Última Respiración || Larry

CAP. 19. POR NADA

Observé al doctor Méndez sin quitarle la vista de encima, atento a todos sus movimientos y como se dirigía a mi hermana con una calma que obviamente no correspondía a sus actos nerviosos por mi mirada. 

—Estoy contento, señorita Tomlinson, hemos conseguido detener su manchado y está siguiendo todos mis consejos tal como lo ordené. Es usted una buena paciente. 

—Gracias doctor. ¿Todo está bien de momento? 

—Sí, si todo sigue así irá bien.

Ella se giró hacia mí sonriendo, cosa que no pude evitar corresponder mientras me acercaba a los pies de la cama. 

—¿Tiene que seguir en reposo?— Pregunté cruzando los brazos en mi pecho. 

—Sí. Tiene que seguir con todo lo que le dije, no podemos arriesgarnos a volver a caer cuando ahora estamos de pie. 

—Entiendo, muchas gracias doctor Méndez— Dijo mi hermana con una sonrisa, colocando del todo su pijama y despidiéndose del doctor que no tardó en abandonar la habitación. 

Me coloqué a su lado y la ayudé escuchando como su felicidad rebosaba por encima de las palabras, sacándome una sonrisa que ella imitó. 

—¡Estoy tan feliz, Louis! Cómo consiga sacar todo esto adelante me voy a sentir la mujer más feliz del mundo. 

—Lo haremos pequeña, ya verás que todo sale bien. 

Agarré las mantas y las puse sobre su cuerpo, ella sonriendo aún y mi mano acariciando por última vez su barriga algo abultada. 

La puerta principal sonó y la rubia cabellera de Niall se paseó por nuestra vista hasta que sus ojos se posaron en los dos. 

—Hola, ¿Puedo pasar? 

—Niall— Contestó mi hermana con felicidad, incorporándose un poco sobre la cama— Por supuesto que puedes, adelante. 

Niall pasó al interior con algo de vergüenza, mirando a mi hermana por algunos segundos en los que solamente estaban los dos. Los dos y mi incomodidad. 

—Niall— Dije llamando su atención— ¿Todo bien? 

Sus mejillas se tiñeron de un rojo ligero y mi hermana y yo sonreímos tontamente, siendo conscientes del acto mientras que los movimientos del hombre delante nuestro se volvían más bruscos y nerviosos. 

—Oh, yo en realidad venía a hablar contigo, Tommi. Liam me ha buscado y dice que Harry ya está en su habitación. 

—Perfecto, ¿Quieres acompañarme o te quedas con Lottie? 

Los ojos de Niall se abrieron como jamás los había visto, yo intentando no soltar una carcajada mientras dejaba un beso en la cabeza de mi hermana, ella evitando reír también. 

—Por Dios, Louis, ¿Cómo te atreves? Que atrevimiento, ni pensarlo. 

—De verdad, no te preocupes por mí Ni, no hay problema en que te quedes con ella. 

—Me vendría bien algo de compañía, Niall, quédate. 

Niall tragó fuerte cuando yo pasé por su lado, siguiendo mis movimientos incluso cuando golpeé su hombro a modo de despedida, aún con una sonrisa en mi rostro. 

—Nos vemos mañana, no te duermas muy tarde Charlotte. Niall— Él me volvió a mirar con miedo, yo ahora sin evitar una carcajada que no le gustó— Asegúrate de que esté bien cuando te vayas. 

—Adiós Lou, mañana te veo, buenas noches. 

Me despedí de ellos saliendo de la habitación, riendo una vez que estuve fuera, los guardias mirándome con el ceño fruncido aunque me daba demasiado igual.