8.

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Christopher.

La hora acordada de la cena había llegado y solo estábamos en la espera de aquella familia. Mi padre se levanta de su asiento al oír sonar el timbre de la casa que anuncia la llegada.

Con mi hermano oímos como se saludan y como mi padre se presenta ante sus hijos. No tardamos mucho en verlos caminar hacia la cocina.

— ¡Oh por Dios!- grita mi hermano y lo volteo a ver confundido. Lo siguiente que escucho es una risa y luego veo a mi hermano lanzarse a los brazos de la chica. Esa chica...es Tn. ¿Cómo es que...?

—Mercedes, ellos son mis hijos; Christopher y Liam.

— hola, un gusto volver a verte- nos saludamos con un beso en la mejilla-. De seguro no me recuerdan pero llegué a conocerlos cuando eran pequeños.

—un gusto, Sra. Brooke.

— oh, solo Mercedes por favor- responde y asiento con la cabeza.

—¿Cómo es que en todos estos meses que nos conocimos no venís a enterar ahora que nuestros padres se conocen y que trabajan juntos?

—-suelta una risa-. Que chico es el mundo, ¿No?- habla y volteo a mirarla. Cuando ella se percata y me saluda con un beso en la mejilla.

Me quedo embobado mirándola mientras ella habla con mi hermano sobre no sé qué cosa cuando un carraspeo me hace regresar.

—hola- estira su mano en forma de saludo-. Muy linda,  ¿No?

Mierda, ¿Que se supone que debes hacer cuando te quedas embobado mirando a una chica y su hermano te descubre? Espero que no se lo diga porque moriría de la vergüenza y...si mi hermano se entera que la estuve mirando me mata.

— h-hola. Soy Christopher- decido contestar sin mencionar lo demás. Veo como él se ve divertido ante la situación y eso me relaja un poco porque al menos aún no me agarrará a los golpes por mirar indebidamente a su hermana.

Inseguridad - Christopher VélezDonde viven las historias. Descúbrelo ahora