Capitulo 14: " En el infierno también hay angeles"

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Jessie.

Era como si cada grito, mirada, susurro o lágrima estuviera muy lejos de ser real. Se sentía como si cada persona que me miraba mientras los paramédicos me subían a la camilla eran actores que solo querían burlarse de mi. Era como si a nadie realmente le importara, todos mentían y todos actuaban. Asi, queridos amigos se siente la desconfianza en carne propia.

No sé en que momento ingresé al hospital pues me casi desmaye en el mismo momento en el que me ingresaron a la ambulancia. Escuchaba a lo lejos sirenas, voces muy distorcionadas y mis ojos veían rostros muy borrosos entre asustados, nerviosos y con sonrisas por tener allí a la famosa cantante. Pero, había un rostro que no estaba allí pero que llenaba toda mi cabeza y apesar de que no estaba conciente lo veía. Él estaba allí con su sínica y fría sonrisa, mirándome fijamente. Podía ver como iba esbozando poco a poco una sonrisa de lado y dejaba ver sus dientes tan perfecto. Me daba mucho miedo, sentía todo el daño que me podía hacer. Entre gritos, disturbios e imagenes borrosas debido a la perdida de sangre caí desmayada totalmente. Hasta en mis más distorcionados sueños Harry tiene el poder de controlarme.

-Señorita, que bueno que despertó.- Una enfermera bastante joven tomandome el pulso habló. Sonreí sin ganas y miré a mi alrededor. Me encontraba totalmente sola. En un escenario tienes millones de ojos mirándote, pero cuando realmente necesitas a alguien te encuentras totalmente sola y es así, esta es la realidad de la mayoría de los artistas.

-Señorita enfermera, ¿no ha venido por aquí algún chico...?- No sé por que pregunte, pero la pregunta salió de mi boca sin poder detenerla. Tenía en lo más profundo de mi corazón la esperanza de que él se hubiera preocupado por mi, pero eso núnca pasaría. Ni en mis mas salvajes sueños.

-¿Un chico?

-Si. Si.- Volví a decir casi desesperada. Llegaba al punto de ser patética.- Un chico alto, con bastantes tatuajes y su cabello... su cabello ruloso, peinado para atrás.- Acababa de describir al demonio y para rematar me parecía totalmente perfecto.

-No, señorita. Lo siento.- La enfermera me contestó y pude ver con la lástima que me miraba. Lo sabia, era patética.- Pero si alguien viene yo le aviso.- Intentó subirme el ánimo con una tímida sonrisa y yo le respondí con otra cansada, era inútil.

-Gracias.- Y me heché la cobija a la cabeza.

¿Acaso tengo que esperar que me mate para darme cuenta de que el jamás sera buena persona? Él era el diablo en persona y yo lo sabía, pero no me alejaba y cada ves que lo intentaba él me volvía a arrastrar.

La puerta se abrió suavemente y la habitación pasó de ser blanca resplandeciente a un tono ópaco y tenebroso cuando Harry apareció allí. Tomé la cobija en mis manos y con dificultad me senté en la cama. Podía sentir mi mandíbula apretada y mi cabeza latir lenta pero constante. Nos mirabamos fijamente y él no se movía de la puerta. La tensión se podía tocar con tus propias manos y había un silencio funebre. Todo su ser causaba temor en cualquier persona. Él estaba allí y todos mis sentidos automáticamente se apagaban y yo quería ser fuerte pero era como si su persona tuviera un magnetismo que apagase todas mis fuerzas. Ere totalmente vulnerable a él. Él era lo que se dice, mi debilidad pero no dela buena. De la mala, de la que te arrastra al dolor y la desgracia.

-Veo que estas mejor.- Hablo satán y no se movió de su sitio.

-Si...- Casi susurre el monosílabo y no sè si me escuchó. Dió un paso hacia al frente y por instinto me heche hacía atrás en la cama. Él sonrió cínico como siempre.

-¿Por qué te alejas, hermosa? ¿Tienes miedo?- No pude contestar porque en el momento en que me di cuenta el estaba a mi lado, mirándome fijamente con sus manos firmemente en mis hombros.

-Suéltame, Styles.

-¿Todavía te doy miedo? Acaso... ¿No te he hecho ya suficiente daño? Deberías de estar acostumbrada a mi.- Sentí toda la mala vibra del mundo, era un mal nacido. Una electricidad que casi quema todo mi ser, sus ojos traspasaban mi alma y mi ser y yo podía sentirlo. Incluso tengo la certeza de que él también podía sentirlo. Apretaba su agarre y cada ves acercaba su rostro más a mi.

-Estoy acostumbrada a tener el diablo cerca.- Dije firmemente pero temblando bajo su agarre.

-Entonces, déjame llevarte al infierno conmigo.- Y mordió tan fuerte mi cuello, que posiblemente haya perforado la piel hasta probar mi ya dañada sangre.

//-No quiero hacer eso David.- Repetía luchando contra el agarre de su hermano, David la pequeña madre del pequeño niño de rulos.

-A ver, entiéndeme hermanita...-El hombre se acerco a su hermana y colocó frente con frente. Estaban sudando ambos y él temblaba como un mismo maniáco.- Si haces esto, sáldremos de pobres.- Intento convencer a su hermana y esta volvió a negarse.- ¡¿No lo entiendes, verdad?! Si lo haces, podrías darle una mejor vida al pequeño Harry.- Gritó moviendo las manos en el aire frenèticamente, David.- Saldríamos de deudas.- Volvió a hablar y sus ojos brillában como si el símbolo de dinero causara ese efecto en ellos.

-Es tan peligroso que probablemente sea más lo que perdamos que lo que ganemos.- Dijo la joven llorosa y cogió al pequeño Harry en sus brazos.

-Arriesguémonos.- Dijo casi esperanzado el hermano mayor.

-No lo hagas, Mamá.- Susurro el pequeño Harry en el oído de su joven madre mientras varias gotas de lágrimas caían al suelo.- No quiero que te vayas.- Y la abrazo como si fuera la ùltima ves que la vería.//

... Y de hecho, lo fue.

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Evil Angel |Harry Styles|Donde viven las historias. Descúbrelo ahora