Capítulo •6•

280 28 7
                                    


_¡Jonathan! ¡Dio! Cálmensen los dos ¡solo gritan y gritan, no comprendo nada, así que a menos que quieran irse a la cama sin cenar hablen de a uno y de manera precisa!
Jonathan y Dio se callaron algo intimidados y Jonathan comenzó a hablar antes que Dio a su padre
_¡Dio obligó a una chica a qué lo bese!
_¡¿Que?! ¡Puras mentira! ¡No es cierto! ¡Ella me lo pidió!
_¡¿Asi?! Y porque lloraba y la abofeteaste?!
_No la abofetie! Mentiras! Solo la bese
_¡¿Y porque lloraba?!
_¡Pues se sintió como una puta al pedirme que la bese!
_¡¿Como que una puta?! ¡¿Quieres que te golpee?!
George los callo a los dos sin poder creer que sus hijos sean unos gritones, solo suspiro y grito
_¡Dio! ¡¿Eso es cierto?!
_¡S-si padre!
_¡¿Ella quería que la besaras?!
_¡N-no!
_¡¿Y porque lo hiciste?!
_¡Porque Jonathan y ella salían a escondidas sin respetarse!
_¡¿Y eso que tiene que ver?! ¡ Jonathan, ella es tu novia?!
_¡N-no! ¡solo somos amigos!
_¡¿La amas?!
_¡S-si! Creo...
_Entonces es tu novia. Dio, castigado sin cenar por abusar de ella, y tú Jonathan también castigado por no solidificar tú noviazgo ¡Ahora ambos a la cama y sin cenar! ¡Ahora mismo!
Tanto Dio como Jonathan estaban sorprendidos, su padre nunca había sido así antes, era más que extraño, pero se callaron y se miraron con una mirada de odio mutuo y subieron por las escaleras a sus cuartos donde se encerraron
_Ah... ¿Porque deben ser así? Mi hijo ya tiene novia y su hermano está celoso... Estas cosas simplemente no son normales...
George fue hasta su estudio junto a la chimenea donde vio las llamas y no sabía que hacer, desde la puerta tocaron y se abrió la puerta
_Le molesta que pase y lo acompañe?
Era Pucci viendo hacia George junto a la chimenea
_¡Oh! Pucci, claro, lo lamento, a veces olvidó que usted vive aquí también...
Pucci avanzo cerrando la puerta, por detrás de su silla y llegando a su lado
_¿Puedo sentarme?
_Claro, sin problemas, ahí mismo tiene una silla
Pucci asintio y se sentó, observo el fuego junto a George por un tiempo indefinido
_Escuche gritos de Jonathan, Dio y de usted, creo que hizo caso a mis consejos
_Si, una tontería de verdad, Jonathan tiene una novia, y Dio parece que la obligó a algo... Cuando me dijiste que los castigue para formar carácter... Supongo que esto les ayudará a pensar en sus acciones
_Debo decirlo Señor Joestar, usted debe de hacerlo, es un padre con dos hijos, uno viene de la humildad y el otro viene de un palacio, quizás puedas ayudarlos a ser iguales
_Cierto, jaja ¿Sabes Pucci? A veces pienso que Dio y Jonathan son iguales, pero no sé si de verdad podrán llevarse bien...
_¿Quien sabe? Lo inesperado siempre es... Inesperado ¿No?
_Jajajajajajaja
_Jajajajajajaja
_Pucci, siempre tuve una duda, se que eres... Negro, pero como llegaste a tener esa relación con Dio?
_Oh, claro, lo sé, muchas veces me ven raro por mi aspecto, pero le contaré... "cuando era más joven, tenía una enfermedad en el pie, era deforme, dolía demaciado... Un día un hombre maravilloso llegó, se acercó y me hablo de una manera que nunca nadie lo hizo... Hablamos y conversamos, no sabía quien era, pero al final me dió un regalo que me cambio, la fé de Dios en mi, y mi pie ya estaba curado, creo que ese hombre era un enviado de Cristo a ayudarme, pero fue ya hace tanto tiempo, y ahora soy un entregado a Dios y su palabra"...
_... Dios es un hombre fantástico, yo a veces recuerdo a mi mujer y ese fatidico día... Supongo que Dios me quito a mi mujer y me entrego a Dio en su lugar ¿Que misterio estará deparando?
_Si tan solo la biblia tuviera todas las respuestas... Pero hasta entonces, iré a hablar con Dio sobre su conducta, y como le hizo eso a la señorita Pendelton
_Claro, usted es más cercano a él, le escuchará bien, hasta entonces creo que lo mejor será que lo piensen...
_Ahora mismo hablaré con él, no se preocupe, de verdad, fue... Un gusto conversar con usted
_Lo mismo digo, lo mismo digo...
Pucci se levantó abandonando la sala y fue interrumpido por George, que desde su silla dijo
_E-espera un momento...
_Hm ¿S-si? ¿Señor Joestar?
Una mirada de dudas se plantaba en George que al final solo suspiro y se volvió a acomodar en su silla
_Solo... Solo cierre la puerta al salir, que tenga una buena noche
_Lo mismo digo Señor Joestar, descanse
Pucci cerró la puerta

Capítulo VI -Fin-

El hombre detrás del DiosDonde viven las historias. Descúbrelo ahora