Cap 35

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— Jarvis, ¿me das más jugo, por favor?— Pidió Andrew, el mayordomo asintió y fue a buscarle mas jugo de naranjas a la cocina— ¿Qué lees?— Preguntó a su hermano gemelo que se estaba riendo, leyendo las tiras cómicas del periódico.

— Escucha esto, Andrew; Toc, Toc...

— ¿Quién es?— Complementó.

— La vaca que interrumpe.

— ¿La vaca que interru-

— ¡MUUUUUUUU!— Después de ello, Tobey soltó la carcajada mientras su hermano lo miraba sin una pizca de gracia.

— Es bobo. Dame eso, yo buscaré un chiste mejor— Le arrebató el periódico, buscando entre las páginas algún chiste (que en realidad  no había, sólo noticias) hasta que vio algo realmente interesante — ¡Tobey, mira esto!— Su hermano rápidamente llegó a su lado, al verlo, hizo uno de esos gestos de sorpresa exagerados que suelen hacer los niños, abrió mucho la boca.

— Vaya...

Ambos se miraron, y parecía que pensaban lo mismo, miraron a los lados buscando que no hubiera nadie mas— Vamos a la habitación, si estás pensando lo mismo.

— ¡Corramos!

...

— Niños, ya es hora de ir a la escuela — Steve entró a la habitación, buscando a sus pequeños pero no los encontró — ¿Niños?

Jarvis que pasaba con la ropa limpia por el corredor, casi se estrella con Steve que parecía muy agitado — Jar, ¿y los niños?

— ¿no están con usted? La última vez que los vi, estaban desayunando y luego subieron aquí.

— ¡No están! Ayúdame a buscarlos, por favor.

— ¿qué pasó con mis hermanos?— Llegó un recién levantado Johnny.

— No los encuentro— Dijo Steve antes de bajar las escaleras para ir a buscarlos por cualquier parte.

...

Habían pasado cuatro horas desde que los niños desparecieron, Steve estaba con el corazón en la boca, al igual que sus hijos mayores y Jarvis. Víctor estaba sentado en el sofá, fumando tranquilamente.

Johnny fue y se paró frente a él, estaba harto y se lo diría de una vez— ¿no será que tu les hiciste algo?

Víctor lo miró con cansancio — No, no les hice nada. No tengo razones. Ahora ve por ahí a preocuparte no frente a mí.

— ¿¡Por qué no te largas de una vez!? ¡Entiende, que no te queremos aquí! Y estoy seguro, de que si posiblemente mis hermanos huyeron ¡FUE POR TI, DESGRACIADO!

Víctor tampoco se aguantó que lo fastidiaran, así que tranquilamente apagó el puro y se paró del sofá aún teniendo a Johnny de frente mirándolo con todo el posible enojo— Cállate de una maldita vez— Dijo con el tono mas sereno del mundo y después una fuerte bofetada que lo tumbó al suelo.

— ¿Qué haces?— Steve llegó con su hijo para ayudarlo, Jhonny lo apartó con brusquedad.

— ¡Es todo! ¡Me voy de aquí! Te llamaré para saber si mis hermanos aparecen — Johnny azotó la puerta antes de irse.

— ¿Pero a dónde va?—  preguntó al aire un preocupado Steve sostenido por Jarvis.

Alguien que tampoco aguantó mas fue María, también se le fue encima— ¿Por qué le pegaste? No tienes derecho, ¿me oyes? No-tienes-derecho.

— ¿Acaso quieres que te golpee también?

— ¡Hazlo! ¡Quiero que lo hagas para que veas de lo que soy capaz!— María lo empujaba furiosa, provocándolo. Víctor estaba a punto de alzar la mano, Steve lo detuvo.

— Basta, deja a MI hija. En este momento, lo que importa es encontrar a los niños y no sacar peleas.

— Tienes razón, perdona pops— Por primera vez en cuatro meses, María le habló y se acercó a él para que la envolviera
en sus brazos, consolándose entre los dos. Steve le besó la cabeza y la apretó mas contra sí.

— Tranquila, los tendremos dentro de poco con nosotros.

...

¿Qué pasó con los gemelos? ¿Víctor tuvo que ver?

El SinvergüenzaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora