El Sinvergüenza

Cap 4

- Aaah, aaah ¡To-Tony- aah!- Embestía con fuerza el interior de Pepper, ella clavaba sus uñas en la espalda de él.

- Ah, cariño - Paró un poco sus embestidas para besarla, ella le sonrió.

- Tony... ¿no crees que deberíamos tener bebés?

- ¿Qué? ¿por qué?

- Pues desde siempre he querido ser la madre de tus hijos y me gustaría tener un bebé nuestro. Creo que nos haría mas unidos- Acariciaba su espalda cariñosamente, sonriendo con ilusión a lo que Tony se detuvo y se alejó - ¿Qué pasa?

- Pepper, tú me conoces ¿crees que sería un buen padre? Un hijo sería mucho para mí. Vivo haciendo problemas, no sería un buen ejemplo- Se sentó en la cama, de espaldas a ella.

- Pero yo sé que tu y yo juntos podríamos- Él la cortó.

- De todos modos, si tantas ganas tienes de ser madre te he dicho bastante que te alejes de mí y consigas a un prospecto.

Pepper se acercó a él sosteniendo la sabana para tapar su cuerpo- Es que no es eso, Tony tú sabes que te amo y que sólo te quiero a ti a mi lado. ¿No te daría gusto un niño igual a ti?

Tony rió sin gracia- Si fuera igual a mí estaría acabado. Pepper- Se volvió hacia ella- Piensa en lo que tienes conmigo. Exacto, nada. Tú sabes que no me quedo con nadie y cuando viniste detrás de mí fue tú decisión, yo no te lo pedí y sinceramente te agradezco todo lo qué haces por mí- Acarició su rostro- Te veo más como una amiga, por favor ve con alguien más y cumple ese bonito sueño de ser madre- Besó sus labios para vestirse y dejar a una desconsolada Pepper en la cama de su habitación llorando.

Justo cuando abría la puerta de su casa, Víctor parecía a punto de tocar- Vaya, Anthony. Venía a verte.

- ¿Así?- Se recostó en el umbral- ¿Después de haberte negado ayudarme a pagar a Zemo?

Víctor le palmeó el hombro - Eh, hombre. Es que ayer estaba pasando una mala racha pero si te lo voy a prestar- A Tony le brillaron los ojos.

-¿Enserio? ¡Gracias, primo! - Se lanzó a abrazarlo- Yo sabía que no ibas a dejarme morir.

- Pero antes tienes que hacer algo por mí - A Tony se le fue desapareciendo la sonrisa - ¿Puedo pasar?

- No, mejor vamos a otro lado.

Fueron a una cantina de por ahí, y cuando Von Doom le contó todo el plan esta fue la respuesta de Tony:

- No.

- ¿Pero por qué no?

- Eso que me estás pidiendo es ridículo, además voy a ir a engañar unas pobres criaturas que no tienen la culpa de tus idioteces- Víctor lo miró con enojo- Lo siento. Pero como amigos que somos, tengo que decirte la verdad en tu cara.

Víctor le sonrió, poniéndose de pie se acomodó el traje y dejó un billete de cien dólares pagando lo que habían consumido- Pues bien, tu tranquilo her-ma-no. Yo mismo me encargaré de que tengas el funeral mas caro que se pueda pagar. Con permiso - Tony lo tomó del brazo.

- Está bien. Está bien, tus chantajes funcionan a la perfección conmigo. ¿A qué hora tengo que ir?- Víctor volvió a sentarse- Bastardo.