Evil Angel |Harry Styles|

Capitulo 26: "Bestia"

Jessie.

- ¡No tenías que hacer eso, maldita sea!- Se escuchó la voz endemoniada de David por todo el camerino. Dónde solo nos encontrabamos unos cuantos del equipo.- ¿Qué pasa contigo? ¿Quieres llevarnos a la ruina?- Volvió a gritarle a Harry. Este ni siquiera lo miraba. Estaba sentado hacía el frente con ambos codos apoyados en sus rodillas y sus manos en el cabello mirando hacía abajo.

Yo estaba en la misma posición y miré de reojo a Harry. Mordí mi labio fuerte y respiré profundo. Esto era como de película. A Harry no le importaba su vida en lo más mínimo. Lo peor era, que tampoco le importaban los demás.

- Maldición, Styles.- Volvió a gritar David trás Harry y seguido golpeó su cabeza con su mano abierta. La cabeza de Harry salió de sus manos y se movió hacía el lado por el impacto.

Todas las personas que allí se encontraban, se encontraban calladas y analizando el momento muy cautelosamente como si supieran que meterse en esto les causaría problemas. Quería gritarle a David que parara de gritarle, que le hablara con calma y quizás así Harry podría explicar. De todas maneras, ¿por qué habían mentido al público diciendo que la madre de Harry vivía aún?

Mi corazón latía fuerte y mis ojos no se movían de la escena tío/sobrino. Me parece que estaba así de atenta porque realmente quería ayudar a Harry a salir de ese maldito "tío". Su rostro y su expresión apretada se veían hartas, cansadas, a punto de explotar y lo más importante; se veía totalmente atormentado. Y eso era lo que yo no quería, no quería que explotara. No quería que Harry Styles explotara, porque sería de lamentarse.

A David sin duda alguna eso no parecía importarle en lo más mínimo. Seguía trás Harry, sin descanzo alguno, gritandole y reclamandole lo que había hecho. De un momento a otro las personas que allí se encontraban salieron, salieron todos del camerino y pude divisar como una de las maquillistas al salir me hizo una mueca para que yo también lo hiciera. No lo haría. No puedo creer como se atreven a dejarlos así, de todas maneras yo no lo haría.

-Déjame en paz, David.- Habló el ruloso cautelosmanete por primera ves. No cambiaba de posición y sin duda alguna su tono de voz era en advertencia. Me acomodé en mi lugar y miré de frente a ambos hombres, sin pararme de mi asiento.

Se me apretaba el corazón de darme cuenta que la única persona que Harry tenía cerca como familia lo trataba así. David no tenía aprecio alguno por Harry y Harry tampoco por él. De todas maneras, estoy segura que Harry en su interior no es como aparenta ser, hay una explicación para todo y seguramente, entre ellos dos está.

-No me digas que te deje en paz cuando estás arruinando nuestras vidas, maldito mocoso.- Le gritó nuevamente colocandose frente a él. Esto era una mala desición, lo sabía bien.- Sabes, Harry- Sonrió malévolamente. Se puso en cuclillas frente a Harry y con toda la mala intensión del mundo golpeó ambas manos de manera que el rostro del chico quedo despejado. Me quedé estática. Realmente David estaba provocando a Harry y no sé que intensión tendría alguien en provocar de esta manera a otra. La típica sonrisa de Harry regresó a su lugar; respirando hondo, volteando sus ojos y mordiendo sus labios en señal de control miró a su tío.

-No. No sé, David. Pero tengo muchas ganas de que me digas. Muero por saber.- Y el tono sarcástico se le salía por los poros. Ambos se miraron a los ojos y el odio que salía de ambos era incríble. Me paré, sabía que debía hacerlo.

-Tu madre, estaría muy desilucionada del inútil que tiene por hijo.- Espetó David sonriendo triunfante y sin cambiar de posición. El rostro de Harry cambió totalmente a uno duro y sin expresión. Miré sus manos y me dolió a mi, estaban totalmente blancas. La presión que el ojiverde aplicaba en ellas impedía el paso de la sangre a estas. Pero Harry no se movía, no movía un centímentro.