo quería invitarte a ver si...

—¡He dicho que no! —esta vez grito y entro en mi departamento.

Al entrar a mi departamento, miro que Ashton está en el sofá con una chica, paso de largo ignorando por completo su presencia y camino directo a mi habitación, me encierro en ella a tratar de olvidarme del mundo exterior y nuevamente sucede, nuevamente vuelvo a sentir el sentimiento del dolor. Me deslizo por la puerta de la habitación hasta quedar completamente tirado con la espalda recargada en ella, me hago bolita y hundo mi cabeza sobre mis rodillas y nuevamente, después de mucho tiempo, me rompo en llantos, pero esta vez no lloro, porque una chica me haya roto el corazón, esta lo hago por ser un puto cobarde que teme sentir lo que siento.

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—¡Ethan! —levanto mi cabeza al escuchar los sonidos del toque de la puerta, no sé en qué momento me quedé dormido tirado en el suelo.

—Quiero estar solo —respondo para que se vayan y dejen de joderme.

—Ethan, ¿estás bien?

Quiero responder que no, quiero decirle que me encuentro de la mierda, pero lo único que me queda hacer es ignorar por completo a Ashton. Me levanto del piso y enseguida pongo música a todo volumen, música de acuerdo a mi estado de ánimo. Me tiro sobre la cama, es la única manera que me dejen en paz y deje de escuchar que me llaman; a veces las personas más allegadas a ti no entienden que muchas veces no quieres hablar, muchas veces quieres estar solo y pensar. Pasa una, dos, tres, cuatro y más y más canciones, podría estarse acabando el mundo allá afuera y yo no sabría nada, porque estoy hundiéndome en mi propio mundo de mierda.

De pronto la puerta de mi habitación se abre, todo está oscuro, pero claramente miro la silueta de una mujer y se perfectamente quien es.

Es Alisson, mi hermana.

—¡Demonios, Ethan, te vas a quedar sin tímpanos! —ella exclama mientras me apaga el equipo de sonido y enciende la luz.

—Quiero estar solo Alisson, por favor vete ―le señalo la puerta.

—Nene, ¿estuviste llorando? ―me pregunta en un susurro.

Sonrió levemente, porque ella tenía tanto tiempo sin llamarme así "Nene", había olvidado cuándo fue la última vez.

—Demonios, Ethan, háblame ―pide preocupada―. ¿Qué sucede contigo?

Me siento sobre la cama y agacho la cabeza, ella se sienta a un lado mío y nuevamente me rompo en llantos, ella no vuelve a preguntar más, ella solo se dedica a abrazarme y agradezco que no pregunte nada más porque no sé si es el momento de hablar de mí.

—Tenía tanto tiempo que no te miraba así, desde aquella última vez, esa vez en la que nunca quisiste decirme qué pasó para que te pusieras así —ella murmura en mi oído, pero sigue abrazándome y yo sigo llorando en su hombro.