Un Bebé En Los Angeles (JaeDo)

Yo antes de ti

—¿Alguna vez te has enamorado Woo?

Haechan, Jungwoo, Mark y Doyoung salieron a dar un paseo con la intención de tomar algún helado o bebida fría para refrescarse y también despejar sus mentes después de tanto trabajar. Una semana y media había pasado desde que se instalaron en aquel país. Y aún no habían empezado con las fechas de los conciertos. El sábado sería el primero y ya habían hechos planes para salir a festejar después.
Su relación con Jaehyun era de normal a casi nula, solo se hablaban si era necesario y aparentaban ser buenos amigos frente al resto; aunque por dentro, deseaban matarse uno con el otro. El peli ceniza parecía apoyarse emocionalmente con Taeyong de la misma manera que lo hacía Doyoung con Jungwoo o Yuta. El resto de NCT declaró mantenerse al margen de la situación ocurrida unos dos días atrás cuando la bomba estalló mientras comían. Decidieron no presionar al pelinegro hasta que éste no esté lo suficientemente preparado para hablar. Aunque, a pesar de todo, confirmó las palabras del japonés y el hecho murió allí.

Las cosas parecían picantes entre Taeyong y Doyoung, quien al enterarse convenció a Jaehyun de una forma mística en dejarle la habitación individual al otro porque la necesitaba para descansar mejor y tener su tiempo para lidiar con aquello de una forma "mas privada" según el mayor de los tres. Hecho que molestó a Doyoung, por supuesto. Taeyong había decidido todo sin consuntarle o plantearle la idea, pero lo que más dolió fue el aceptar inmediato del peli ceniza quien últimamente corría hacia los brazos del otro sin rechistar.

"Olvida aquello Doyoung, olvídalo"

 Pero con respecto a Jungwoo y Jaehyun no se volvieron a mirar después de aquel encontronazo, y esto parecía ser el detonante de aquella incomodidad que se hacía presente cuando se juntaban los cuatro, los cinco o todo el grupo. Lo que sí estaba yendo normal, era la relación entre el japonés y el portador de unas lindas mejillas; Doyoung no sabía si era hipocresía por parte del segundo o simplemente estaba tan enfatizado en su propio creer que no podía enojarse con el rubio. Aunque también, probable, esté planeando algo cruel... muy cruel.

—Creo que una sola vez, tampoco pienso mucho en eso.

—¿En qué? —preguntó Haechan.

—En el amor —respondió el pelirrojo— ¿y tú Hyuck? ¿Te has enamorado?

—No nunca — El menor hizo una mueca y soltó aquello sin importancia. Mark pegó una carcajada, Doyoung se sorprendió y Jungwoo entendió más allá de las palabras de Haechan; porque no sólo lo escuchó, sino, que leyó el mensaje tras líneas.

—Sí, sé lo que se siente...

Aquello se acabó después de que Jungwoo asintiera con pena. El tema real había surgido el día anterior, cuando se juntaron los 9 a ver una película después de comer.

No terminaron llorando, pero sí que les causó algo en el pecho. Quizás si de un principio le hubiesen hecho caso a la recomendación de Taeyong —una maldita película de terror— no tendrían ahora una extraña sensación de vacío o nostalgia.